El futuro del cannabis (parte 2)

Elizabeth Erhardt
05 Oct 2022

El futuro del cannabis depende de varias cuestiones como romper con la estigmatización y la inseguridad jurídica, garantizar los Derechos fundamentales e igualar la brecha de género. Analizamos los distintos aspectos en este artículo y evaluamos los caminos posibles.


Cooperativismo

Jorge Moruno, diputado de la asamblea de Madrid por Más Madrid, dijo en el foro político en Expogrow: “Hay que evitar por toda costa que vengan buitres financieros, grandes fondos financieros que acaparen y acaben absorbiendo la riqueza producida por el cannabis”, y propone: “Habría que avanzar hacia un modelo que fomente y priorice la creación de cooperativas”.

 

Caminos posibles

Si se opta por regular fomentando el cooperativismo en lugar del oligopolio farmacéutico como propone el PSOE otorgando todas las competencias en materia del cannabis a la AEMPS, promoveremos la igualdad social y económica. De lo contrario, nos encontraremos con todas las consecuencias de la prohibición fuertemente agravadas, alejando las bondades del cannabis de las personas y enriqueciendo aún más a las corporaciones más ricas del mundo.

 

Igualdad de género

Cuando hemos hablado con Janelle Rinehart-Roombos, usuaria de cannabis medicinal y coordinadora de marketing y divulgación para una compañía del sector cannábico de Illinois, nos ha dicho: “He visto principalmente hombres en la toma de decisiones y roles de liderazgo. He visto hombres recibiendo ascensos en lugar de mujeres, incluida yo. Me aventuraría a decir que casi el 100% de las compañías de cannabis en Illinois tienen CEO masculinos. Para mí, eso no es un reflejo de la verdadera comunidad alrededor del cannabis. Los entusiastas del cannabis son diversos, diferentes y acogedores. Espero que podamos seguir haciendo presión contra la exclusión que a menudo enfrentamos de un mundo del hombre corporativo y apoyarnos mutuamente”.

En nuestra entrevista con Sara Dritz-Villagran, gerente de éxito del cliente para StashStock llc, una compañía estadounidense de tecnología de trazabilidad de cannabis, ella nos dijo: “Veo que hay un vínculo especial cuando se habla con mujeres en el ámbito del cannabis. Veo a muchas más mujeres emprendedoras que ingresan en el sector, lo cual es muy emocionante. Con las mujeres entrando más en el cannabis, estoy viendo muchos cambios positivos. Se están diseñando y comercializando más productos para las mujeres que son muy geniales. Creo que hay otro nivel de potencial y compasión que traen mujeres que ingresan en el sector. Trae accesibilidad a las madres, las abuelas y otras usuarias de cannabis. Esto es muy emocionante porque todos quieren ver personas como ellas en este espacio, por lo que cuanto más variedad de personas podamos emplear, mejor para la industria”.

Estos puntos de vista nos muestran que el sector cannábico en uno de los países con la industria más desarrollada, siguen siendo espacios dominados por hombres, pero vislumbran que es una tendencia que comienza a equilibrarse poco a poco. 

 

Caminos posibles

Si la tendencia de equilibrar a hombres y mujeres en la industria cannábica continúa, nos encontraremos con una industria y un sector más prósperos en los que convergen las mejores habilidades de hombres y mujeres para potenciarse y brindar lo mejor de sí. Si esta tendencia se revierte y los puestos de liderazgo continúan dominados por hombres, nos encontraremos con un futuro igual al pasado que conocemos: Un mundo competitivo, salvaje y tenaz, sin compasión ni sensibilidad. 

 

 

Derechos fundamentales

Reconocer los Derechos fundamentales es la gran deuda pendiente que va profundizando la guerra contra las drogas a medida que avanza. En este tema, Fermín Les del Partido Cannábico Luz Verde dijo en el foro político de Expogrow: “Hay que poner el acento en las personas. Ese tiene que ser el eje: Las personas y los derechos fundamentales, que están siendo vulnerados en este país día a día porque unos políticos así lo quieren”.

Desde otro lado del mundo, Janelle Rinehart-Roombos también denuncia estas consecuencias y reclama justicia para las personas afectadas: “Creo que uno de los mayores desafíos es reconocer y rectificar la guerra contra las drogas. Su impacto es enorme y necesitamos brillar toda la luz que podamos sobre esto. Hay muchas personas, en su mayoría hombres blancos, que hacen miles de millones de algo que estuvo en una prohibición fallida durante mucho tiempo hasta recientemente. Además, la industria del cannabis debe examinar la cultura del cannabis que existía simultáneamente, mientras que la narrativa del cannabis se proyectaba como pecaminosa. La gente de cannabis ha estado en los callejones y sótanos de la espalda oscura durante mucho tiempo. Existe una gran desconexión entre el cannabis corporativo y la cultura de amabilidad, inclusión y sostenibilidad que he presenciado en la comunidad de cannabis. En mi opinión, lo positivo que veo en el cannabis es que más personas han comenzado a comprender cuán perjudicial fue la guerra contra las drogas y están ayudando a hacer cambios para las personas afectadas por la guerra contra las drogas, como alojar clínicas de expunción (el método para borrar todos los registros oficiales de una detención y un caso criminal) y llevar a esos productores y personas legendarias a roles clave en la industria del cannabis. Necesitamos reconocer el impacto enormemente horrible que la guerra contra las drogas ha tenido y sigue teniendo en las familias. Me imagino una escena de cannabis más amable, segura, educada e inclusiva para el futuro. Esta planta representa un pasado tumultuoso que sigue siendo escrito por políticas arcaicas, sin educación, ni iluminadas. Creo que las personas anhelan una experiencia inclusiva, especialmente a la luz de una transformación épica de prácticamente todos los sistemas construidos hasta ahora”.

 

Caminos posibles

Marchar firmes hacia la garantía de nuestros Derechos fundamentales es el único camino hacia un mundo mejor. Cada vez que nos salimos de esta senda estamos condenando nuestro futuro. 

 

El futuro es incierto y no lo podemos adivinar. En el análisis de este artículo hemos puesto sobre la mesa las cartas con las que jugamos. Veremos qué sucede. Si aún no lo has hecho, lee la parte uno de este artículo para comprenderlo en su totalidad.

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Elizabeth Erhardt