Agosto, mes de la Pachamama
Aunque el mes de la Pachamama sea originario de las culturas indígenas, el contexto actual hace más necesario que nunca sintonizarnos con esta ceremonia, su uso y concepto. En un contexto prohibicionista que afecta a plantas sagradas como el Cannabis y la coca, de estigmatización y discriminación social como el que hemos mencionado reiteradas veces, donde no se respetan los derechos humanos y la cultura parece adoptar una forma grotesca y vacía, la sabiduría que transmite la ceremonia de la Pachamama resulta digna de atender.
El 1 de agosto fue el día de la Pachamama. El día de la Pachamama nace de los pueblos indígenas quechua (quichua) y aimara. Los quechuas son originarios de Perú, Bolivia, Ecuador, Argentina, Chile y Colombia, mientras que los aimara son originarios de Perú, Bolivia, Chile y Argentina. Eleodoro Moscoso Esteban, Subdirector Nacional Norte de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (CONADI), expresó con las siguientes palabras la importancia de este día:
“Este es un día muy importante para nuestros hermanos y hermanas indígenas porque conmemoramos el día de la Pachamama, fecha que nos permite agradecer y bendecir los frutos que ofrenda la madre tierra.”
La función de la ofrenda a la Pachamama
Este artículo de la CONADI explica la función que tiene el día de la Pachamama diciendo:
“La ofrenda es una manera simbólica en la cual el hombre devuelve a la Pachamama lo que ha tomado de ella, con el fin de restablecer la reciprocidad entre el ser humano y la naturaleza.”
Carlos Candia, del Centro de Estudios Cusqueños “Ayni”, nos invita en el vídeo que puedes ver a continuación, a unirnos para expresar gratitud hacia nuestra Madre Tierra así:
“Nosotros invitamos a la gente a que nos siga, no a nosotros como institución o persona, sino en esta gratitud que tenemos hacia nuestra madre tierra.”
Frida Callañaupa, antropóloga de la Dirección de Cultura de Cuzco, hace hincapié en el vídeo en mantener firmes los valores que sostienen a la ceremonia:
“Debemos conservar la esencia de la cultura andina, no mezclar conceptos ajenos al mundo andino, ser conscientes, cuidar el sitio donde vamos a hacer la ceremonia y conservar la esencia que hemos aprendido de nuestros ancestros.”
La coca, otro patrimonio secuestrado
Además de la ceremonia de agradecimiento a la Pachamama en el vídeo, se muestra el papel fundamental que ocupa la hoja de coca en la misma. En el boletín nº17 del Observatorio del Patrimonio Cultural y Arqueológico (OPCA), se recopilan las problemáticas que giran en torno a esta planta sagrada. En el artículo de Nina Britto contenido en ese mismo boletín denominado “Historia doble de la coca”, se muestra el punto de inflexión entre el valor cultural de la planta y el fracaso de la prohibición.
“Consumida desde tiempos inmemoriales, la hoja de esta planta sagrada ha sido para muchos pueblos indígenas a lo largo y ancho del país una puerta hacia la lucidez mental con la que se le da vida a una serie de ritos personales y colectivos con los que se construye autoridad, identidad y territorio. Sin embargo, para la Colombia mestiza y urbana que vive aglutinada en ciudades grandes e intermedias, municipios y cabeceras, la coca es solo la materia prima de uno de nuestros productos de exportación más rentables y problemáticos, una protagonista siempre vergonzante de nuestra historia contemporánea.”
Esta historia bipolar resuena con la del Cannabis, donde también podemos percibir dos frentes que tienen ideas enfrentadas: el Big Pharma, y el de las personas que en lugar de luchar por beneficios económicos, luchan por bienes patrimoniales de la humanidad como el uso a conciencia de una planta curativa. Podemos ver este punto cuando Nina Britto dice:
“Los cultivadores que enfrentan la arremetida violenta del estado, los actores armados, las organizaciones criminales y hasta mercenarios extranjeros, encarnan esta historia bipolar entre lo sagrado y lo mercantil y como tal siguen divididos en dos grandes frentes.”
Nina Britto concluye su obra enmarcando este conflicto en la democracia que pretendemos construir.
“El destino de la planta es también el de nuestra democracia, entendida ésta como un acuerdo político para la pluralidad y la protección de la increíble diversidad de mundos de sentido y saberes que conforman el tejido social y el entramado histórico de la nación.”
El concepto de “Pacha” como remedio para el cambio climático
El maravilloso trabajo presentado en 2019 por Leonora Arriagada Peters (que podrás descargar a continuación) titulado “Avatares de la forma en el espacio-tiempo Pacha” explica en detalle el potencial de este concepto para restablecer el equilibrio entre los seres humanos y los procesos de la naturaleza. En este artículo se explica que la historia precolombina contiene “acabos de mundo” estrechamente vinculados al descuido de normas básicas de convivencia humana y la despreocupación colectiva por mantener y cuidar el equilibrio de la Pachamama. Leonora nos indica que el concepto de Pachamama hace referencia a un sistema interrelacionado y a la experiencia milenaria de la construcción colectiva de una economía de reciprocidad.
El concepto de “Pacha” desafía al del espacio-tiempo
Según un estudio de Estermann publicado en 2008, el concepto de “Pacha” es clave por su riqueza en acepciones y connotaciones como tal vez lo sea el vocablo “logos” en griego o “esse” en latín. La obra de Leonora nos dice que la definición de Pacha amplía la de espacio-tiempo utilizada hasta hoy. La definición de Pacha incorpora al espacio-tiempo la idea de materia-espíritu. De esta forma, la Pacha es generadora de vida en el espacio-tiempo y se encuentra en constante cambio de la materia-espíritu.
Para comprender esta idea debemos recordar que en las culturas precolombinas el concepto de tiempo es distinto. En estas culturas el tiempo no es lineal como contamos en nuestro mundo, sino que es circular y sigue un patrón fractal de ciclos, por lo que éste se mueve en círculos concéntricos, es decir, un tiempo que vuelve una y otra vez evolucionando. Este concepto de tiempo aporta la idea de movimiento, conduce a la metamorfosis y a una consecuente transformación. Podemos esclarecer la importancia del espíritu evolutivo del concepto de Pacha utilizando las siguientes palabras del texto citado:
“El concepto panandino Pacha, polisemántico, polifacético y polifuncional, posibilita nuevos horizontes, invita a ver la vida personal y colectiva entendida como una unidad en un contexto de complementariedad proporcional dual y plantea el cuidado de las justas vinculaciones entre los polares como desafío constante. Pacha entiende la vida, las ideas y la vida de las ideas desde sus inicios como un proceso tetradimensional, insertas en un contexto en que las formas/ideas y su correspondiente expresión formal están sujetas a mutaciones y cambios constantes, cíclicos y relativos. Un escenario en que el avatar de las ideas/formas está sujeto a las leyes del espacio-tiempo Pacha.”
Pachakuti, el renacimiento de la pacha
Los cambios que se entienden como un acabamiento y un renacimiento del Pacha se denominan “Pachakuti”. Una publicación de Milla Euribe en 1990 describe la importancia de observar al Pachakuti así:
“La observación del Pachakuti, el Pacha como maestro del cambio, abre nuevos horizontes. La observación de esta mutación y el análisis de las recurrentes regularidades del proceso, permiten entender el pasado y ofrecer herramientas para la planificación del futuro próximo y desconocido. Este entendimiento provee la posibilidad de planificar-modelar, de dar forma a un futuro que traerá consigo ineludiblemente elementos seriales recurrentes del espacio-tiempo pasado, pero de forma nueva y diferente: ‘Pachacuti’ es el concepto que indica la noción de ciclo, que es retorno al mismo principio y crecimiento por unidades o etapas de desarrollo.”
La sabiduría precolombina en la agricultura
Papakancha es la unidad matemática relativa que utilizaban las poblaciones precolombinas. Las dimensiones de la Papakancha se estiman en función del suelo, el tiempo y el clima, según informa Rostoworowski Tovar de Diez Canseco en 1978. Esta dimensión corresponde a la superficie necesaria para cultivar patatas y obtener siempre la misma cantidad de cosecha, por que que la cosecha es el objetivo principal. Este tipo de cultivo que busca “alianzas justas entre opuestos” propició el policultivo, las asociaciones entre diversos cultivos, la rotación de suelos, y el desarrollo de una epigenética que permitió el desarrollo de cerca de 4.000 variedades distintas de patatas. Con palabras del artículo que mencionamos anteriormente, este desarrollo significa “una herencia de saberes que pudiera ofrecer orientación en aras de resolver el desafío de una sana alimentación global.”
Esperamos haber transmitido en este artículo el inmenso valor que habita en culturas que mantienen una estrecha y sana relación con la naturaleza. Esa es la única idea que puede llevar al Cannabis a expandir su máximo potencial: Mantenerlo siempre en armonía con la naturaleza, y para eso debemos aprender a respetar y comprender a las plantas.