Mejores artículos del periódico Soft Secrets 2023

En la primera edición de este año que está a punto de concluir, nos encontramos con este artículo de Mr. José con información práctica y útil que seguramente te resulte relevante:

¿Cómo ahorrar energía en el cultivo indoor?

 Para que las plantas sean capaces de utilizar una alta intensidad de luz necesitan recibir suficientes nutrientes, así como CO2 extra y el medio ambiente debe tener una temperatura y humedad óptimas. Incluso cuando todas estas condiciones se dan, no compensa pasarse con la intensidad de luz.

He dicho que cuanta más luz, mejor será la cosecha, pero esto sólo es ver- dad hasta cierto punto. Para ser más preciso, necesito utilizar unidades de PPFD, que es, como muchos lectores de Soft Secrets saben, la densidad de fotones fotosintéticamente activos que caen sobre un área determinada. La PPFD se mide en μmol/m2s y el valor recomendado para el cultivo de interior está entre 250 y 1500 μmol/m2s, dependiendo en qué fase del ciclo de vida estén las plantas. Una cosa más que cito para que te hagas una idea, en un día soleado de verano se alcanzan 2000 μmol/m2s.

çMuchos experimentos han demostrado que cuanto mayor es la PPFD, mayor es la producción absoluta por superficie de cultivo. Ahora vamos a hablar de eficiencia, que consiste en calcular cuánta energía hace falta para cultivar un gramo de materia vegetal seca. En este caso, la curva alcanza su pico entre 700 y 1000 μmol/m2s y a partir de ahí la eficiencia empieza a decrecer. En otras palabras, se puede obtener una mayor producción por área de cultivo, aumentando la intensidad de la iluminación, pero solo hasta cierto punto. A partir de un punto deja de salir a cuenta con relación a la electricidad consumida.

Te voy a dar un ejemplo práctico: Cuando probamos un nuevo sistema LED teníamos una PPFD de 900 μmol/m2s con un consumo eléctrico de 490 W por m2. La producción fue de 850 g/m2, lo que se traduce en 1,73 g/W. En total, la luz estuvo encendida durante 1158 horas y gastamos 113,48€ en electricidad para las lámparas, lo que da una media de 0,141 €/g. El segundo grupo de plantas recibió una dosis de PPFD de solo 750 μmol/m2s con una potencia de 420 W por m2. La producción fue 780 gramos, que son 70 gramos menos que en el primer caso, pero la eficiencia fue mayor ya que obtuvimos 1,85 g/W y el coste de la electricidad usada para iluminar cayó a 97,27€. Por tanto, costó 0,124 €/g a diferencia de costes es de casi un 14%, que no es una diferencia despreciable. Un ciclo de cultivo por metro cuadrado costaría 16,24 € menos y eso era cuando un kWh costaba 0,25€, hoy en día el ahorro absoluto sería mucho mayor, por supuesto.

Esto quiere decir que si quieres aumentar la eficiencia a la vez que reduces los costes y no te importa obtener una cosecha algo menor de tu zona de cultivo, puedes reducir la intensidad de luz hasta 750 μmol/m2s. Este parece ser la ratio más favorable desde el punto de vista coste/ producción.

El requisito básico para un cultivo efi- ciente es, por supuesto, usar fuentes de luz de alta calidad, tanto si son LED o luces de descarga de alta intensidad (sodio o halogenuros metálicos). Si no necesitas el calor que emite la fuente de luz, elige LEDs.
Por ejemplo, al cultivar en un pequeño cultivo de interior, de un metro cua- drado, obtendrás claramente mejor resultado con un sistema LED de unos 400W que con una lámpara de sodio de la misma potencia.

Lee este artículo y muchos más en la edición 1 de Soft Secrets 2023.

En la segund edición de 2023, i-60r nos brinda este artículo indispensable para optimizar nuestros recursos en el cultivo:

Cultivando al límite: ¿Cuál es el tamaño y número de plantas que podemos tener?

Las únicas reglas que pasarían el juicio científico serían:

• En jardines de interior considerar la potencia en vatios y la variedad de plantas. 
• En exterior, deberían ser consideradas la cantidad promedia de luz que habría de tener y el tamaño del dosel del jardín, es decir, la capa de ramas y hojas formada por las copas de las plantas, que se encuentran cubriendo toda el área.

Las condiciones del dosel son muy diferentes de las condiciones del suelo. Durante el día, el dosel es más seco y caliente, limita la cantidad de luz que alcanza las zonas que se encuentran bajo él y condiciona el reparto del agua de precipitación hacia el suelo. En consecuencia, las partes bajas de los cultivos de alta densidad tienen, considerablemente, menor cantidad de vegetación que el resto de las capas.

Para medir la densidad se utiliza el índice de área foliar o “LAI”, por sus siglas en inglés. Es la cantidad de área foliar por unidad de área de superficie de tierra (superficie foliar/área de tierra que abarca (m2/ m2)). Sirve para predecir la producción primaria fotosintética, evapotranspiración y también como herramienta de referencia para el crecimiento del cultivo.

Lee la segunda edición de Soft Secrets 2023 aquí.

En la tercera edición de Soft Secrets 2023 nos encontramos con el siguiente artículo que brinda una perspectiva botánica a un proceso sumamente relevante para la persona qe cultiva:

¿Cómo promover la fotosíntesis?

Ahora que conocemos como es la luz y como es captada por la planta de marihuana, veamos cómo llega. La luz del sol incide en nuestro planeta en un ángulo distinto según el lugar donde nos encontremos. Así, en el ecuador del planeta forman un ángulo de 90° y a medida que nos alejamos este ángulo se incrementa, repartiendo la misma cantidad de luz en una mayor superficie terrestre. Tener presente está idea te servirá si quieres entender cómo se cultiva en distintos sitios e interpretar qué adaptaciones tienen las plantas según la zona geográfica de su procedencia genética. Además de la distancia de nuestra ubicación con respecto al sol, los otros factores que hay que tener en cuenta para entender la luz que alimenta a nuestro cultivo son las estaciones del año y el transcurso del día, dos consecuencias de dos movimientos terrestres diferentes: rotación y traslación.

Cómo sabemos, existe una temporada idónea en el año para el cultivo, otra más adversa pero que igual permite obtener un resultado, y en muchos sitios hay otra época que imposibilita por completo el cultivo. Cuando nuestro planeta Tierra se acerca al sol en verano, nuestras plantas reciben mayor cantidad de luz natural. Por el contrario, a medida que nos alejamos del sol en invierno gracias al movimiento de traslación que hace el planeta, nuestras plantas reciben menos luz hasta el punto de detener su desarrollo. Comprender esta interacción resulta útil para complementar adecuadamente la luz y optimizar la planificación y los recursos del cultivo.

La rotación del planeta es el movimiento que impulsa el día y la noche, el reloj diario que tiene que dirigir a la persona que cultiva. En función de la incidencia de la luz en el día, la persona que cultiva debe encontrar el momento ideal para asistir a la planta en sus necesidades. Por ejemplo, si la planta necesita un riego en verano, debe hacerse a última hora, o a primera en su defecto. Por el contrario, si es invierno, se debe hacer por la mañana justo cuando el frío se va y el calor asoma. Otro ejemplo es la aplicación de fitosanitarios que debe hacerse siempre a última hora del día.

Durante el día, las plantas captan el dióxido de carbono del aire en el proceso de fotosíntesis. Un nivel elevado (no olvidemos que todo tiene su límite y equilibrio) de dióxido de carbono acelera el proceso fotosintético, si la planta dispone de los otros recursos que requiere para desarrollarse. Un aumento del dióxido de carbono requiere un riego más abundante y un aporte extra de determinados nutrientes. Además, el aumento del dióxido de carbono y la consecuente disminución de la presencia de oxígeno podría crear un ambiente adecuado para la proliferación de determinadas plagas que afecten al cultivo.

Paradójicamente, la defoliación implica quitar las hojas que son el epicentro de la fotosíntesis, pero esta práctica permite que el proceso ocurra cerca de los sitios donde se producirán cogollos considerables, y por ende permite aumentar la eficiencia energética del proceso. También es recomendable quitar las hojas de abanico que obstaculizan que la luz alcance determinadas partes de la planta.

Lee la tercera edición de Soft Secrets 2023 aquí.

En la cuarta edición de este año i-60r nos vuelve a deleitar con un artículo fundamental sobre uno de los problemas más frecuentes en el cultivo.

Podredumbre y muerte en el Cannabis: La botritis y los hongos en las plantas de marihuana

El problema más devastador para cualquier cultivador. La Botritis es un hongo que destruye rápidamente nuestros cogollos. Los síntomas aparecen cuando observamos en un cogollo normal, que las hojas se vuelven grises o amarillas. Tocar la hoja si es que sale fácilmente y si está esponjosa para ver si existe un tipo de hongo o si es una deficiencia nutricional. Tendremos que sacrificar un cogollo y abrirlo como si de una autopsia se tratara para ver si está negro por dentro.

Si es así, en un par de días se puede llenar el jardín de hongos y perder absolutamente todo. Se debe reducir la humedad y aumentar la ventilación odo lo que sea posible incluyendo ventiladores de pie directamente sobre las plantas. Cortar los cogollos infectados y sacarlos del cuarto de cultivo lo más rápido posible. Luego se puede aplicar un fungicida orgánico a base de ajo y cebolla en una solución de agua rociada. En el lugar de cultivo siempre debemos retirar las hojas amarillas o que caen al suelo para evitar insectos y hongos.

En interiores, evitar crear las condiciones favorables para el desarrollo del moho medi- ante el control de la humedad y temperatura. El moho marrón puede considerarse como una enfermedad ambiental creada por el exceso de humedad. Mantener la humedad por debajo del 50%. Regar cuando las luces están encendidas. Retirar y descartar todo el material orgánico seco o muerto de las plantas. Hay que asegurar que no hay humedad en las hojas o cogollos cuando las luces se apaguen. El moho gris suele ser causado en interior por una alta humedad ambiental.

En exteriores, no podemos controlar el clima, pero podremos prevenir que se pudran nuestros cogollos. El Bacillus subtilis es una bacteria que ataca la Botritis. Puede ser aplicado mediante fumigación sobre las plantas como preventivo. El bicarbonato de potasio (KHCO3) junto a un elevador de pH, cambiarán el pH del entorno de alcalino a ácido. Los entornos alcalinos inhiben la germinación de moho y hongos incluyendo el moho gris. El aceite de Neem y el aceite de sésamo crean una barrera y no permiten la germinación del moho.

Lee el cuarto número de Soft Secrets 2023 pinchando aquí.

En la quinta edición de Soft Secrets 2023, Dryas nos habla de una de las últimas tendencias científicas en el cultivo de cannabis: El cultivo in vitro.

Cultivo in vitro de Cannabis sativa: La última frontera

Vamos a olvidarnos por un momento de todas las complicaciones que conlleva alcanzar la esterilidad en PTC y veremos algunas de las ventajas que nos ofrece una vez alcanzada. En primer lugar, el envase preparado con el explanto (parte o tejido del organismo vegetal introducido), no se abre en ningún caso ni para regar ni para ventilar.

Todos los envases empleados en PTC permiten el intercambio de gases con el exterior, es decir, no son totalmente herméticos, pero impiden la entrada de contaminantes al medio. Lo anterior junto con la esterilidad, hace que los cultivos PTC, en muchas ocasiones, sean los únicos candidatos para pasar regulaciones fitosanitarias en la introducción de material vegetal en otros países. De la propia condición de esterilidad se derivan muchas otras ventajas en la práctica, como el hecho de que, a pesar de las condiciones de extrema humedad dentro del envase, ningún tejido vegetal es atacado o degradado por microorganismos, ya que están ausentes. Como se ha comentado, el medio de cultivo está definido y controlado, es decir, se conoce al detalle que cantidades de sales, hormonas, compuestos, etc., contiene el medio, y quizás aún más importante, que no contiene el medio. Esto permite establecer relaciones más directas de repuestas de la planta a la presencia / ausencia de ciertos compuestos.

Existen muchas más ventajas del PTC, pero de todas ellas, es interesante resaltar, por ser contraintuitivo, las virtudes de un sustrato tipo gel. Ampliamente usado en ciencias de la vida, los medios de cultivo gelificados prácticamente forman una extensión del propio organismo para obtener nutrientes, sustancias estimulantes del desarrollo o aquello de lo que el investigador desea evaluar el efecto. Son tan idóneos que cualquier microorganismo vivo crecerá de manera visible en ellos, permitiendo evaluar la esterilidad de manera visual.

El cultivo in vitro es una de las herramientas más versátiles de la biotecnología vegetal desde los años 80. No es necesario hablar de perspectivas para el Cannabis si conocemos, por ejemplo, que hoy en día no sería posible la producción comercial de cítricos en nuestro país de no ser por el cultivo in vitro, ya que fue clave para eliminar el virus de la tristeza de los cítricos que asolaba los cultivos durante buena parte de la segunda mitad del siglo pasado. Desde la reciente legalización en numerosos países, los esfuerzos e inversión dedicados a la investigación de Cannabis in vitro han crecido exponencialmente, ejemplo de ello es el cada vez mayor número de artículos científicos publicados sobre protocolos de cultivo para Cannabis de 2021 en adelante.

El mundo de posibilidades que ofrece el cultivo de tejidos es prácticamente inabarcable, desde los objetivos más sencillos como el establecimiento de cultivos limpios, mantenimiento de genéticas, micropropagación, etc. Hasta técnicas como el cultivo de meristemos, o anteras para crear líneas puras en una sola generación.

Lee la anteúltima edición del año de Soft Secrets aquí.

Una vez más i-60r nos vuelve a sorprender con sus artículos prácticos y útiles para toda persona que cultiva. En este oportunidad nos habla de las raíces.

Respiración en la oscuridad: ¿Cómo se forman las raíces en el Cannabis?

El conocimiento de la estructura interna del tallo y ramas es de ayuda para entender el origen de las raíces adventicias, que son aquellas que no provienen de la radícula del embrión de la planta, sino que se originan en cualquier otro lugar, por ejemplo, en el vástago, tallos subterráneos y en raíces viejas. Independientemente de si tienen o no ramificaciones, suelen tener una forma y tamaño relativamente homogéneo, formando sistemas radiculares fibrosos.

El desarrollo de estas raíces puede dividirse en tres etapas:

1. La iniciación de células meristémicas situadas justo por fuera y entre las fajas vasculares o raíces iniciales.
2. Se produce una diferenciación de estas células meristémicas en xilema primario (tejido vegetal que se encarga de transportar agua, sales minerales y otros nutrientes necesarios para la planta desde la raíz hasta las hojas), emergiendo como una nueva raíz lateral, creando su propio ápice y capa de raíz.
3. La aparición y crecimiento de nuevas raíces por medio de la rotura de tejido antiguo del tallo, estableciendo conexiones vasculares con el nuevo brote.

Mientras la raíz inicial se divide, los grupos de células toman la apariencia de una pequeña punta de raíz. Un sistema vascular se forma con la proximidad de fajas vasculares y la raíz continúa creciendo hacia el exterior, a través de la corteza, hasta que el extremo de la raíz emerge desde la epidermis del tallo. La iniciación del crecimiento de la raíz generalmente comienza durante la primera semana, apareciendo las pequeñas raíces durante las 4 semanas posteriores. A menudo, una masa irregular de células blancas, de tejido calloso, se forma en la superficie del tallo adyacente al área de iniciación de la raíz. Este tejido calloso no tiene incidencia en la formación de las raíces. Es una forma de tejido regenerativo, siendo una señal de que las condiciones son favorables para la iniciación de la raíz.

Las bases fisiológicas de la iniciación de la raíz son bien conocidas, permitiendo la ventaja de modificar los sistemas de enraizamiento. La planta, naturalmente desarrolla sustancias tales como auxinas, citoquininas y giberelinas. Responsables en gran parte por el control de iniciación de la raíz y la intensidad por la cual esta se va formando. Las auxinas son consideradas las más influyentes. Las auxinas y otras sustancias de crecimiento están involucradas en el control de todos los procesos de la planta:
El crecimiento del tallo, la formación de las raíces, la inhibición lateral de los cogollos, la maduración de las flores, el desarrollo de las frutas (en otras plantas frutales), y la determinación del sexo. Se debe tener un gran cuidado al aplicar sustancias de crecimiento adicionales para no provocar conflictos o reacciones negativas en los procesos naturales delaplanta. El mecanismo de acción de las auxinas todavía es motivo de investigación por la ciencia moderna.

Lee la última edición de Soft Secrets 2023 aquí.

El conocimiento y la innovación en el campo del cannabis están en constante evolución, por lo que más allá de estos temas, podemos esperar nuevas investigaciones y técnicas sorprendentes en el futuro. Para estar al tanto de las últimas tendencias, te invitamos a seguir leyendo el periódico cannábico preferido de las personas que cultivan cannabis en el 2024.