¿En qué casos usar cannabis medicinal?

Elizabeth Erhardt
10 Oct 2022

En este artículo recordamos las evidencias que sugieren que el cannabis puede ser útil en una variedad de enfermedades.


Depresión

Skolnick et al. explicaron en 2001 que es bien reconocido que uno de los componentes de la compleja experiencia provocada por el cannabis es la elevación del estado de ánimo. Los estudios de Grinspoon y Balkar en 1998, de Gruber et al. en 1996, y de Johns en 2001, indican respecto al efecto antidepresivo del cannabis, que los pacientes confirman resultados beneficiosos por su uso en trastornos depresivos.

 

Ansiedad

A principios de agosto, The Journal of Clinical Psychiatry publicó el estudio titulado Cannabidiol para los trastornos de ansiedad resistentes al tratamiento en jóvenes: un ensayo abierto, en el que se investiga la seguridad y eficacia del cannabidiol (CBD) para los trastornos de ansiedad en jóvenes que anteriormente no responden al tratamiento estándar.

El resultado fue la mejora en la gravedad de la ansiedad medida con la escala OASIS en la semana 12. Las puntuaciones medias de OASIS disminuyeron de 10,8 al inicio a 6,3 en la semana 12, lo que corresponde a una reducción del 42,6 %. Los síntomas depresivos, las puntuaciones de la escala CGI-Severity y el funcionamiento, mejoraron significativamente, y no se presentaron eventos adversos serios ni inesperados.

 

TDAH

Un estudio realizado en Alemania revela que en monoterapia con Cannabis, los pacientes con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) alcanzaron un nivel de síntomas que les permitió participar en el trabajo y la vida social, una mejora de las habilidades de concentración, y reducción de la agitación y la impulsividad.

El 73% de los pacientes con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) alcanzaron un nivel de síntomas que les permitió participar en el trabajo y la vida social. En el 47% de los casos, una mejora de las habilidades de concentración se mencionaron explícitamente. Especialmente útil apareció la reducción de la agitación y la impulsividad.

 

Trastorno autista

En el artículo científico publicado el año pasado en la revista Tendencias en Psiquiatría y Psicoterapia sobre el uso de Cannabis en el autismo, se intenta buscar respuesta a las cuestiones más importantes sobre ese tema, reuniendo y analizando una gran cantidad de información de investigaciones, y sacando conclusiones.

Los endocannabinoides son sustancias que regulan las respuestas socioemocionales, la cognición, las convulsiones, y varias patologías que están presentes en el autismo. En el artículo, incluso se mencionan estudios en los que el CBD fue capaz de cambiar la amplitud y conectividad funcional en regiones del cerebro adulto asociadas al autismo. Además, nos demuestra que el Cannabis y los cannabinoides podrían ser un alivio para muchas personas que tienen este trastorno ya que las podría ayudar en episodios de automutilación e ira, hiperactividad, problemas de sueño, ansiedad, inquietud, psicomotricidad, agitación, irritabilidad y agresividad.

Los cannabinoides también podrían permitir mejorar la sensibilidad sensorial, cognición, atención, interacción social, el lenguaje, la perseverancia y depresión. Según los resultados que expone el artículo, los estudios que utilizaron Cannabis para tratar trastornos del comportamiento obtuvieron mejoras en muchas personas con trastorno autista. Se encontraron mejoras en comportamientos de automutilación, ira, hiperactividad, trastornos del sueño ansiedad, agitación psicomotora, irritabilidad, agresividad, sensibilidad sensorial, cognición, atención, interacción social, cambios en el lenguaje, y depresión.

 

Cáncer

En el año 2015, un grupo de investigadores de la Universidad de California, San Francisco, publicó un artículo en la revista Farmacología clínica y terapéutica sobre el Cannabis en el tratamiento del cáncer. En este artículo, nos recuerdan que los efectos antiproliferativos de las células cancerígenas que tienen los cannabinoides no son ninguna novedad, ya que fueron reportados por primera vez en 1975.

Experimentos científicos indican que hay dos mecanismos por los cuales los cannabinoides ejercen su efecto antitumoral. Por un lado, inhiben el crecimiento de algunos tumores modulando las vías de comunicación celular que intervienen en la detención del crecimiento y en la muerte celular. Por otro lado, inhiben la formación de vasos sanguíneos en las células tumorales, y la migración celular.

Hay evidencias científicas que apoyan los efectos antitumorales de los cannabinoides en distintos tipos de cáncer: Adenocarcinoma de pulmón, glioma (se desarrolla en el cerebro y la médula espinal), leucemia, cáncer de tiroides, neuroblastoma, piel, útero, mama, estómago, colorrectal, páncreas y próstata.

Un aspecto muy positivo del uso terapéutico del cannabis en el cáncer es que no sólo no afecta a las células sanas, sino que probablemente las proteja de la muerte celular. Un estudio realizado por el Programa Nacional de Toxicología del departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos en ratas y ratones, sugiere que los cannabinoides podrían tener un efecto protector contra el desarrollo de tumores. Además, las ratas y los ratones de este estudio que recibieron THC vivieron por más tiempo.

 

Trastorno bipolar

El Dr. Lester Grinspoon y James B. Bakalar hicieron un artículo que evidencia los beneficios del uso de marihuana en personas que tienen trastorno bipolar.

El caso de una mujer de 35 años narra que al consumir marihuana, sus emociones caóticas desaparecían y era invadida por una sensación de calma, paz y bienestar. Su percepción de los demás y de la vida cambiaba radicalmente, y podía tomar control de sí misma. Podía dormir fácilmente y no tenía ningún efecto secundario.

Otro caso de una mujer de 37 años cuenta que cuando tiene episodios de manía, la marihuana la relaja, le ayuda a dormir, y a hablar más despacio. Cuándo está deprimida, en lugar de estar tirada en la cama todo el día, la marihuana la pone más activa. Cuando no consumía marihuana se volvía más irritable y más difícil de tratar.

 

Inflamación

Recientemente se ha publicado un artículo que sugiere que el CBD puede ser útil para tratar enfermedades que se cree que involucran al sistema inmune. Entre ellas se incluyen la artritis reumatoide, la diabetes tipo I y II, la aterosclerosis, el Alzheimer, la hipertensión, la lesión por isquemia-reperfusión, la depresión y el dolor neuropático.

 

Meningitis neumocócica

En un modelo experimental se les indujo meningitis a grupos de ratas que luego fueron tratadas con distintas dosis de CBD durante 9 días. En las dosis más altas se vió que su administración disminuye de la corteza frontal los niveles del factor de necrosis tumoral alfa (TNFA), una proteína del grupo de las citocinas que interviene en los procesos inflamatorios. También se observó que el tratamiento con CBD redujo el deterioro de la memoria provocado por esta enfermedad.

 

Patologías desmielinizantes

Se ha reportado que el CBD tiene un efecto protector contra el daño mediado por el sistema inmune de las células progenitoras de oligodendrocitos (OPC). Éstas células son las que acuden al sitio de la lesión del axón de la neurona y lo remieliniza, es decir, reconstruye la cubierta de mielina que lo recubre  y que permite que se transmita el impulso nervioso. Las evidencias indican que el factor clave en el efecto oligo protector del CBD se debe a que inhibe la vía de estrés del retículo endoplásmico de la célula.

 

Encefalitis relacionada con la sepsis

La sepsis es una respuesta inmunológica exacerbada que produce el organismo ante un agente externo, y que si no se trata rápidamente puede causar la muerte. En un estudio con ratones a los que se les indujo una encefalitis relacionada con la sepsis, se demostró el efecto antiinflamatorio del CBD en esta patología.

 

Encefalomielitis autoinmune

En un experimento realizado con ratones el CBD administrado al comienzo de la enfermedad, redujo la gravedad de los síntomas de la encefalitis autoinmune. Se sugiere que los efectos benéficos del CBD en esta enfermedad se dan gracias a que suprime la actividad de la microglia y promueve la proliferación de las células T involucradas en la respuesta inmunológica.

 

Enfermedades inflamatorias del pulmón

Se probó que el CBD reduce la inflamación en la lesión pulmonar aguda. Estos efectos se probaron en un modelo experimental con ratones. En ese estudio, el CBD disminuyó la migración de leucocitos en los pulmones, la actividad de la mieloperoxidasa en el tejido pulmonar, y la concentración y producción de las citocinas proinflamatorias (TNF e IL-6) y quimiocinas (MCP-1 y MIP-2).

 

Bibliografía: 

García-Gutiérrez M.S.; Navarrete F.; Gasparyan A.; Austrich-Olivares A.; Sala F.; Manzanares J. Cannabidiol: A Potential New Alternative for the Treatment of Anxiety, Depression, and Psychotic Disorders. Biomolecules (2020)

Silva Junior E. A., Medeiros W. M. B., Torro N., Souza J. M. M., Almeida I. B. C. M., Costa F. B., et al. Cannabis and cannabinoid use in autism spectrum disorder: a systematic review. Trends Psychiatry Psychother (2021)

Abrams D. I., Guzman M. “Cannabis in cancer care”. Clinical pharmacology and therapeutics Journal. Junio (2015)

Grinspoon L., Bakalar j. B., The Use of Cannabis as a Mood Stabilizer in Bipolar Disorder: Anecdotal Evidence and the Need for Clinical Research. Journal of Psychoactive Drugs (1998)

Burstein Sumner. Cannabidiol (CBD) and its analogs: a review of their effects on inflammation. Bioorganic & Medicinal Chemistry (2015)

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Elizabeth Erhardt