Cannabinoides y síntomas de cáncer

Elizabeth Erhardt
30 Nov 2022

Delta-9-tetrahidrocannabinol, el principal cannabinoide bioactivo en la planta, ha estado disponible como un medicamento recetado aprobado para el tratamiento de náuseas y vómitos inducidos por quimioterapia contra el cáncer.


Cannabis y cáncer

La evidencia de los sistemas de cultivo celular y los modelos animales han demostrado que el THC y otros cannabinoides pueden inhibir el crecimiento de algunos tumores mediante la modulación de las vías de señalización que conducen a la detención del crecimiento y la muerte celular, así como por la inhibición de la angiogénesis y la metástasis. 

Los cannabinoides pueden ejercer sus efectos antitumorales mediante varios mecanismos diferentes, incluida la inducción directa de la muerte celular transformada, la inhibición directa del crecimiento de las células transformadas e inhibición de la angiogénesis tumoral y la metástasis. 

Una propiedad deseable de los compuestos antitumorales es su focalización preferencial de las células malignas, y los cannabinoides parecen matar las células tumorales sin afectar a sus contrapartes no transformadas, e incluso pueden protegerlas de la muerte celular.

 

Efecto antiemético

Numerosos metaanálisis confirman la utilidad de estos agentes torturados en el tratamiento de náuseas y vómitos inducidos por quimioterapia. Tramer et al. realizó una revisión sistemática de 30 comparaciones aleatorias de cannabis con placebo o antiemético a partir de las cuales estaban disponibles datos dicotómicos sobre eficacia y daño. Se encontró que los cannabinoides eran significativamente más efectivos antieméticos que la proclorperazina, la metoclopramida, la clorpromazina, la tietilperazina, la haloperidol, la domperidona o la alizaprida. Las pautas nacionales antiemesis de la Red Integral del Cáncer recomiendan cannabinoides, entre otras terapias, a considerar como un tratamiento innovador para las náuseas y vómitos inducidos por quimioterapia:

 

Estimulación del apetito

La anorexia, la saciedad temprana, la pérdida de peso y la caquexia son algunos de los desafíos de manejo de síntomas más desalentadores que enfrenta el oncólogo en ejercicio. Dos pequeños ensayos controlados demostraron que el THC oral estimula el apetito y puede ralentizar la pérdida de peso en pacientes con tumores malignos avanzados. Muchos estudios en animales han demostrado previamente que el THC y otros cannabinoides tienen un efecto estimulante sobre el apetito y aumentan la ingesta de alimentos.

 

Analgesia

Los cannabinoides son efectivos en modelos animales de dolor agudo y persistente. Desafortunadamente, aunque la literatura médica cita evidencia de la capacidad de los cannabinoides para reducir el dolor natural, se han realizado pocos estudios en humanos. Los datos clínicos más destacados sobre los efectos de los cannabinoides en el dolor crónico provienen de tres estudios de dolor por cáncer. 

 

Neuropatía

También se ha demostrado que los cannabinoides tienen un beneficio potencial en un modelo animal de dolor neuropático. El dolor neuropático es un síntoma preocupante en pacientes con cáncer, especialmente aquellos tratados con quimioterapia o taxanos a base de platino. Se completó un ensayo aleatorizado y controlado de cannabis inhalado en sujetos con neuropatía periférica relacionada con el VIH. El cannabis redujo el dolor diario en un 34% en comparación con el 17% con placebo. Un 52% de los sujetos del grupo de cannabis informó una reducción de más del 30% en el dolor. El primer cigarrillo de cannabis redujo el dolor crónico en una mediana del 72% en comparación con el 15% con placebo. Dos estudios controlados con placebo de cannabinoides para el dolor neuropático central asociados con la esclerosis múltiple produjeron resultados similares al estudio mencionado anteriormente. 

 

Ansiedad, depresión y trastornos del sueño

La somnolencia es otro efecto secundario común que se puede reformular fácilmente como una mejor calidad del sueño, como se ha informado en los ensayos de nabiximols, así como el cannabis inhalado. Para el paciente con cáncer que padece anorexia, náuseas, dolor, depresión, ansiedad e insomnio, un solo agente que puede abordar todos estos síntomas resulta una herramienta de gran valor. Por lo tanto, el cannabis puede ser particularmente útil en situaciones de atención paliativa o de apoyo.

 

Bibliografía: 

Abrams D.I., Guzman M., Cannabis in cancer care. Clinical pharmacology and therapeutics. 2015

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Elizabeth Erhardt