Países latinoamericanos con cannabis medicinal
Hay varios países que tienen previsto el acceso al cannabis medicinal, pero no todos consiguen un acceso eficaz.
Uruguay fue el primer país latinoamericano en regular el cannabis medicinal. Y cualquier persona puede acceder a ciertos fármacos cannábicos, aunque mayormente con CBD simplemente consultando con un doctor en medicina.
En Chile, aunque persisten vacíos legales, en la práctica el acceso al cannabis de calidad farmacéutica está asegurado por la comunidad, como con las experiencias de la Fundación Daya y algunas importaciones de aceite.
En Argentina recientemente se inauguró la posibilidad de plantar cannabis y hacer la extracción. Además, miles de médicos están recetando cannabis activamente para las personas registradas en el Reprocann.
Colombia es probablemente el país de América Latina que tiene un mejor acceso al cannabis de calidad farmacéutica, es producido en el país y su acceso es real para quien lo necesita.
En Brasil algunas asociaciones de pacientes y familias han conseguido plantar cannabis y hacer la extracción. También existe la posibilidad de traer aceites del exterior, pero a un precio muy caro.
En Ecuador se ha garantizado el acceso al cannabis medicinal pero desde el punto de vista legal, desconociendo al autocultivo y haciendo que las personas de menores ingresos no puedan a acceder a un producto necesariamente eficaz o de calidad farmacéutica.
En Paraguay también existe una ley, similar a la argentina para el acceso a cannabis medicinal pero la única empresa que tiene el monopolio para su distribución y producción no produce. El registro previsto para pacientes de cannabis medicinal tampoco abrió sus puertas.
En Perú el programa de cannabis medicinal está funcionado hace ya unos años y un buen número de doctores lo receta. Pero de las 23.000 personas registradas solo 7000 habían comprado cannabis de calidad farmacéutica.
El acceso al cannabis medicinal en América Latina aún sigue siendo elitista en término generales, salvo algunas excepciones. Ojalá esto cambie rápido.