Temporada electoral
“El cultivo de cannabis ha sido despenalizado”, así titula el abogado Enrique Fornés un artículo de su blog que ha sembrado la ilusión en la comunidad cannabica.
En este artículo, Fornés hace una original interpretación de la nueva Ley de Seguridad Ciudadana. Enrique defiende que al prohibir la ley el cultivo en lugares visibles al público, se sobrentiende que en los lugares no visibles está permitido, según el principio de que lo que no está prohibido, está permitido. Muchos lectores nos han preguntado si estamos de acuerdo. Sin duda el PP nunca ha pretendido despenalizar el autocultivo de cannabis, pero la interpretación de Fornés tiene base legal, aunque es audaz, falta ver con que espíritu la aplicarán los jueces. Lo cierto es que, por desgracia, este septiembre la policía seguirá entrando en los cultivos, nuestra condición de autocultivadores la seguiremos teniendo que demostrar a los jueces. Por eso es necesaria una regulación completa, donde se especifique claramente la cantidad que se puede cultivar, transportar y almacenar. Mientras tanto seguiremos capeando la prohibición como podamos. En todo caso, estamos preparando para el próximo número de Soft Secrets una sorpresa, para que todos nuestros lectores se puedan defender mejor en las intervenciones de septiembre. Atentos al próximo número de Soft Secrets.
Mientras el juego político continua su curso, cada temporada estamos más cerca de lograr nuestros objetivos. El mundo avanza hacia la despenalización. En España hay cultura cannábica muy arraigada, tras más de 20 años de trabajo de la gente. Merecemos estar entre los países lideres en la inminente despenalización, así además de un gran beneficio para la sociedad, también habría una nueva fuente de ingresos, con más trabajo, más cotizaciones y reactivación en todos los sectores: agricultura, manufactura, transformación, turismo, hostelería, medicina, ciencia y muchos otros.
Las elecciones locales y regionales han puesto otro clavo en el ataúd del bipartidismo. PP y PSOE, los dos partidos que han dirigido nuestra persecución, pierden millones de votantes, especialmente el PP, un partido que siempre perjudica a los usuarios de cannabis. Colapsan sin pausa, ni prisa. En las últimas elecciones han perdido más de 2,5 millones de votos. La marca PP está hundida y se percibe como sinónimo de corrupción. Mariano Rajoy sigue con su estilo de esconderse a que pase la tormenta. Más las nacionales ya están cerca y el PP llega muy débil, es incapaz de escuchar a las personas o tener visión de futuro, solo reacciona a la contra, torpemente, como un boxeador medio noqueado, que se tambalea a la espera del golpe definitivo. Hay que darle sin piedad, ni descanso, hasta mandarlo a la lona. Mejor antes que después.
La nueva configuración de los gobiernos locales nos va a beneficiar. Por ejemplo en Madrid sale ganadora Manuela Carmena, mientras que en Barcelona triunfa Ada Colau. Manuela Carmena lleva defendiendo la legalización de las drogas desde hace más de 20 años, el equipo de Ada Colau estuvo reunido antes de las elecciones con CATFAC, comprometiéndose a continuar con el proyecto de regulación de los clubs.
Ni siquiera el PP con mayoría absoluta ha conseguido detenernos, en las próximas elecciones nacionales aún quedaremos en mejor posición. Los cultivadores, durante más de 20 años de lucha, nos hemos ganado el respeto de la sociedad, los medios de comunicación, los jueces e incluso de los políticos. Hay un gran acuerdo social en que el autocultivo no es delito.
El autocultivo nunca desaparecerá. En España hay muchas personas que cultivan sus tomates, acuden a la cooperativa a comprar plantones de tomate, sustrato, fertilizantes y fungicidas. Desde el que cultiva unos tomates cherry en su balcón de la ciudad, hasta los que se hacen un invernadero entero y convierten parte en conserva. Si hay miles de cultivadores de tomates, una planta tan especial y mágica como el cannabis será adoptada de forma masiva, el cannabis acompaña a la humanidad desde la noche de los tiempos, su prohibición cae y la gente volverá a cultivarla en cada rincón.
Por eso es importante que todos los cultivadores y usuarios hagamos piña común para hacer oír nuestra voz, pues la despenalización va a llegar más temprano que tarde. En este sentido la iniciativa #SINOTOCAnohayvoto está poniendo en contacto directo a representantes y representados, puenteando el juego político tradicional. La última campaña fue un éxito total, con un posicionamiento de Pablo Iglesias que fue recogido en los medios de comunicación masivos.
También otra acción política de máximo interés es “La rosa verde”, una Iniciativa Legislativa Popular para regular los clubs de usuarios en Cataluña, Oriol Casals, portavoz de La Rosa Verde, aprovechó la presentación de esta ILP en el Parlamento Catalán para repartir semillas de cannabis y defender el autocultivo. ¡Así sí!. Todos los catalanes a firmar con la rosa verde.
Es inaceptable que se pretenda relegar el autocultivo a cantidades testimoniales. Según comenta, en esta revista, Hector Brotons, un aprovisionamiento anual de hasta 10 gramo diarios sería totalmente compatible con la jurisprudencia que emite el Tribunal Supremo, a partir de lo señalado por el Instituto Nacional de Toxicología. Esto permitiría una legalización plena donde se primen los derechos de usuarios y cultivadores, con un aprovisionamiento anual de hasta 3650 gramos. Reclamar esta cantidad tiene una base legal totalmente justificada, los cultivadores hemos luchado duro muchos años. Nos han hecho sufrir las de Caín, pero ahora tenemos a la prohibición contra la pared y no vamos a negociar a la baja en ningún caso. Queremos una legalización de verdad, que tenga en cuenta los derechos de todas las personas usuarias, además de abrir el camino al sector económico del cannabis, en el que podemos ser referencia mundial, igual que hacemos, por ejemplo, con el vino.
Ha sido mucha tiempo de correr cuesta arriba, ahora queremos que se nos respete de verdad, no más cuentos, no más parches. Mas allá de los cálculos electorales, de los juegos de ego, las personas somos lo primero. A los políticos hay que explicarles que solo falta que hagan su trabajo, pues los jueces absuelven a los cultivadores y hay mayoría social partidaria de la legalización,
Nos llevan persiguiendo más de 20 años y no queremos tolerarlo más. Tenemos una trayectoria muy solido detrás. Ya madura la cosecha. Llegamos al final de una gran carrera de fondo anónima, en la que vamos a ganar, aunque nadie en concreto pase a recoger la medalla. Será el triunfo de todos los cultivadores que hemos sembrado la libertad, planta a planta, juicio a juicio, cada temporada miles de personas esforzándonos juntas. Este año para los políticos es temporada electoral, pero para nosotros todos los años es temporada. Lo nuestro es disfrutar cada mes, cada día, cada presente, germinar libertad, cultivar la vida. Y sobre todo amar.