Crisis transpersonal por psicodélicos

Los beneficios de la emergencia espiritual

No solo el uso de drogas psicodélicas desencadena una emergencia espiritual o crisis transpersonal, cada vez más personas están teniendo este tipo de experiencias que pueden atribuirse a su práctica de yoga, zen, varias meditaciones de movimiento, pranayama, maniobras de kundalini, ejercicios psicoenergéticos budistas tibetanos, oración cristiana y otras formas de participación espiritual profunda y sistemática y autoexploración. Según el estudio de Christina Grof y Stanislav Grof publicado en 2017 en el International Journal of Transpersonal Studies titulado Spiritual Emergency: The Understanding and Treatment of Transpersonal Crises, si las crisis transpersonales se entienden y tratan adecuadamente como etapas difíciles en un proceso de desarrollo natural, pueden resultar en sanación emocional y psicosomática, resolución creativa de problemas, transformación de la personalidad y evolución de la conciencia. En este sentido, el término “emergencia espiritual” sugiere una crisis, pero también sugiere el potencial para elevarse a un estado superior del ser.

¿Crisis evolutiva o enfermedad mental?

Ya en el año 1985, el Dr. Stanislav Grof advertía en su publicación Beyond the brain que existe una creciente evidencia de que muchas personas que experimentan episodios de estados no ordinarios de conciencia acompañados de diversas manifestaciones emocionales, perceptivas y psicosomáticas, están atravesando una crisis evolutiva en lugar de sufrir una enfermedad mental. La psiquiatría tradicional no reconoce la diferencia entre experiencias místicas y psicóticas, sino que considera a todos los estados inusuales de conciencia esencialmente patológicos. Por lo tanto, la psiquiatría utiliza de forma rutinaria e indiscriminada enfoques de control y supresión para poner fin a tales experiencias. Sin embargo, en el caso de las crisis transpersonales, el uso insensible de medidas represivas puede conducir a la cronicidad y dependencia a largo plazo de medicamentos tranquilizantes u otros fármacos, con los consiguientes efectos secundarios graves y empobrecimiento de la personalidad.

Tratamientos con psicotrópicos

El concepto de crisis transpersonal no está orientado en contra de la psiquiatría tradicional, sino que ofrece un enfoque alternativo a las personas que pueden beneficiarse de ella y son capaces y están dispuestas a aceptar sus enseñanzas. Dado que en algunos casos no es posible trazar una línea clara entre una emergencia espiritual y una psicosis, podría ser necesario posponer la decisión final sobre la estrategia de tratamiento hasta que se haya probado experimentalmente la respuesta en la persona. Incluso las personas que de otro modo cumplirían los criterios de tener una emergencia espiritual no pueden ser tratadas o beneficiarse de tratamientos con psicodélicos si no pueden relacionar sus problemas con un proceso interno, o si no están dispuestos a sufrir el dolor de confrontar las experiencias subyacentes.

Criterios para determinar si una persona experimenta una emergencia espiritual y puede tratarse con psicodélicos

Es importante aclarar que no todas las experiencias de estados inusuales de conciencia y cambios perceptivos, emocionales, cognitivos y psicosomáticos intensos entran en la categoría de emergencia espiritual. Según el estudio de Christina Grof y Stanislav Grof, los criterios que sugieren que una persona podría estar experimentando una emergencia espiritual o crisis transpersonal y puede tratarse con psicodélicos son:

• Episodios de experiencias inusuales que implican cambios en la conciencia y en el funcionamiento perceptivo, emocional, cognitivo y psicosomático, en los que hay un énfasis transpersonal significativo en el proceso, como secuencias dramáticas de muerte y (renacimiento), fenómenos mitológicos y arquetípicos, eventos pasados, recuerdos de encarnaciones, experiencias extracorporales, incidencia de sincronicidades o percepción extrasensorial, fenómenos energéticos intensos (despertar de Kundalini), estados de unión mística, e identificación con la conciencia cósmica
• Ausencia de un trastorno cerebral orgánico grave subyacente al funcionamiento mental anormal, como infección, tumor, enfermedad cardiovascular o degenerativa del cerebro
• Ausencia de una enfermedad física de otro órgano o sistema que sea responsable del trastorno mental, como por ejemplo uremia, diabetes, estados tóxicos con delirio o enfermedad cardíaca descompensada
• Condición somática y cardiovascular general razonablemente buena que permita a la persona soportar con seguridad el estrés físico y emocional frecuentemente asociado con la experiencia
• La capacidad de ver la condición como un proceso psicológico interno y abordarlo de manera internalizada; la capacidad de formar una relación de trabajo adecuada y mantener el espíritu de cooperación. Estos criterios excluyen a las personas con estados paranoides severos, delirios persecutorios y alucinaciones, y aquellas que usan consistentemente el mecanismo de proyección, exteriorización y actuación
• Ausencia de una larga historia de tratamiento psiquiátrico convencional y hospitalización

En próximos artículos hablaremos sobre los patrones que pueden adquirir las experiencias que caracterizan a la emergencia espiritual.

Bibliografía: Grof, C., & Grof, S. (2017). Spiritual emergency: The understanding and treatment of transpersonal crises. International Journal of Transpersonal Studies, 36 (2).