Vaporizar y vapear cannabis

Vaporizar

Según informa el Hash Marihuana & Hemp Museum, la vaporización tiene su origen en el Antiguo Egipto, cuando la gente colocaba piedras en las hogueras hasta que estaban muy calientes. Las piedras se retiraban del fuego y se les colocaban hierbas aromáticas encima. El calor de estas piedras tan calientes liberaba aceites volátiles de las hierbas y producía un agradable vapor aromatizado no contaminado por el humo. 

La vaporización permite utilizar los cogollos de una forma mucho más saludable que fumar, evitando los daños de la combustión. Además es mucho más discreto al no producir humo, y permite disfrutar de un sabor mucho más pronunciado.

Tipos de vaporizadores

Se distinguen principalmente dos tipos distintos de vaporizadores en función de la forma que tienen de calentar el material vegetal: los que calientan por conducción y los que lo hacen por convección. 

En los vaporizadores de hierba que calientan por conducción, la fuente de calor es un elemento cerámico o metálico que se calienta por electricidad. La conducción consiste en calentar una sustancia a través del contacto directo con una fuente de calor. La ventaja de esta forma de calentar es que permite tiempos de calentamiento rápidos, pero es posible que no caliente el producto de manera uniforme porque no entra en contacto con todo el material, por lo que suele quemar el material al entrar en contacto directo con él. 

En los vaporizadores que calientan la hierba por convección el elemento calentado nunca hace contacto con la hierba, sino que el dispositivo calienta el aire dentro de una cámara con hierba, que produce vapor. Los vaporizadores de hierba por convección tardan más en calentar, pero no queman la hierba. 

Temperatura

Modificando la temperatura de vaporización, se puede incidir en las sustancias que se evaporan. A continuación un listado de los principales cannabinoides, terpenos y flavonoides con su temperatura de vaporización para ajustar la experiencia cannábica a los deseos de la persona usuaria:

Cannabinoides

THC a 157°C

CBD a 170°C

Delta-8-THC a 175°C

CBN a 185°C

CBC a 220°C

THCV a 220°C

Terpenos

Beta-cariofileno a 130°C

Beta-cariofileno a 156°C

Beta-mirceno a 168°C

Delta-3-mirceno a 168°C

D-limoneno a 177°C

Linalool a 198°C

Flavonoides

Beta-sitosterol a 134°C

Apigenina a 178°C

Cannflavin A a 182°C

Quercetina a 250°C

Dos vidas para un mismo cogollo

Al terminar de vaporizar a una determinada temperatura lo que queda es un cogollo ya vapeado, o por sus siglas en inglés, AVB (Already Vaped Bud). El cogollo ya vapeado se ve marrón y se siente seco y crujiente, pero aún puede contener cannabinoides y terpenos. Se puede usar para hacer comestibles, infundir un aceite e incluso fumar. Usar el AVB para recetas cannábicas es una excelente opción porque ya está descarboxilado.

Vapear

Los vapeadores se calientan por conducción. El cartucho de aceite de cannabis tiene un elemento calefactor en una carcasa de acero o cerámica llamado atomizador que generalmente es una mecha de algodón, una bobina de cerámica o cuarzo, o una placa de metal. Al cartucho lleno de aceite se le enrosca un dispositivo de batería  que alimenta y calienta el atomizador, vaporizando el aceite que luego se inhala a través de una boquilla. La ventaja de vapear cannabis es que permite usar altas dosis de sus componentes como cannabinoides.

Tipos de vapers

En un atomizador de mecha de algodón, una bobina de alambre se envuelve alrededor de una pequeña mecha que se satura con el aceite, que luego se calienta. La desventaja de este tipo de atomizador es que es fácil quemar la mecha, especialmente cuando se usan aceites más viscosos o voltajes más altos. La quema da como resultado un sabor desagradable y requiere que se reemplace la bobina. Las bobinas de cerámica tienen un alambre envuelto alrededor de un pequeño cilindro de cerámica. Estos se pueden usar a voltajes más altos que las bobinas de mecha de algodón y ofrecen una buena retención de calor. Las bobinas de cuarzo se calientan muy rápidamente, pero no retienen el calor tan bien como las de cerámica.

Diluyentes peligrosos

A veces se usan agentes diluyentes suplementarios en cartuchos de vapeo. En algunos casos, se utilizan sustancias como el polietilenglicol (PEG), propilenglicol, la glicerina vegetal, triglicéridos de cadena media (MCT) o acetato de vitamina E, también conocido como acetato de tocoferilo, para cortar o infundir aceites de cannabis con el fin de crear una consistencia más líquida para que se vaporicen fácilmente o para que el producto sea menos costoso. Estos agentes de corte se encuentran bajo investigación como una posible causa de enfermedades.

Ya puedes elegir con criterio tu dispositivo y cómo utilizarlo para satisfacer tus deseos cannábicos.