Cuidado con los esquejes

Solventando los problemas de raíz

Cultivando con Gunter, usamos semillas o esquejes indiferentemente. Siempre cae alguna variedad nueva a testar y lo más sencillo de portar es una semilla. Pero cuando quieres mantener una genética o simplemente quieres evitar el coste de comprar montones de semillas cada tirada, la mejor opción es una madre. De esta madre en perenne crecimiento, iremos sacando los esquejes con los que cubriremos la sala o armario.

Sin lugar a dudas, en el caso de optar por los esquejes, lo mejor es tener tu propia sala de crecimiento para poner tus madres. La cosa es que comprar y vender esquejes sigue siendo ilegal (por poco que tenga, esa pequeña planta ya tiene un % mínimo de THC). Pero siempre te llega un colega con un par de cajas y te dice “toma tío, que he hecho clones de más, toma unos cuantos” y te hace todo el lío.

Así que a caballo regalado, no le mires el diente....Pero esas plantas no pueden entrar en mi sala así sin más. He visto diversos cultivos de amigos y allegados a los que les traían los clones enfermos o sin enraizar. Mal asunto, más si has pagado por el. Por eso, para todos los clones que no vengan de la mano de uno mismo, hay que pasarlos por una sala preventiva.

En esta sala, lo primero que vamos a hacer es limpiarlos. Aunque aparentemente no tengan plaga o enfermedad alguna, siempre lo hago (prefiero evitarlo a descubrirlo antes de la floración por ejemplo, lo cual retrasaría la cosecha). Para esta limpieza preventiva (o no) vamos a fumigarlos con un producto fuerte, ya que aun les quedan todo el proceso por delante y tienen tiempo para que no quede rastro del producto.

En esta última tanda hemos usado un acaricida insecticida muy fuerte llamado Milbeknock. Su dosificación es de 1ml por litro de agua. La aplicación es foliar, no olvidéis nunca poneros unos guantes y mascarilla antes de trabajar con el sobre las plantas. El mejor momento de aplicación es una hora o dos antes de que se enciendan las luces, de esta manera las microgotitas que se formen ya se habrán secado cuando se enciendan los focos y no quemarán las plantas, así como que la plaga que haya, empezará a comer al despuntar el día y se tragará todo el veneno. Entonces ya, si que podemos meterlas en la sala...a no ser que en esta estuviesen solas desde un principio.

Tras esto, trabajaremos las raíces con un estimulador y algo de alimento de crecimiento (según el sustrato que tengamos puesto) durante dos semanas antes de hacer el primer trasplante. Fumigaremos una vez más las plantas justo antes de la floración, pero en esta ocasión no usaremos el mismo producto, sino que nos decantaremos por uno mucho más suave y orgánico.

#CultivandoConGunter

*Miky Pérez