Raul Moreno (PSC) comenta la Ley Cannabis Cataluña

Soft Secrets
25 Aug 2017
Raúl Moreno, diputado del PSC, ha sido uno de los grandes impulsores de la Ley Cannabis Cataluña, aunque ya había desarrollado trabajo previo con nuevas políticas sobre cannabis. Fue uno de los políticos que más se comprometió en conseguir una ley equilibrada, con consenso entre muchos ámbitos, lo que se puede comprobar por el gran número de enmiendas que presentó. Su gran sintonía con la sociedad civil se pudo comprobar en su discurso, donde mencionó distintas entidades, desde ARSEC a las Juventudes Socialistas de Cataluña, pasando por las federaciones cannábica y Regulación Responsable. En esta línea, Raúl Moreno tuvo un bonito momento al aprobarse la ley, se levantó y empezó a aplaudir en dirección a la tribuna de invitados, gesto en el que fue secundado por el resto de diputados. Ahora anima al PSOE nacional a seguir hacia la regulación integral del cannabis, como corresponde a un partido de izquierda moderno. Publicamos esta entrevista que realizamos el mismo 28 de junio en el Parlamento Catalán, tras la aprobación de la ley, ya publicada en el BOE este 7 de agosto. Raúl Moreno aplaude tras la aprobación de la Ley Cannabis Cataluña

Entrevista a Raúl Moreno sobre la Ley Cannabis Cataluña

Soft Secrets. ¿Cómo empieza el proceso de esta ley? Raúl Moreno. La parte final llega con la ILP, tras la recogida de firmas de La Rosa Verda. Hubo un proceso previo, en el que las dos federaciones se reunieron con los partidos políticos para ver si había capacidad, o como mínimo voluntad, por parte de los partidos, de tirar hacia adelante una propuesta como esta. El texto de la ILP está bastante basado en estas conversaciones, en el sentido de que no podíamos ir a un sistema muy liberalizador, ni podíamos seguir con un sistema tan restrictivo como el actual. Las federaciones además se reúnen con diferentes partidos porque existe una realidad en las ciudades, los clubs comienzan a implantarse, los ayuntamientos piden ayuda para saber que es lo que pueden hacer y para intentar regularlo. Una vez que tienen el texto, entra al Parlament de Cataluña y se admite a trámite hace un año. Es ahí, en este último año, cuando yo me hago cargo de esa ponencia y vivo el proceso de negociación de enmiendas y de comparecientes. Raúl Moreno interviene durante el debate de la Ley Cannabis Cataluña ¿Con qué ideas llegas a la ponencia? Como partido socialista teníamos una serie de preocupaciones fundamentales. Queríamos que diera seguridad jurídica a los ayuntamientos, porque somos un partido con una importante implantación municipal. Queríamos además que la Ley estuviera muy relacionada con todo lo que tiene que ver con la salud, por lo tanto que los clubs cannábicos fueran un elemento activo del sistema de protección de salud, no un sitio donde la gente va a fumar de manera casi clandestina, queríamos huir de ese modelo. Por otro lado también queríamos desdramatizar, desestigmatizar a los consumidores de cannabis. Teníamos estas tres premisas. ¿Cómo se desarrolla la ponencia? Hicimos casi 40 comparecientes, estuvimos medio año. Nos fiamos mucho también de las propuestas que nos hicieron los comparecientes que nos explicaron su visión. Pedimos comparecencias de las entidades municipalistas que hay en Cataluña, que son la voz de los ayuntamientos. Por otro lado insistimos mucho en que tenían que venir representantes del Departamento de Justicia, del Departamento de Salud y Mossos d'Esquadra. Queríamos tener una visión mucho más general. Esta propuesta a los demás grupos también les pareció correcta. Ahí te das cuenta que la visión de los sectores más profesionales que podría uno pensar que están más en contra de la regulación, lo que te dicen es justamente “oiga usted regularice porque eso me permite a mi intervenir y me permite de alguna manera controlar”. Fueron muy interesantes las experiencias de otros países, de cómo lo habían regulado, también la visión de los Mossos d'Esquadra que no habían hablado abiertamente de este tema, más allá de los decomisos que hacen de plantaciones. En general fue bastante interesante, nos permitió hacer las enmiendas con bastante facilidad. ¿Cómo fue el proceso de enmiendas? Todos los grupos, pero fundamentalmente Junts Pel Sí y PSC teníamos una visión muy clara de como queríamos que fuera la Ley. En el número de transacciones se ve claramente que hay dos partidos que hacen un número importante de enmiendas, que apuestan por sacar la ley hacia adelante porque tienen una mayoría y luego el resto de partidos, que también aportan su visión, desde una óptica más de aceptar lo que vino de la ILP, sin tocar mucho. Raúl Moreno interviene durante el debate de la Ley Cannabis Cataluña ¿Cuantas enmiendas hacéis? ¿en qué se centraban? Nosotros hicimos en torno a 40 – 45 enmiendas. De las que hicimos al principio, a las que salieron al final han aparecido modificaciones. Nosotros inicialmente teníamos mucha preocupación con la edad de entrada a los clubs. Nuestra primera opción era todos a los 21 años, pero es anticonstitucional porque el derecho de asociación está a partir de los 18, aunque sí conseguimos limitar la cantidad de cannabis que se podía consumir en función de la edad del socio. También hicimos enmiendas destinadas a vincular los socios con los programas de prevención, esto nos preocupaba muchísimo. Teníamos claro que había que restringir el consumo de alcohol en los clubs cannábicos, esta costó un poco, pero al final salió. El tema del turismo cannábico, no queríamos que Cataluña fuese reconocida internacionalmente como una nueva Holanda, donde uno puede ir a fumar cannabis. No porque nos parezca mal, casi prefiero el turismo cannábico a un turismo de borrachera, pero desde un punto de vista de controlar la situación, nos parecía que, como hay que hacer cambiar el chip, no queremos generar en las ciudades y pueblos situaciones que le compliquen la vida a la gente. Si el turismo cannábico tiene que llegar, será de forma posterior, cuando los clubs estén totalmente integrados. También crear un órgano de gestión donde estuvieran presentes todos los actores del proceso, como federaciones cannábicas, ayuntamientos y departamentos de la Generalitat. Al ser una ley nueva y de gran incidencia necesitamos alguien que vaya modulando. Necesitamos datos de cuál es el consumo, de cuál es la incidencia y esto el Observatorio Catalán del Cannabis nos lo puede proporcionar. Teníamos algunas dudas sobre si teníamos la capacidad de normativizar, de legislar, la producción y el transporte. En este aspecto había algunas enmiendas que se han consensuado y se han transaccionado. Aplausos de los partidos políticos a la sociedad civil tras la aprobación de la Ley Cannabis Cataluña A la base social de autocultivadores les resulta difícil entender que un club pueda hacer 150 kilos anuales y ellos no puedan hacer 3.5 kilos anuales, como pide Regulación Responsable, el GEPCA o la ILP nacional. A muchos de nuestros lectores les suena decepcionante que no esté el autocultivo. Esta ley es reguladora de las asociaciones cannábicas, este es su objeto. Cuando este debate se puso encima de la mesa, desde el punto de vista de los letrados había diferentes posiciones, sí había algunos que consideraban que había que regularlo. Yo tenía mis dudas porque no era el objeto de la ley. Podemos hacer otra que regule eso, pero sabemos que por cuestiones de competencias es fácilmente recurrible. Por las competencias que nos da el Estatuto de Autonomía, sí que podemos regular las asociaciones y por tanto las actividades de las asociaciones y lo que se produce dentro del ámbito de las asociaciones. Son dos regulaciones diferentes, no podíamos mezclar dos regulaciones diferentes, no es tan sencillo como añadir un artículo más a la ley. A nivel nacional hay que plantearlo de una forma totalmente integral, pues ahí sí existen competencias para regular el autocultivo. Esta ley contempla el pago de impuestos Esto se presta a la broma de que somos muy catalanes, digamos que aquí es “una mica de la pela es la pela”. Ya hablando en serio, si vemos con normalidad estos clubs, también es normal aplicar un impuesto. Lo que hemos incluido en la ley es que el Govern estudiará la implantación de nuevas figuras impositivas en relación a esta actividad. Desde el punto de vista reglamentario se verá cómo y de qué manera se pueden aplicar estos impuestos, de momento lo hemos puesto en una fase muy de estudio. Luego será el Observatorio de Cannabis de Cataluña el que podrá concretar qué tipo de impuesto y la cuantía. El impuesto no puede ser tan alto que en el mercado negro la sustancia se pueda adquirir mucho más barata, porque entonces nos estamos haciendo trampas al solitario. Tenías una trayectoria previa de apoyo a la regulación del cannabis Fui primer secretario de las Juventudes Socialistas de Cataluña, en mis años mozos. Ya habíamos trabajado la necesidad de regular el cannabis desde un sentido amplio. Posteriormente, las juventudes de la organización han conseguido convencer al partido, a través de resoluciones que llevaron al XIII congreso del PSC, para que el partido asumiese esa voluntad, tema en el que les apoyé, y que ganaron. Por tanto, yo lo he tenido más fácil. Una vez que el partido ha apostado por regularizar el uso del cannabis a nivel nacional, pues lo lógico que también se hiciera en el Parlament, con la parte que nos toca, a través de esta ILP. Luego porque personalmente participé en experiencias a nivel local, cuando era concejal de juventud en Santa Coloma de Gramanet. Al hacer políticas de drogas era mucho más efectivo con los jóvenes explicar las consecuencias, que hacer campañas “en contra de”. Da mejor resultado. También viví el trabajo con toxicómanos o el de Energy Control, que en su día eran una innovación. Todo me hace entender que es mucho mejor informar a la gente que las políticas prohibicionistas. Ahora en la situación en la que estoy, como diputado, voy a ser coherente con lo qué he defendido siempre. Raúl Moreno interviene durante el debate de la Ley Cannabis Cataluña ¿Cual es la postura del PSC sobre el cannabis? En el congreso, gracias a la propuesta de las juventudes del PSC, lo que decimos en un manifiesto, bastante escueto, es que hay que pasar de políticas prohibicionistas a políticas basadas en la libertad individual de las personas, así como la protección a la salud desde la información de la sustancia, por eso instamos a establecer un proceso de regulación del consumo de cannabis en España. No queríamos entrar más para conseguir el máximo consenso posible sobre qué tipo de regulación debe hacerse, nuestra voluntad se expresa hasta ahí. De alguna manera lo que decimos es que este debate hay que tenerlo, debemos concretarlo entre todos, esta mirada amplia de diferentes opiniones, llegando a consensos y acuerdos con el PSOE, con la militancia, para saber qué tipo de regulación queremos defender, pero necesitamos que se abra el debate. Hay apoyos a la regulación integral en Comunidades Autónomas como Murcia, Extremadura, Canarias, Valencia, Cantabria y la iniciativa nacional del PSOE. ¿Se mueve algo dentro del PSOE? Moverse se mueve afortunadamente, pero tiene que moverse un poco más. A nivel más político, hay este cambio de paradigma, de intentar cambiar un modelo, para los propios socialistas es difícil. No es una opción fácil. El PSOE no ha tenido este debate en profundidad sobre cuál es su posición sobre la regulación integral del cannabis. Aunque si ha existido ese debate sobre el cannabis medicinal y también a nivel regional en comunidades donde se apoyaron proposiciones similares a esta. Más allá de los recursos legales, más allá de las comisiones y estudios que se puedan hacer, el PSOE necesita decidir y aclarar y poner en un documento político cuál es su posición respecto a este tema. Y este debate me gustaría que se produjera en los próximos meses, que como mínimo se pueda iniciar un debate sereno, moderno, tranquilo, con expertos, con personas que entienden cuál es la situación, y que a partir de ahí se tome una posición. Me gustaría que el PSOE estuviera por la voluntad de regular el cannabis, a través de provocar el debate en el propio partido. Está bien que haya PNLs, pero hace falta un debate desde el punto de vista profundo en si estamos de acuerdo o no y en qué manera lo hacemos. Tenemos que ser un poco más claros en este tipo de discurso. En el PSOE hay distintas sensibilidades sobre la regulación del cannabis ¿cuál crees tú a vuelapluma que predomina ahora? Creo que ahora mismo predomina el sí, el sí a una regulación. Hay una sensación mayoritaria de que esto de alguna manera hay que ordenarlo. Otra cosa es que todos pensemos en el mismo tipo de regulación, eso es diferente. Seguramente la posición mayoritaria es que sí, pero el problema sea concretar el cómo. Hay gente que está más o menos a favor de una regulación más o menos permisiva. A lo mejor encontramos un debate alrededor de aspectos como el acceso, la protección o la ubicación, cuestiones como que chavales de 18 años puedan ir a un club a consumir, esta es la impresión que tengo. ¿Al PSOE nacional qué le aconsejarías? Estamos en un momento nuevo, con un PSOE renovado, que tiene capacidad de cambiar de posición y por lo tanto de soltar lastre, de cambiar posiciones que parecían muy fijadas históricamente. Lo hemos visto recientemente con el CETA, pero también lo veremos en los próximos meses con otros temas. Es un partido que tiene la capacidad de volver a hablar de algunos posicionamientos políticos y que debe estar muy próximo a la calle. Al estar próximo a la calle, ver la realidad y dejarse aconsejar por los expertos, se descubre que en esa renovación de la agenda política respecto a la prevención en drogas, hay algo más allá del prohibicionismo. Ese es un cambio desde el punto de vista mental, práctico, de protección de la salud, que es fundamental en los partidos de izquierda moderna, como espero que sea el PSOE y creo que será. Es necesario que todos los que nos dedicamos a la política tengamos la mente abierta, seguramente no somos dueños de la verdad absoluta y hay que escuchar al otro, abrir los ojos a lo que está pasando a nuestro alrededor. Nosotros como PSC siempre hemos sido muy partidarios del diálogo, la negociación y el pacto y estas son tres palabras que vienen muy bien en este contexto. ¿Por qué citas a Regulación Responsable en tú discurso? Cuando se leen documentos de referencia y consultas los documentos de las organizaciones que trabajan en este tema, muchas veces Regulación Responsable aparece. Es referencia desde el punto de vista de un análisis serio de cuál es la situación del cannabis en España. Documentos de Regulación Responsable estuvieron presentes en el debate de la ILP. Cuando se cita un texto de Regulación Responsable, ves que hay una gran capacidad de concentrar y clarificar el mensaje. Esto para nosotros es muy importante, hemos escuchado a 40 personas, llega un momento en que necesitas simplificar el mensaje porque la ley tiene una serie de artículos. La sociedad civil y los políticos en la foto final, tras la aprobación de la Ley Cannabis Cataluña ¿Qué aconsejarías a los activistas que busquen leyes de consenso entre diferentes partidos como ha sucedido en Cataluña? Confío mucho en el trabajo que puedan hacer los activistas cannábicos. Creo que hablando con cada partido, con pedagogía, siendo serios y educados con las diferentes opiniones, y explicando los argumentos que nos han expuesto en Cataluña, es posible llegar a un consenso. Si se empuja desde abajo, como ha pasado en Cataluña, esta propuesta tendrá más potencia, irá más vestida y será más sencilla de mover. ¿Qué aconsejarías al resto de partidos? Hay un camino de en medio, hay una posición de acuerdo, es sencilla de conseguir si todos los partidos ponen de su parte. Que no sea solo cuestión de unos cuantos, sino de que haya voluntad de buscar una normativa que se adapte a la realidad, que permita el control, que permita regular lo que está sucediendo, y en la que se pueda dar voz a los diferentes actores. Aquí en el Parlamento de Cataluña lo hemos logrado porque nuestra configuración política es diferente. Aquí ha hecho un esfuerzo importante la antigua Convergencia, incluso los más democristianos han superado una parte de sus reticencias, como también lo ha hecho el propio partido socialista. Si hubiéramos tenido un Partido Popular mucho más representativo, desde el punto de vista de escaños, pues posiblemente no hubiese salido. En todo caso, le pediría al Partido Popular que intente abrirse un poco a la realidad social de lo que está pasando en Europa, donde hay Gobiernos de derechas con una visión muy diferente de la regulación del cannabis, que intenten modernizar su posición, de esta manera desbloquearemos muchas mayorías que podrían producirse a nivel autonómico y sobre todo en el Gobierno del Estado. Ley Cannabis Cataluña rueda de prensa con los partidos políticos que la aprobaron, además de La Rosa Verda y Som el que cultivem ¿Qué recorrido ves a esta regulación integral a nivel nacional? Es verdad que a nivel estatal las mayoría han cambiado y están las iniciativas nacionales de distintos grupos como PSOE, Ciudadanos, Podemos y Esquerra Republicana. Desde luego, si se hace el esfuerzo de convencer al PSOE a fondo, hay número suficiente para como mínimo tener un debate muy interesante. En todo caso, yo creo que un cambio de mayorías políticas facilitaría mucho para que haya un cambio esencial y fundamental en esto. A mí me gustaría que hubiera una regulación a nivel estatal, pero también me gustaría más que hubiera una regulación a nivel europeo. Creo que es lo que toca, tanto por la realidad en que vivimos, como porque permitiría luchar con mas fuerza contra el mercado ilícito. Estamos todavía de manera muy inicial. Para terminar ¿Es buena idea seguir presentando PNLs en otras comunidades? Sí. Sí, aunque luego pueda venir el Constitucional y dictar la sentencia que considere oportuna. Cada Comunidad Autónoma que expresa la voluntad de que es necesario regular, contribuye al cambio ideológico profundo y necesario de una parte de la población. De ciudadanos y ciudadanas que siguen considerando el cannabis como una sustancia relacionada con el mercado negro y otros problemas sociales. Es importante que los Parlamentos regulen para que también se normalice la visualización de los consumidores de cannabis. En tanto en cuanto consigamos que las personas vea con normalidad un consumo responsable, será mucho más sencillo conseguir un cambio legislativo. Estamos haciendo un ejercicio de cambio de estructuras mentales basadas en mensajes de muchos años atrás, eso no es fácil, hacer leyes es sencillo, hacer que las personan se las crean es más complicado. Raúl Moreno aplaude tras la aprobación de la Ley Cannabis Cataluña Lee también la entrevista a Iñaki Lavandera del PSOE Canarias
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