El peligro y el placer crecen en la misma rama..
Para este cultivo tuve por compañera a la Swazi. Originaria de Swazilandia, Sudáfrica, es una Sativa pura que puede alcanzar alturas de 2-3 metros, con sabor y aroma exóticos. Las flores tienden a desarrollar brácteas cubiertas de resina y tiene un periodo de floración de 9 a 14 semanas, con grandes cosechas.
Para este cultivo tuve por compañera a la Swazi. Originaria de Swazilandia, Sudáfrica, es una Sativa pura que puede alcanzar alturas de 2-3 metros, con sabor y aroma exóticos. Las flores tienden a desarrollar brácteas cubiertas de resina y tiene un periodo de floración de 9 a 14 semanas, con grandes cosechas.
Para este cultivo tuve por compañera a la Swazi. Originaria de Swazilandia, Sudáfrica, es una Sativa pura que puede alcanzar alturas de 2-3 metros, con sabor y aroma exóticos. Las flores tienden a desarrollar brácteas cubiertas de resina y tiene un periodo de floración de 9 a 14 semanas, con grandes cosechas.
Se extrajo un esqueje de una planta madre, le apliqué Clonex y lo dejé reproducirse hasta que estuvo rebosante de raíces. Estaba colocado en un Wilma 4 de Atami, pero los cuatro tiestos de 1 litro fueron reemplazados por un solo tiesto de 18 litros lleno de mapito, para que hubiera espacio para una planta y un mayor crecimiento de la raíz. Creo firmemente en la conveniencia de proporcionar la cantidad y calidad adecuadas de luz, pero en este cultivo me interesaba averiguar qué se podía conseguir sólo con esta planta y una lámpara HID 400 vatios.
En cuanto a la nutrición, esta vez me decanté por la gama de Atami B'Cuzz Hydro con estimulador de floración y Bloombastic. También utilicé el aditivo Vitalink Biopac durante el periodo vegetativo para garantizar una zona radicular saludable y la provisión de bacterias beneficiosas. Considero que la observación y la atención son claves para lograr una cosecha de calidad, no limitarse a comprobar el pH y la Ec, sino observar, adquirir más conocimiento sobre tus plantas. Dicho esto, por supuesto que controlé con regularidad ambos valores, pero ninguno se alteró demasiado en todo el cultivo. También se medían la temperatura máxima y mínima y los niveles de humedad, para asegurarse de que no había grandes fluctuaciones que pudieran causar problemas en el crecimiento de la planta. Por fortuna, tampoco hubo problema de plagas.
Antes de su uso mojé totalmente el mapito para bajar su nivel de Ec. El esqueje se puso dentro de un armario de cultivo tipo tienda de campaña de 1,5 m. forrado con material reflectante Diamond (foto 1). Tras las primeras semanas de crecimiento vegetativo, se colocó una malla de plástico de un extremo a otro de la tienda a una altura de unas 18 pulgadas sobre la parte superior del tiesto, moldeada en forma cóncava para garantizar que la parte de la plantación que no estaba directamente bajo la lámpara se acercara más a ella, para una mayor exposición. A lo largo de toda la fase vegetativa y durante la primera semana de floración, todo nuevo brote era pasado debajo de la malla, teniendo cuidado de no romper los delicados meristemas y retoños. No obstante, si tienen tiempo suficiente, las plantas normalmente tienden a recuperarse de las ocasionarles quiebras de tallo y además se las puede reparar uniendo los dos bordes del tallo quebrado con cinta adhesiva.
Este método es una forma de emparrado o espaldera, y es útil para la exposición a la luz cuando se utiliza una lámpara de baja potencia y también vale la pena cuando se tiene un techo a baja altura. La planta fue guiada para crecer horizontalmente y se mantuvo el periodo vegetativo hasta que ocupó la mayor parte de la malla. Afrontadlo, el crecimiento vegetativo es vital para una buena floración. Durante este periodo de unos diez días se observó un crecimiento vigoroso, mientras la planta rellenaba la malla. (fotos 2 y 3). Durante todo el cultivo, se eliminaron las hojas de debajo de la línea de la malla para evitar que malgastaran energía estirándose en busca de luz. También se podaron periódicamente otras hojas de la canopia, pero nunca más del 25-30% de las hojas grandes; después de todo, son las zonas que producen los azúcares para el crecimiento y la floración. Por experiencia he comprendido que merece la pena poner a florecer la planta cuando todavía queda algo de espacio disponible en la malla. Así tomamos en cuenta el crecimiento durante la primera etapa de la floración, cuando la planta deja espacio para que los cogollos crezcan.
Una vez alcanzado ese punto, empecé a usar el estimulador de floración B'Cuzz, incrementando poco a poco la dosis durante la floración desde 0.5 a 1 ml. En ese momento también reduje el ciclo de luz de las 18.5 que había estado recibiendo la planta hasta 11.5 para inducir la floración. Utilicé una bombilla Sunmaster de espectro dual, que tiene un 30% más del espectro azul para el crecimiento vegetativo y el inicial par de semanas de floración, después cambié a una bombilla Grolux para darle más del espectro rojo en las semanas finales de la floración hasta la cosecha. Poco antes se produjo una visible respuesta de la planta a medida que las flores empezaron a formarse a través de la malla (foto 4).
Como mencionaba antes, también añadí Bloombastic a la mezcla, como acelerador de la floración para las últimas cuatro semanas o fase de maduración de la floración. Con este producto es aconsejable no utilizar un acelerador de PK. No es necesario. Bloombastic contiene la suficiente cantidad de biominerales y bioestimuladores y he oído historias de plantas muertas por usar los dos a la vez.
La planta se estuvo enjuagando, limpiándose, cerca de dos semanas, sólo se le dio agua para garantizar la disipación de cualquier exceso de sales nutrientes. Y por fin llegó el día de la cosecha (foto 6), para ese momento daba la impresión de que la malla estaba empezando a romperse con el peso que descansaba sobre ella. Al cortar, la mayor parte del cogollo se encontraba por encima de la malla, una de las ventajas de esta técnica, pero también había una preciosa corona de cogollos cristalizados que estaba situada justo por debajo de la malla. Una vez seca, la cosecha alcanzó cerca de 410 gramos de cogollos pegajosos de agradable Swazi: una cosecha satisfactoria y fantástica.
A menudo se discute sobre cuántas plantas se pueden cultivar legalmente. "Yo he oído que cuatro", "con ocho te libras"... Triste e ilógicamente, sigue siendo ilegal cultivar una sola planta de Cannabis en el Reino Unido sin licencia, aunque, si quieres reducir el peligro pero incrementando el placer, tal vez debas considerar la posibilidad de utilizar esta técnica de emparrado.