CatFAC fortalece a los CSC de BCN
El sector cannábico sigue siendo bombardeado por los efectos de la ignorancia de nuestra sociedad. Por más que la ciencia y la coherencia indiquen un camino, algunos deciden ir por el opuesto, pero no seamos ingenuos que tontos no son. El gran último golpe al que resiste el sector, es la anulación de las licencias de Clubes Sociales de Cannabis (CSC) de Barcelona, una ciudad caracterizada por el prestigio de sus CSC, que viven desde hace más de 30 años allí.
Llamamiento a unirse a CatFAC
Esta situación nos impulsa a velar por nuestro sector, defender los derechos de las personas, y a levantar la voz para representar las ideas que nos sostienen. Una de las mejores maneras de fortalecer al sector cannábico es a través de las federaciones.
La palabra federación viene del latín foederatio que significa unión. Estas instituciones son las que protegen los intereses de las personas, a través del apoyo de la fuerza de su unión. La Federación de Asociaciones de Cannabis de Cataluña (CatFAC) ha respaldado y defendido los intereses de las asociaciones cannábicas a través de múltiples acciones a lo largo de todo este tiempo, sumando fuerzas a la conquista de los derechos de las personas usuarias de Cannabis.
Según nos informa el portavoz de CatFAC, la federación ha mantenido una comunicación activa desde la aprobación del plan urbanístico que sostenía a los CSC el pasado mes de abril, con el área de economía, urbanismo y movilidad, con el comisionado de salud del ayuntamiento de Barcelona, y con la agencia de salud pública de Barcelona (ASPB), para elaborar un plan de acción de drogas que aporte seguridad a las personas a través de sus criterios de salud pública. Además, desde que se anunció la anulación del plan urbanístico, la federación se mantuvo en contacto con el consistorio para establecer cómo afectarían estos cambios a las asociaciones. Para proteger el derecho de asociación y a la salud pública que caracterizan a la democracia española, CatFAC elabora propuestas alternativas a la suspensión del plan urbanístico. Estos hechos demuestran que CatFAC lucha por hacer crecer el sector cannábico y apoya su resistencia.
La unión hace la fuerza
Si las asociaciones no aúnan sus fuerzas, estamos perdidos. Un CSC aislado es un árbol fuera del bosque, y es el bosque el que provee oxígeno al planeta, no un solo árbol. Es por eso que las declaraciones del director de Soft Secrets y miembro del consejo técnico del Observatorio Europeo del Consumo y Cultivo de Cannabis (OECCC), Hugo Madera, son tan contundentes:
“Animamos a todos los CSC de Barcelona a formar parte de CatFAC porque es una federación que ha invertido grandes esfuerzos en parar la represión que sufre el sector cannábico, lleva años elaborando una ley de CSC justa y muy bien trabajada desde el punto de vista legal, y en este momento debemos unirnos para cobrar fuerza, porque solos no vamos a llegar a ningún sitio y tenemos evidencias que respaldan que el mejor sitio para apoyar a los CSC es a través de CatFAC”.