5 Errores Críticos que Arruinan tu Cultivo de Exterior

Es mitad de julio. El sol aprieta, el calor no da tregua y tus plantas de exterior, que has cuidado con esmero durante meses, están en su momento de máximo crecimiento. Has invertido tiempo, dinero y esfuerzo. Pero justo ahora, en la recta final antes de la floración, es cuando un pequeño descuido puede echarlo todo a perder. Si notas que tus plantas están tristes, las hojas se curvan o el crecimiento se ha estancado, no estás solo. El verano español es brutal. Esta es una guía de emergencia para identificar y solucionar los 5 errores más comunes que los cultivadores cometen en esta época. Salva tu cosecha antes de que sea demasiado tarde.
Error 1: Estrés Hídrico por Riego Incorrecto
En pleno julio, el "cuándo" y "cómo" riegas es más importante que nunca.
El Problema:
- Sub-riego: El sustrato se seca por completo en pocas horas. La planta se ve caída como si se hubiera desmayado. Las hojas están flácidas y sin vida.
- Sobre-riego: Por miedo a que pasen sed, muchos riegan en exceso. Las hojas también se caen, pero se sienten pesadas y se curvan hacia abajo en forma de garra. El sustrato está permanentemente encharcado, ahogando las raíces.
La Solución Inmediata:
- La prueba del dedo: Hunde un dedo 3-4 cm en el sustrato. ¿Está seco? Riega. ¿Está húmedo? Espera. Es el método más fiable.
- Riega a primera hora de la mañana o al atardecer. Regar bajo el sol del mediodía es el peor error: el agua se evapora rápidamente y las gotas en las hojas pueden hacer efecto lupa, quemándolas.
- Usa agua a temperatura ambiente. El agua muy fría puede causar un shock térmico a las raíces calientes.
Error 2: Ignorar el Estrés por Calor Extremo
Por encima de los 30-32°C, la mayoría de genéticas de cannabis dejan de hacer la fotosíntesis de forma eficiente y se centran en sobrevivir.
El Problema:
Las hojas se curvan hacia arriba por los bordes, como si formaran una canoa o un taco. Es un intento desesperado de la planta por reducir la superficie expuesta al sol y transpirar menos. Si el calor persiste, los bordes se queman y se vuelven quebradizos.
La Solución Inmediata:
- Crea sombra artificial. Es la solución más efectiva. Clava unas estacas y coloca una malla de sombreo (las venden en cualquier bazar o centro de jardinería) para filtrar el sol durante las peores horas (de 12:00 a 17:00).
- Si están en macetas, ¡muévelas! Colócalas en una zona donde reciban el potente sol de la mañana pero queden a la sombra por la tarde.
- Refresca el ambiente: Pulverizar agua en el suelo alrededor de la planta (no sobre ella bajo el sol) puede ayudar a bajar la temperatura unos grados por evaporación.
Error 3: Subestimar las Plagas de Verano
El calor y el ambiente seco son el paraíso para los dos peores enemigos del verano: la araña roja y la oruga.
El Problema:
- Araña Roja: Busca puntitos blancos diminutos en el haz de las hojas. Dale la vuelta a la hoja y, si ves pequeños puntos negros (los ácaros) o una finísima telaraña, tienes un problema grave. Se reproducen a una velocidad vertiginosa con el calor.
- Oruga: Verás pequeños mordiscos en las hojas o cogollos. Busca también sus excrementos: bolitas negras diminutas. Una sola oruga puede destrozar un cogollo entero desde dentro.
La Solución Inmediata:
- Para la Araña Roja: Pulveriza una mezcla de agua con jabón potásico al atardecer, empapando bien el envés de las hojas. Repite cada 3 días. El aceite de Neem también es un excelente preventivo.
- Para las Orugas: El tratamiento más eficaz y ecológico es el Bacillus thuringiensis. Es una bacteria que solo afecta a las orugas. Aplícalo pulverizado una vez por semana como preventivo si vives en una zona propensa.
Error 4: Abonar como si Fuera Primavera
Con temperaturas extremas, el metabolismo de la planta cambia y su capacidad para absorber nutrientes se ve afectada.
El Problema:
Sigues abonando con la misma dosis que en mayo o junio, pero la planta ya no lo asimila igual. El exceso de sales se acumula en el sustrato, bloquea las raíces y provoca quemaduras en las puntas de las hojas, incluso si la planta muestra signos de carencias.
La Solución Inmediata:
- Reduce la dosis de fertilizante a la mitad en los días de máximo calor.
- Haz un riego solo con agua cada 2 o 3 riegos con abono. Esto ayuda a limpiar el exceso de sales acumuladas en el sustrato.
- Considera usar enzimas en uno de tus riegos. Ayudan a descomponer las raíces muertas y a limpiar el sustrato de sales.
Error 5: Olvidarse de Preparar la Floración
Julio no es solo para sobrevivir, es la última oportunidad para preparar a la planta para la fase más importante: la producción de cogollos.
El Problema:
Te centras tanto en el calor y el riego que olvidas tareas cruciales. Llegas a agosto con una planta débil, con una estructura pobre o que no está preparada para soportar el peso de los futuros cogollos.
La Solución Inmediata:
- Realiza una última poda de bajos. Elimina las ramas y hojas más bajas que no reciben luz. La planta no malgastará energía ahí y la concentrará en las colas principales. Además, mejora la aireación y previene hongos.
- Aplica tutores o mallas de soporte. Hazlo ahora que las ramas son todavía flexibles. Cuando los cogollos empiecen a engordar, agradecerás tener una estructura que los soporte y evite que se partan.
- Aplica un último tratamiento preventivo contra hongos como el oídio (con cola de caballo o azufre) antes de que aparezcan las primeras flores. Nunca se debe pulverizar nada sobre los cogollos formados.
Controla el Verano y Conquistarás la Cosecha
El verano en España es una prueba de fuego, pero no tiene por qué ser una sentencia de muerte para tu cultivo. Si actúas ahora, corrigiendo estos errores, no solo salvarás tus plantas, sino que las prepararás para una floración explosiva en agosto y septiembre. Revisa tu riego, protege del sol, vigila las plagas y prepara su estructura. Tu cosecha de otoño te lo agradecerá.
Sigue leyendo
¿El Calor Afecta la Resina del Cannabis?
Guía de Supervivencia: Protege tu Marihuana del Calor Extremo