Fases lunares ayudan o perjudican tareas de cultivo de marihuana
Cada fase de la luna favorece tales o cuales técnicas en el cultivo cannábico.
La importancia de la luna en los cultivos de civilizaciones antiguas es un hecho. A principios del siglo XX se comenzó a desarrollar lo que se conoce como agricultura bio dinámica que jerarquiza la importancia de los ciclos lunares en los cultivos. La influencia de la luna es preponderante y el cultivo de cannabis aprovecha sus fases.
Aprovecha las fases lunares para cultivar marihuana
Algunos cultivadores de cannabis de exterior cultivan bajo la luz de la luna. Quienes usan el calendario lunar explican que la savia asciende desde las raíces al ápice según la fase lunar. Es decir, cuando la luna está llena la energía de la planta se concentra en el ápice y conforme van pasando las noches, y la luna va llegando a su fase menguante, la savia se traslada hacia abajo.
Luna nueva en el cultivo de cannabis
Por eso es conveniente realizar algunas acciones a la planta en ciertos momentos y evitar otras. Hay muchas formas de interpretar la luna para los cultivos. Aquí nos centraremos exclusivamente en las fases lunares. Con la luna nueva se recomienda no tocar la planta, durante los primeros días de la fase. Es un buen momento para arrancar plantas invasoras y podar plantas enfermas. Es cuando podemos realizar el control de enfermedades y plagas porque es el tiempo
cuando aparecen.
Luna creciente en la marihuana
Con la luna creciente aumenta la actividad de la savia de la planta. Los líquidos internos de la planta circulan, lo que auspicia el desarrollo de hojas, raíces y tallos. Los trasplantes se deberían de hacer en esta fase. No se recomienda podar, fertilizar o pelear contra las plagas.
Luna llena en el ciclo de la marihuana
Con la luna llena empieza el momento decreciente, la savia empieza a bajar del ápice y las extremidades hacia la raíz. Es el momento de germinar, de estimular la raíces, trasplantar y fertilizar. Pero sin tocar la tierra.
Cosecha de marihuana en luna menguante
Con la luna menguante la energía de la savia desciende a las raíces porque la atracción gravitatoria hace que los líquidos pasen a la zona radicular, ralentizando el crecimiento vegetativo.
Técnicamente es el momento de cosechar. Mientras el líquido de la planta se concentrará en las raíces, los cogollos estarán menos húmedos, lo que facilitará su secado. Es un buen momento para podar, sembrar, plantar o trasplantar. Es momento de dejar el aspersor de lado hasta las próximas fases lunares. La fertilización foliar debe ser evitada en este momento.
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Demian Jara
