¿Cómo beber y cocinar leche de marihuana?
La leche cannábica es una excelente forma de agregar un poco de cannabis a cualquier bebida con leche o plato que lleve leche. Mostramos cómo hacerla.
¿Cómo hacer leches cannábicas?
Para hacer leche cannábica, leche de marihuana o cannamilk, como te guste llamarla, necesitas leche, cogollos, una olla, una cocina y dejar volar tu imaginación.
Puedes hacer un batido, un arroz con leche, helados, o un café con CBD, entre otras preparaciones. Con esta receta de leche de marihuana llevarás al cannabis tan lejos como tu imaginación y aptitudes culinarias puedan alcanzar.
Receta de leche de marihuana
Para hacer una leche cannábica puede usar una taza de leche y un gramo de cannabis molida. Para hacer que la marihuana pase sus cannabinoides a la leche antes debemos descarboxilar el cannabis. Para ello debes encender el horno a unos 110 grados Celsius, como para que los metabolitos secundarios del cannabis no se volatilicen. Es decir, para preservar cannabinoides, flavonoides y terpenoides.
A los veinte minutos, con temperatura estable, el cannabis debería estar pronto para continuar con el proceso de la leche cannábica.
Quita la materia vegetal del horno. Enciende la cocina, pon una cacerola, tan grande como para la cantidad de leche que hayas escogido preparar. Por cada taza de leche tira un gramo de cannabis. Si los comensales son viejos fumetas puedes probar con más materia verde.
Cuidados y beneficios de hacer leche cannábica
No dejes que la leche con la infusión hierva porque podría hacer desaparecer (volatilizar) los cannabinoides. Apagar la leche casi antes que hierva es el truco. Luego deberás colar la leche cannábica en colador de rejilla de aluminio fino, o filtro de papel para café. Éstos son mejores ya que aseguras que nada de la materia vegetal interferirá con tu leche marihuana.
Una vez pronta la preparación de la leche de cannabis o cannamilk, podrás acompañarla con lo que desees. ¿Qué tal un café con leche cannábico? ¿O un batido fresas cannábico? Sé cauto con las proporciones. En novatos son habituales los malos viajes. Mira cómo salir de una pálida aquí.
Tu imaginación llevará la leche cannábica al próximo nivel en desayuno o merienda, y por qué no, en una cena o almuerzo. Buenos humos. Buenas leches marihuanas.
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