Democracia española: alerta NBQ

Exitable
08 Dec 2014

El PP en el gobierno es vivir bajo permanente alerta NBQ (nuclear, química y bacteriológica), siempre con la catástrofe cerca. Son una peligrosa mezcla de corruptos, inútiles y temerarios. Por el lado bacteriológico hemos estado cerca de una epidemia de ébola. En lo nuclear hubo este octubre una prealerta de emergencia en Vandellos II, al perder la alimentación eléctrica por una tormenta en la zona. Mientras tanto, el gobierno insiste en reabrir la nuclear de Garoña, central caducada y peligrosa, llena de residuos nucleares, con un reactor que se considera “gemelo” al de Fukushima y la vasija agrietada. Por el lado químico  tenemos el acuerdo transatlántico entre Estados Unidos y Europa, donde se nos pretende meter a calzador un paquete con barbaridades como el pollo clorado, carne hormonada, vegetales transgénicos, petroleo de fracking o derivados financieros. Dicen que el TTIP creará nuevos puestos de trabajo, ¡será en los cementerios y hospitales para atender a sus víctimas!.


El PP en el gobierno es vivir bajo permanente alerta NBQ (nuclear, química y bacteriológica), siempre con la catástrofe cerca. Son una peligrosa mezcla de corruptos, inútiles y temerarios. Por el lado bacteriológico hemos estado cerca de una epidemia de ébola. En lo nuclear hubo este octubre una prealerta de emergencia en Vandellos II, al perder la alimentación eléctrica por una tormenta en la zona. Mientras tanto, el gobierno insiste en reabrir la nuclear de Garoña, central caducada y peligrosa, llena de residuos nucleares, con un reactor que se considera “gemelo” al de Fukushima y la vasija agrietada. Por el lado químico  tenemos el acuerdo transatlántico entre Estados Unidos y Europa, donde se nos pretende meter a calzador un paquete con barbaridades como el pollo clorado, carne hormonada, vegetales transgénicos, petroleo de fracking o derivados financieros. Dicen que el TTIP creará nuevos puestos de trabajo, ¡será en los cementerios y hospitales para atender a sus víctimas!.

El PP en el gobierno es vivir bajo permanente alerta NBQ (nuclear, química y bacteriológica), siempre con la catástrofe cerca. Son una peligrosa mezcla de corruptos, inútiles y temerarios. Por el lado bacteriológico hemos estado cerca de una epidemia de ébola. En lo nuclear hubo este octubre una prealerta de emergencia en Vandellos II, al perder la alimentación eléctrica por una tormenta en la zona. Mientras tanto, el gobierno insiste en reabrir la nuclear de Garoña, central caducada y peligrosa, llena de residuos nucleares, con un reactor que se considera “gemelo” al de Fukushima y la vasija agrietada. Por el lado químico  tenemos el acuerdo transatlántico entre Estados Unidos y Europa, donde se nos pretende meter a calzador un paquete con barbaridades como el pollo clorado, carne hormonada, vegetales transgénicos, petroleo de fracking o derivados financieros. Dicen que el TTIP creará nuevos puestos de trabajo, ¡será en los cementerios y hospitales para atender a sus víctimas!. 

Especialmente grave es el estado de corruPPción generalizada en que han sumido al país. El PP es el ébola de la democracia española.  Solo les importa llegar a las siguientes elecciones con la mejor intención de voto, mientras trincan todo lo que pillan. Los escándalos de corrupción que les asolan darían para llenar una enciclopedia. Uno de los últimos, la operación Púnica, ha descubierto una red profesional de corrupción, en la que se ofrecían a los empresarios todos los servicios para delinquir, desde el amaño de pliegos de contratos públicos, hasta el lavado de dinero. ¡solo faltó el alquiler de sicarios para eliminar a la competencia!. Numerosos implicados en esta trama han sido puestos en libertad tras declarar, con fianzas de entre 20.000 y 60.000 euros, autentica calderilla para ellos, si se compara con las millonarias cifras del desfalco. Tratamiento muy distinto recibió el presidente de la asociación Pannagh, Martin Barriuso, al que se impuso una fianza de 1 millón de euros. 

A pesar de las zancadillas, Barriuso sigue en la lucha por los derechos de los usuarios y cultivadores de cannabis. Un ejemplo ha sido el diálogo informal del TNI en Donostia, donde se reunieron expertos, académicos, políticos y activistas, para elaborar una regulación desde el punto de vista de una comisión multidisciplinar. Barriuso también realizó una gran intervención en el Parlamento Español, allí explico que, desde su anterior intervención en el año 2001, no se ha dado ni un solo paso hacia la regulación que reclamamos, al contrario ha aumentado la presión policial, tanto en la intervención de cultivos, como en las sanciones por tenencia. Mientras tanto la sociedad civil ha optado por sus propias soluciones, con la extensión del autocultivo individual y colectivo, así como la aparición del modelo de los clubs. Barriuso fue muy crítico con la nueva ley de tráfico, especialmente en lo que respecta al margen de fiabilidad del drogotest: “la accidentalidad en las autopistas de Colorado es la menor en toda la historia de ese estado, después de que se ha legalizado el cannabis, con lo que el acceso al cannabis no parece haber provocado una epidemia de accidentes de tráfico en Estados Unidos. Ahora bien, la ley de tráfico castiga cualquier nivel de cannabis en el organismo, sea objetivamente peligroso o no, a pesar de que el estudio Druid de la Unión Europea concluyó que ninguno de los sistemas de detección probados llega a los niveles de eficacia exigidos en los tres parámetros analizados: sensitividad, especificidad y precisión. Por otra parte, organizaciones que trabajan en la reducción de riesgos se han dirigido, tanto al fabricante de los test, como al Instituto Nacional de Toxicología, para preguntar cuántas horas hay que abstenerse de consumir cannabis para no dar positivo a la hora de conducir. Ambos, tanto el fabricante como el Instituto de Toxicología, han sido incapaces de decirnos con cuanta antelación hay que abstenerse de consumir, un dato que nos parece fundamental para poder tener un mínimo de seguridad jurídica. Por tanto, no existen garantías suficientes en estos momentos para asegurar que no se castiga injustamente a personas inocentes”.  

También hay que destacar la intervención ante el Parlamento de Fernanda de la Figuera, histórica activista de nuestro movimiento, que defendió el autocultivo para el autoconsumo con fuerza y convicción “La opción que propongo es el autocultivo para el autoconsumo. De esta manera el usuario puede controlar todo el proceso de producción, corte y secado del cannabis y derivados. Si pensamos que el cannabis es una planta que lleva miles de años en la madre naturaleza y que los usuarios lo único que utilizamos son las unidades florales de esta planta, esta es la forma de que nosotros podamos controlar su cultivo, decidir las variedades que necesitamos, las que son más allegadas a nuestro tipo de personalidad, o las que nos vienen mejor para nuestra salud.  El Código Penal entiende que todo acto de cultivo es ilegal, porque está enfocado al tráfico ilícito. Pero se ha demostrado que podemos hacer autocultivo para el autoconsumo cuando no exista prueba de que esté destinado a su tráfico, por lo que no constituiría un ilícito penal. Esta opción erradicaría la mayor parte de los problemas de los usuarios, en tanto en cuanto el cultivo no sea denunciado, ya que si el cultivo es denunciado y aparecen las fuerzas de seguridad, no hay manera de negociar con ellas y nos cortan nuestras plantas, con el tremendo problema que eso constituye para nosotros”. 

Estas intervenciones parlamentarias, se realizan tras las propuestas por la legalización del cannabis, realizadas tanto por UpyD (mes de julio), como por IU (mes de octubre). También hay movimiento en el Parlamento Navarro, donde se presentó una Iniciativa Legislativa Popular por la regulación de los clubs. Aunque la propuesta salió aprobada, la  Guardia Civil votó por su cuenta, al detener inmediatamente al cabeza de esta la iniciativa, Fermin Les, por el cultivo colectivo de un club. La mayoría de los líderes de nuestro movimiento están imputados o lo han sido, como es el caso de Martin Barriuso, Fermin Les, Fernanda de la Figuera, Yker Val o Jose Afuera.  Esto no es casualidad, hay un objetivo claro: criminalizar y desacreditar, imponer por la fuerza de las detenciones, ya que en el debate social la prohibición pierde por goleada. La verdad es que no engañan a nadie, ya hace tiempo que es evidente: los del PP son más mucho más peligrosos para la salud pública y la seguridad ciudadana que las plantas de cannabis.  

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