¿Cómo han mejorado tanto las autoflorecientes?

Hay unas pocas razones que explican la mejora en el rendimiento de las autoflorecientes feminizadas (comúnmente llamadas AutoFems o, sencillamente, autos). Pero hay que decir que cualquier cultivador doméstico que busque sembrar automáticas debería hacer los deberes, antes de gastarse el dinero en semillas. Al igual que con las variedades tradicionales que florecen con el fotoperiodo, hay algunos bancos de semillas que ofrecen  variedades más consistentes y de mejor calidad que otros, algunos bancos de semillas realmente saben lo que están haciendo, mientras que otros todavía están aprendiendo. Las mejores variedades automáticas de los mejores bancos son capaces de producir hasta más de 250g por planta, con niveles de THC similares a los de las variedades tradicionales. Los mejores bancos de semillas usan los parentales más potentes disponibles y comprenden los intrincados detalles y los puntos más delicados del proceso de crianza.

Las AutoFem se crían para que puedan florecer con 20 horas (o incluso 24) de luz diaria. Con una variedad tradicional, que florece con el fotoperiodo, la planta crece vegetativamente cuando los días son largos y sólo florece cuando la duración del día se reduce hasta las doce horas. Es lo lógico, la planta de cannabis ha evolucionado para empezar a florecer cuando nota que los días se van acortando, lo que indica que el otoño se aproxima. El comienzo de la floración es un signo de que la planta de cannabis intenta completar su ciclo de vida antes de que llegue el invierno. El cultivador de interior imita artificialmente el ciclo natural de vida encendiendo su lámpara HPS (o LED) durante doce horas en cada ciclo de 24 horas. La planta de cannabis tradicional (de floración determinada por el fotoperiodo) responde al menor número de horas de luz empezando a florecer, produciendo los pegajosos cogollos con los que todos los cultivadores domésticos sueñan. Para muchos de los que pertenecemos a la comunidad de criadores, siempre nos pareció una vergüenza que una planta de cannabis no pudiera ser forzada a florecer bajo días más largos. Durante la floración, justo cuando una planta necesita toda la energía que pueda conseguir para producir cogollos, tenemos que reducir la iluminación a sólo 12 horas cada día.

Hace unos pocos años, algunos de los mejores criadores descubrieron que podían ajustar los cimientos genéticos del cannabis para permitirle hacer algo que muchos calificaban de imposible. Fueron capaces de usar genética de la familia del Cannabis Ruderalis para conseguir que el cannabis floreciera abundantemente, aunque la planta estuviera creciendo bajo 20 horas diarias de luz. Al principio, muchos dijeron que aquello era imposible, pero la historia nos muestra que las reglas se hicieron para romperse, y los cultivadores de cannabis rompen reglas continuamente. Tal vez esa sea una de las razones por las que tantos cultivadores domésticos para autoconsumo se están inclinando por las automáticas.

Pero, ¿cómo han podido evolucionar tan rápidamente? Sólo han hecho falta cinco años para que el cannabis autofloreciente pasara de ser “el chico nuevo” a convertirse en una parte importante de la escena del autocultivo. Ni siquiera los mayores fans de las autoflorecientes esperaban un ascenso a la fama tan rápido. En Dutch Passion vemos que nuestros clientes compran casi tantas semillas autoflorecientes como tradicionales. Otros bancos de semillas bien establecidos estando observando la misma tendencia, conforme las automáticas van ganando cada vez más popularidad.

Hay unas cuantas razones que explican por qué las variedades automáticas han evolucionado tan rápidamente:

• Algunos de los mejores criadores de cannabis empezaron a cultivar automáticas enseguida, para ver con sus propios ojos de lo que eran capaces. En cualquier industria, si consigues que la gente con más talento e inteligencia se comprometa con una nueva tecnología verás muy rápidamente una de las siguientes dos situaciones: la tecnología se hundirá o permanecerá a flote. En el caso de las automáticas, la atención de los mejores criadores de cannabis ha permitido que evolucionen muy rápidamente.

• Se ha visto que se puede manipular el gen asociado al fotoperiodo para darle una gran ventaja al cultivador doméstico. Florecer cannabis bajo 20 (o 24) horas de luz permite un enorme aumento del potencial fotosintético y de la producción del cultivador doméstico medio. Hoy en día, muchos de los expertos en autoflorecientes mejor informados piensan que las automáticas ya son capaces de producir más que una variedad tradicional en el mismo tiempo, debido a un factor clave, las automáticas tienen casi el doble de energía lumínica disponible durante la floración, lo que equivale a mayores cosechas. 

• El desafío. A muchos de nosotros nos gustan los desafíos, tanto si son desafíos deportivos, intelectuales o personales. Para los mejores criadores y bancos de semillas siempre es un desafío mejorar las probabilidades de éxito a favor del cultivador doméstico. En la década de 1990, Dutch Passion creó las primeras semillas feminizadas de cannabis cuando otros decían que era imposible. Hoy vemos como las automáticas se convierten en una opción habitual para los cultivadores domésticos.

• Las genéticas. Conforme fueron comprendiendo mejor los detalles sobre cómo criar variedades automáticas, los mejores criadores fueron capaces de introducir, en la piscina genética de las autoflorecientes, las genéticas parentales de algunas de las variedades más apreciadas por los consumidores más sibaritas. El resultado fue una combinación de ensueño de los mejores criadores con las mejores genéticas, trabajando con un gran interés y motivación para llevar las automáticas más lejos y más rápido de lo que nadie nunca pensó que fuera posible.

Las automáticas también tienen otras ventajas. El cultivador medio suele cultivar un pequeño número de plantas para su propio consumo,  por lo general entre diez y veinte al año. Los cultivadores medicinales puede que planten unas pocas más, especialmente si producen productos comestibles, aceites o concentrados. Los cultivadores domésticos suelen ser cautelosos; les gusta cultivar discretamente usando los sistemas más pequeños, sencillos y con el menor número de plantas. El cultivador medio no quiere mantener espacios separados para crecimiento y floración, algo que no es necesario si se cultivan autoflorecientes. Muchos cultivadores tienen el fotoperiodo de su cuarto de cultivo en un régimen fijo de 20 horas de luz encendida seguidas de 4 horas de luz apagada. Con las variedades automáticas esto permite usar el mismo espacio para plántulas y para plantas en floración avanzada que se acercan al día de la cosecha. Puedes germinar nuevas semillas siempre que quieras y simplemente ponerlas en el cuarto de cultivo junto con el resto de automáticas, independientemente de en qué fase del desarrollo estén. Las automáticas suelen tardar unas once semanas de semilla a cosecha,  permiten que el cultivador use un solo espacio, con un fotoperiodo fijo, para todas las plantas. El largo periodo de luces encendidas también es muy útil para que el cuarto de cultivo se mantenga caliente durante los meses más fríos.

¿Hasta dónde llegarán las automáticas? El trabajo sobre las automáticas continúa, mucho de lo que podía conseguirse (en cuanto a producción y potencia) ya se ha conseguido, pero todavía hay algunas nuevas y excitantes ideas que podrían hacerse realidad en uno o dos años. Con la correcta crianza veremos aparecer cada vez más automáticas ricas en CBD. También esperamos ver continuas mejoras en calidad y producción, aunque por lo general sólo una pequeña parte de los cultivadores domésticos son realmente capaces de llevar las genéticas automáticas a su máximo potencial.

No esperamos que las automáticas reemplacen completamente a las variedades tradicionales, tampoco creemos que nadie quiera que eso suceda. Pero algunos bancos de semillas, incluyendo Dutch Passion, están viendo como las mejores automáticas se están haciendo más populares que muchas variedades tradicionales bien establecidas. Tal vez en el mercado de las semillas se encuentre un equilibrio, en el que coexistan las variedades automáticas y las tradicionales a partes igual. Hasta entonces, el mejor consejo que le podemos dar a cualquier cultivador que quiera probar personalmente las variedades automáticas es el siguiente: busca un banco de semillas en el que confíes y que tenga una buena reputación en variedades automáticas y pruébalas tú mismo. Acabarás sorprendido de lo fáciles, cómodas y devastadoramente potentes que han llegado a ser las mejores variedades autoflorecientes modernas.