Invierno: el frío potencia la cosecha en exterior
El invierno es visto como un problema. Pero el cultivo invernal tiene varias ventajas, una es que insectos y hongos se encuentran inactivos en su mayoría. Un mix de luz natural y artificial, una adecuada temperatura de riego y un par de cuidados más te pueden ayudar a cosechar en cualquier momento del invierno. Por Nico Vaia
Si te encuentras en el hemisferio sur, podemos decir que si tuviste una buena cosecha de exterior, sigues degustando de tus preciadas flores. Sino estarás pensando en la próxima temporada. Pero también puedes tener una cosecha invernal y fumar flores todo el año es la misión. Comienza el verano.
Las horas de luz del día se acortan y nuestras bellas damas en exterior comienzan su floración. Nosotros tenemos que preparar los utensilios para la futura cosecha. Limpiar frascos viejos, armar el secadero. Hacer lugar para almacenar. Y por qué no, pensar en tirar una tanda de nuevas semillas o tener algún esqueje pronto para que cuando la cosecha termine y hayamos cerrado el ultimo recipiente. Aunque las horas de luz no ayuden veamos qué hacer para generar un ciclo vegetativo llegado el otoño.
Vegetativo en frío
Una opción práctica es poder generarte un invernadero (lugar donde puedas cubrir tu cultivo del frío). Allí dentro coloca la fuente de luz. Desde bombillas de bajo consumo hasta bombillas leds, la idea es extender las horas luz cuando el sol ya deja de pegar en tu cultivo. Y así generar el ciclo vegetativo con las horas de luz correspondientes.
Será relativo el volumen de plantas que quieras o tengas con el volumen lumínico en cantidad de bombillas que tengas que poner, generalmente usamos una lampara por planta. Otra opción es tener una sala interior disponible donde puedas completar esas horas de luz que le falta, pero tendrías que todos los días sacar y entrar las plantas a la hora señalada.
A estas formas de cultivos se la conoce como cultivo mixto. Usamos luz artificial para suplementar lo que en el exterior naturalmente nos falta. Puedes buscar en la web un calendario día a día de las horas de luz total que hay dependiendo la zona donde vives.
Con esa referencia puedes saber cuántas horas de luz te harán falta para que tu planta cumpla con las horas necesarias para desarrollar su fase vegetativa. Otra opción es comenzar de semilla que necesitará un desarrollo hormonal aproximado de un mes para desarrollar su floración. Eso sí, sin la técnica de cultivo mixto tendremos un desarrollo y una cosecha mucho más pequeña.
Fotoperiodo invernal
Vayamos a la práctica. Cae el sol y es hora de prender las luces. Puedes optar por un timmer que hará el trabajo por ti. Automatízalo de acuerdo las horas de luz que precises completar. Puedes dejar automatizado ese ciclo durante aproximadamente un mes, semana más semana menos. Para luego apagar las lámparas y dejar que la naturaleza siga su curso con la tan hermosa floración. Pongamos de ejemplo que trabajamos entre abril y agosto. Llegado el invierno llega el día más corto del año.
A partir de ahí comienzan a incrementarse nuevamente las horas luz. Ten en cuenta esto para evitar una futura revegetación, que significa que la planta deja de florecer para empezar de nuevo con su fase vegetativa debido a que las horas luz se incrementan. Esto puede enlentecer la floración en curso.
O empezar la revegetación. Que tiene más posibilidades de aparecer en variedades de genética sativas. Escoge genéticas predominantemente índicas, con tiempo de floración entre 60 y 80 días. Son muy resinosas, resistentes a los ataques de moho y a las bajas temperaturas. Además, necesitan menos cantidad de luz que las sativas para completar su ciclo de floración.
Riego invernal y prevención
Regar con agua templada es beneficioso para el sistema radicular. En el cultivo de invierno hay que tener un celoso cuidado en el riego, el exceso y la baja temperatura provocan una retención de agua que tarda en evaporarse produciendo así un posible ataque radicular de hongos, hay que aprender a observar cuando la planta tiene sed para evitar este tipo de abusos. Los tricomas de los cogollos se desarrollan de manera distinta que en el verano, son menores debido al poco y no tan fuerte sol pero son más gordos.
Una característica de este tipo de cultivos en épocas de frio es que dependiendo la variedad que se tenga se pueden observar que las hojas, peciolos y cálices de las flores se oscurecen y se tornan de un color violeta a morado, esto se debe a que ciertas variedades cuentan con un pigmento llamado antocianina que se activa llegado el otoño, comenzando el frio y con la reducción en la producción de clorofila.
Invierno: su variación climática
La variación climática que se registra entre el día y la noche durante el invierno genera un moderado incremento en la producción de resina, ten en cuenta muy seriamente si quieres encarar este tipo de cultivos la utilización del invernadero. Si de ventajas hablamos. En el cultivo invernal los insectos como los hongos del cannabis se encuentran inactivos en su mayoría.
Puedes realizar una buena prevención. Los trichodermas y tierra de diatomeas son una muy buena opción para ambos casos. Así luego solo contemplas la floración sin estrés. No queda otra que ir probando. Experimentando formas y técnicas de cultivo. No quedarse con un solo ejemplo. Poder desarrollar un vinculo de amor eterno con ella. Como esos amores que nunca se olvidan y vuelven en cada florecer.