Micorrizas: por qué son importantes para el cultivo de cannabis

Soft Secrets
10 Aug 2013

Las micorrizas son asociaciones entre ciertos hongos beneficiosos del suelo y las plantas. Fomentar la presencia de estos hongos o bacterias "amigas" en el sustrato del cultivo favorece el crecimiento de las plantas, estimula un sistema radicular más sano y desarrollado capaz de asimilar mejor los nutrientes. Además previenen o reducen la presencia de plagas.


Por Mr. Sandman

Las micorrizas en el cannabis son claves. Fomentar la presencia de estos hongos o bacterias “amigas” en el sustrato del cultivo favorece el crecimiento de las plantas, estimula un sistema radicular más sano y desarrollado capaz de asimilar más nutrientes, y previene o reduce drásticamente la presencia de plagas evitando así pulverizar con compuestos químicos.

Las plantas utilizan los compuestos inorgánicos que hay en el suelo (agua y sales minerales) para producir, mediante la energía lumínica, materia orgánica (azúcares o proteínas). En los hongos ocurre todo lo contrario: utilizan la materia orgánica del suelo para descomponerla en materia inorgánica, obteniendo energía durante el proceso.

Cuando ambos organismos forman una asociación simbiótica, el hongo le dará a la planta la materia inorgánica y la planta le facilitará la materia orgánica; de esta forma podrán ahorrar costes energéticos al tener disponible el alimento que cada uno necesita.

La asociación entre estos dos organismos es tan beneficiosa para ambos que el 90% de las plantas terrestres poseen algún tipo de simbiosis fúngica. Si en el sustrato de nuestros cultivos solo encontramos tierra, ¿de dónde extraen los hongos la materia orgánica? Normalmente se alimentan de la materia orgánica en descomposición procedente de la planta  (aquí se incluyen las hojas o las raíces muertas), pero en los cultivos de cannabis puede existir otra fuente que proviene de los abonos; los fertilizantes basados en vitaminas, aminoácidos y sobre todo, de azúcares, pueden ser una excelente fuente de alimento para los hongos.

De esta forma, podremos mantener estas micorrizas durante todo el ciclo de la planta.

Micorriza en el cultivo de cannabis: sistema radicular

Cuando el sistema radicular de las plantas presenta micorrizas, se producirán cambios en muchos puntos del crecimiento y desarrollo. Los hongos crecen mediante una serie de prolongaciones que emiten en todas las direcciones (en biología se conocen como hifas). Este hecho agranda la zona a partir de la cual la planta puede obtener alimento y, por tanto, aumenta su crecimiento.

También aumenta la capacidad de la planta para absorber nitrógeno, fósforo y potasio, a la vez que estará más protegida para resistir condiciones extremas de temperatura, pH o de sequía. La presencia de determinados hongos en el suelo también funciona como fungicida (concretamente, frente al temido Botrytis) y al colonizar las raíces supondrán una barrera defensiva frente a otras infecciones. Por su peculiar forma de crecer formando ramificaciones, fomentan la aireación del suelo y mejoran su estructura para que las raíces estén en sus mejores condiciones.

Micorriza en el cannabis y bacterias de suelo

El desconocimiento de los diferentes seres vivos que existen provoca que, normalmente, se relacionen las bacterias con enfermedades y condiciones poco higiénicas. Pero esto no es así en la mayoría de los casos. Un ejemplo son las bacterias de suelo, como algunas especies de Bacillus o Pseudomonas.

Hay que resaltar que el mundo bacteriano es muy diverso encuanto a formas celulares, hábitos alimenticios y tipos de metabolismo, y serán los dos últimos factores los que ayudarán tanto al suelo como a las plantas. Las bacterias tienen todos los tipos de metabolismo que se conocen: algunas son capaces de vivir sin oxígeno, otras pueden producir su alimento a partir de materia inorgánica (como las plantas) y los ejemplos son inacabables, porque pueden vivir de muchas formas diferentes.

Esta capacidad es la que ha permitido que las bacterias vivan en la mayoría de los ambientes conocidos y, por lo tanto, interaccionen con otros organismos como las plantas, ya sea adheridas a las raíces o permaneciendo en el sustrato. Sus habilidades van más allá. Pueden soportar temperaturas y valores de pH muy extremos, y formar estructuras de defensa (esporas) para soportar condiciones desfavorables; cuando las condiciones vuelvan a ser propicias podrán seguir desarrollándose y dividiéndose para aumentar su número.

Las particularidades de las bacterias las hacen idóneas para que estén presentes en cultivos tanto de exterior como de interior. Las variedades bacterianas que se suelen seleccionar para cultivos cannábicos tienen varias finalidades, pero la principal es la de acondicionar el sustrato durante todo el ciclo de la planta, tanto en la fase de crecimiento como en la de floración.

Hay multitud de especies que, al igual que los hongos, pueden descomponer la materia orgánica para aportar en los suelos materia inorgánica que las plantas pueden usar. Esta acción aumenta la fertilidad de la tierra al aportar compuestos ricos en nitrógeno, fósforo y potasio así como microelementos esenciales. En su conjunto, este tipo de bacterias son las principales responsables de añadir sustancias húmicas en los suelos, a la vez que producen hormonas vegetales y otros bioestimuladores que potenciarán y acelerarán el crecimiento vegetal.

Esta cualidad ya sería suficiente para el cultivo exterior, donde el ciclo vital es mucho mayor al aumentar el periodo de crecimiento, pero hay más utilidades, como cuando se añaden esporas de las denominadas bacterias nitrificantes. Este conjunto de bacterias son capaces de incorporar el nitrógeno atmosférico y transformarlo en compuestos nitrogenados que pueden usar las plantas. El nitrógeno atmosférico es un gas y ningún ser vivo, excepto este tipo de bacterias, puede usarlo, así que introduciremos otro sistema de fertilización: aprovechar el aire de nuestra habitación de cultivo.

Micorrizas en el cannabis: Resultados prácticos

Para comprobar este efecto se han observado dos semillas a lo largo de su primer mes tras la germinación. Durante este periodo el sistema radicular de la planta empezará a formarse, dividirse y elongarse lo máximo posible para colonizar toda la tierra y obtener así todos los nutrientes necesarios.

El objetivo es añadir esporas de microorganismos una vez que hayan pasado dos semanas; al hacerlo de esta forma, las esporas podrán diseminarse tanto por el sustrato como por las raíces, y así podremos ver el resultado de los efectos directos e indirectos comentados al principio. El producto aplicado es el Micro Vita de Top Crop, y puesto que las esporas de bacterias y hongos que contiene podrán reproducirse perfectamente dentro del armario de cultivo, lo hemos aplicado dos veces consecutivas a la dosis más baja para no abusar; el siguiente riego (después de los dos con el producto) ha sido con agua sin ningún abono para evitar dañar a las nuevas colonias que están creciendo.

La aplicación de esporas se realiza en la planta que presenta un leve retraso en el crecimiento, para poder comprobar si hay una mejora o no. Cuando pasan seis días, ambas plantas ya están casi emparejadas en altura y, cuando termina la segunda semana, después de aplicar el producto, se puede apreciar que la planta con microorganismos de suelo empieza a tener mayor vigor, un tallo un poco más grueso y un sistema radicular más fuerte y extendido. Al ser métodos naturales, no tienen efectos drásticos. Su utilización se basa en una mejora de la salud de las plantas a largo plazo y durante todo su ciclo vital, garantizando que no aparezcan carencias y evitando la aparición de plagas.

Conclusiones sobre la micorriza en el cultivo de cannabis

Para muchos cultivadores, entre los que me incluyo, el cultivo y cuidado de nuestras plantas no se centra exclusivamente en la producción masiva a toda costa. Técnicas como fabricar sustrato a partir del usado, utilizar abonos biológicos o, como en este caso, favorecer los microorganismos de suelo para asegurar la salud del sistema radicular de forma natural, contribuyen a tener una cosecha de máxima calidad sin tener que recurrir a productos químicos.

Unas raíces en buenas condiciones aseguran una planta sana, pero si están acompañadas de bacterias y hongos de suelo gozarán de una mayor capacidad de asimilar nutrientes y serán menos susceptibles a enfermedades. Hay toda una serie de organismos que han ido evolucionando conjuntamente con las plantas y, de esta forma todos ellos han podidomejorar sus cualidades para seguir mejorando sus aptitudes.

Todo sobre micorrizas aquí.

S
Soft Secrets