Todo lo que necesitas saber sobre el riego de la marihuana

Soft Secrets
31 Dec 2020

Las plantas de marihuana grandes usan más agua que las plantas pequeñas, pero hay muchas más variables además del tamaño que dictan el consumo de agua por parte de una planta.


 Algunas de estas variables incluyen la variedad y la edad de la planta, el tamaño del contenedor, el medio de cultivo, la temperatura, la humedad y la ventilación; factores todos ellos que determinan las necesidades de agua. Cambia cualquiera de esas variables, y el consumo de agua cambiará.

Una buena ventilación y circulación de aire resulta esencial para fomentar el flujo de fluidos, la transpiración y el crecimiento rápido. Cuanto más sana está una planta, más rápido crece y más agua necesita. Por ejemplo, un pequeño jardín de 120 x 120 centímetros, con 16 plantas sanas en macetas de 11 litros necesita 40-100 litros de agua cada semana. Una gran planta de tres metros y medio de altura, y que está creciendo con rapidez, puede usar hasta 38 litros de agua en un día soleado y caluroso.

A continuación, se explican los fundamentos del riego. Debes tener siempre en mente estos aspectos básicos, a medida que desarrollas tus conocimientos y habilidades en lo que respecta a la cantidad de riego para tu jardín. Préstales atención a tus plantas, y comprenderás sus necesidades.

[caption id="attachment_41937" align="alignnone" width="1707"] Satura la tierra del contenedor y pon la maceta en una báscula para determinar su peso.[/caption]

 

Los medidores de humedad eliminan las suposiciones referidas a la penetración del agua en la tierra y en los sustratos sin tierra. La sonda se inserta en el sustrato, y mide el contenido de humedad en su punta. La lectura se muestra en una escala analógica de mojado a seco en el otro extremo del aparato. Siempre me sorprende la irregularidad con que retienen el agua algunas tierras y mezclas de sustrato. Las porciones de tierra seca que están rodeados de sustrato húmedo dificultan la absorción de humedad y nutrientes. Las raíces sufren estrés, y el desarrollo es más lento. Yo utilizo un medidor económico (15 €). Los medidores más caros envían la información recogida a tu dispositivo digital, donde se recoge, analiza y presenta en formato gráfico o numérico.

Un plan de riego os mantendrá en orden a ti y a tu jardín. Altera el plan de riego en función del viento, el calor y la humedad. Las plantas utilizan más agua cuando suben las temperaturas, y cuando hace viento. Las plantas usan menos agua cuando las temperaturas refrescan y aumenta la humedad. Comprueba siempre la humedad del suelo al tacto antes y después de regar.

[caption id="attachment_41936" align="alignnone" width="1707"] Cuando la maceta pese la mitad, y aún quede en la tierra el 50% del agua, será hora de regar.[/caption]

 

Riego temprano en el día para que el agua que salpique las hojas tenga ocasión de secarse. Evita mojar el follaje, y no dejes que el agua permanezca en las hojas de un día para otro, con el fin de evitar enfermedades.

Las plantas pequeñas con un sistema de raíces reducido en contenedores pequeños han de ser regadas a menudo. Riega frecuentemente las plantas pequeñas en macetas; tan pronto como se seque la superficie del sustrato. Mientras haya buen drenaje, será difícil regar en exceso el cannabis que está en crecimiento rápido. Unos clones de cuatro semanas que están floreciendo en contenedores de 7,5-11 L requieren riego diariamente. Si las macetas pequeñas están expuestas al sol directo y al viento, se secan muy deprisa y pueden necesitar ser regadas dos veces al día.

[caption id="attachment_41935" align="alignnone" width="1920"] El tubo de riego por goteo es fácil de colocar en macetas individuales para que proporcionarles una cantidad exacta de solución nutriente.[/caption]

 

Riega el cannabis en macetas cuando se haya usado la mitad del agua, independientemente del tamaño. Para calcular cuándo se ha gastado la mitad del agua, satura la tierra del contenedor hasta que el agua salga por los agujeros de drenaje de la base. En este punto, la tierra contiene el 100% de agua mezclada con el medio de cultivo. Pesa el contenedor. Digamos que pesa 10 kilos. Cuando se haya gastado la mitad del agua, el contenedor pesará 5 kilos. Cuando hayas pesado unos cuantas macetas, tendrás la experiencia y la habilidad suficientes para levantar el contenedor y hacer un cálculo muy aproximado sobre cuándo regar. El paso siguiente será inclinar el contenedor para decidir cuándo regar.

Otro método consiste en regar las plantas en macetas cuando la tierra está seca algo más de un centímetro por debajo de la superficie. Este método funciona bien, pero no tiene en cuenta el tamaño del contenedor, y resulta menos preciso.

Deja que al menos el 10% del agua salga por los agujeros de drenaje del fondo de las macetas. El agua de drenaje arrastra el exceso de sales fertilizantes que puedan haberse acumulado en la tierra.

Ordena las macetas en filas para facilitar la identificación de las plantas que necesitan agua y las que ya están regadas. Es muy fácil pasar por alto una maceta cuando hay que regar muchas.

Trabaja ligeramente la superficie de la tierra en las macetas para favorecer que el agua penetre con uniformidad, evitando que se formen zonas resecas. Esto también impide que el agua se cuele hacia abajo por el espacio que se forma entre el sustrato y la pared interior del contenedor, saliendo directamente por los agujeros de drenaje. Desmenuza y rastrilla 1-2 cm de tierra en la superficie usando los dedos o un rastrillo pequeño de jardinería. Ten cuidado de no dañar las diminutas raíces superficiales.

No escatimes el agua en ninguna fase de desarrollo del cannabis. El cannabis requiere mucha agua. Restringir el agua provoca estrés y ralentiza todas las etapas del crecimiento. Racionar el agua durante la floración da lugar a flores más pequeñas, y reduce la producción. Las plantas que sufren estrés son mucho más proclives a una gran variedad de problemas.

[caption id="attachment_41934" align="alignnone" width="1920"] Una lanza de riego con una alcachofa tipo ducha airea el agua y la dispersa de manera uniforme. Puedes alcanzar más sitios con una lanza de riego, y evitar daños en el follaje.[/caption]

 

Riega en base a un ciclo de seco y mojado. El cannabis se desarrolla mejor cuando las raíces buscan agua y nutrientes. Esperar a regar hasta que la tierra está un poco seca hace que las raíces se estiren en busca de agua, induciendo su crecimiento y penetración en la tierra.

Las plantas que están expuestas al viento se secan mucho más deprisa. Al aire libre, las plantas que están en patios y terrazas usan hasta el cuádruple o más de agua en días calurosos con viento. Tener el riego cubierto resulta difícil para los jardineros que viajan, y lleva tiempo. Los sistemas automatizados de riego, que emplean temporizadores, ayudan a mantener un programa consistente de riego.

Riega el cannabis plantado en el suelo cuando la tierra esté seca alrededor de 2,5 cm por debajo de la superficie. El cannabis que ha sido trasplantado recientemente necesita ser regado con más frecuencia durante las primeras semanas, especialmente cuando el tiempo es cálido o caluroso. Si se planta con tiempo fresco, las raíces tienen oportunidad de crecer hacia abajo y hacia los lados antes de que llegue el calor.

Estos trasplantes se desarrollan mucho mejor, y requieren un riego menos frecuente que si se hubieran plantado con tiempo caluroso. Los brotes que se ponen directamente en tierra, y los que arrancan en interior y se pasan a exterior pronto, tienen oportunidad de desarrollar una raíz central larga. La raíz central se adentra profundamente en la tierra. Los plantones que se plantan a principios de temporada tienden a ser más resistentes a la sequía que los clones, los cuales tienen un sistema de raíces mucho más reducido. Puedes disminuir el estrés de temperatura y el consumo de agua añadiendo acolchado y cultivando bajo mallas de sombreo.

Utiliza materiales de acolchado para proteger la tierra de la lluvia y del sol abrasador. El acolchado también atrae la humedad y la retiene en el suelo. Puede conservarse gran cantidad de agua aplicando una capa gruesa de paja, que es mi material favorito de acolchado.

[caption id="attachment_41933" align="alignnone" width="1702"] Un medidor de humedad resulta indispensable para medir la humedad de la tierra.[/caption]

 

Instala una malla de sombreo semipermeable a modo de cortavientos para reducir la incidencia del viento en zonas turbulentas. La malla de sombreo funciona muy bien como cortavientos, y es fácil de usar. El viento reseca las plantas de cannabis rápidamente, agotando su energía y aumentando las necesidades de agua y el estrés de las plantas. Coloca malla de sombreado sobre los jardines al aire libre para que se mantengan a unos grados menos de temperatura, lo que reduce el consumo de agua y el estrés de las plantas.

El exceso de riego es un problema común, especialmente cuando se cultiva en tierra pesada que drena mal. Demasiada agua ahoga las raíces al quitarles su provisión de oxígeno. Las raíces se sofocan literalmente por falta de oxígeno si se mantienen en agua durante más de 20 minutos. Hay jardineros demasiado entusiastas que quieren tanto a sus plantas que les dan agua de más, y suelen causar un exceso de riego. Las plantas utilizan menos agua y son más tendentes a sufrir excesos de riego, cuando hay poca corriente de aire y humedad alta.

Los síntomas del exceso de riego incluyen hojas cuyos bordes se rizan hacia abajo, y desarrollo lento. La tierra anegada fomenta la pudrición de las raíces y otras enfermedades relacionadas con el agua. Los síntomas iniciales del exceso de riego suelen ser sutiles, y puede ser que los jardineros inexpertos no aprecien estas señales, hasta que el daño ya se ha producido.

La falta de riego puede ocasionar problemas serios si no se corrige. Cuando una planta de cannabis se marchita, ha estado falta de agua durante un día o más, y los daños han empezado a ocurrir. Las plantas comienzan a detenerse para conservar la humedad, y el crecimiento se ralentiza hasta llegar a detenerse.

Si la tierra se reseca, los frágiles pelos radiculares se secan y mueren en poco tiempo. La tierra seca, incluso en porciones delimitadas, pueden hacer que los pelos radiculares se sequen y mueran. Luego, parece que las raíces tardan una eternidad en desarrollar nuevos pelos y retomar el crecimiento rápido.

El consumo de agua aumenta cuando el crecimiento rápido se une al tiempo caluroso, el sol brillante, la tierra tostada por el sol y el viento. Esta agua debe reponerse pronto, o las plantas sufrirán estrés hídrico. La tierra en contenedores pequeños se seca deprisa. El cannabis en crecimiento rápido que está en macetas pequeñas suele requerir riego diario. Si se pasa por alto una maceta, la planta falta de agua puede atrofiarse y no retomar ya el crecimiento rápido.

Evita la falta de riego comprobando con regularidad los niveles de humedad, especialmente cuando suben las temperaturas y hace viento. Añade capas de acolchado a la tierra cuando la tierra se caliente, y cultiva bajo malla de sombreo las plantas que están en macetas pequeñas.

Para asegurarte de que la tierra se humedezca por completo, añade dos gotas de jabón líquido concentrado biodegradable por cada litro de agua. El jabón actúa como agente humectante, ayudando a que el agua penetre en la tierra de manera más eficiente. Además, esto previene la formación de zonas resecas en el sustrato. La mayoría de los fertilizantes solubles contienen un agente humectante.

Si la tierra resulta difícil de humedecer, aplica entre la cuarta parte y la mitad del agua que esperas que requiera la planta, y espera 10-15 minutos para que se absorba totalmente. Añade más agua hasta que la tierra esté humedecida uniformemente. Sumerge los contenedores pequeños en agua para asegurarte de que la tierra se empapa. Llena un contenedor grande con agua. Mantén una mano sobre la tierra, y sumerge la pequeña maceta hasta que el medio esté completamente saturado.

No sumerjas las macetas en agua durante más de 20 minutos, o las raíces literalmente se ahogarán. Pon el contenedor en un cubo con agua, y espera a que se hunda, así sabrás que está saturado, ya que la tierra y el agua alcanzan el mismo peso. Coloca las macetas en platos para contener el agua de drenaje.

Los sistemas automáticos de riego producen resultados consistentes. Un temporizador dosifica el agua durante un tiempo específico antes de detener el riego. Los sensores de riego también pueden accionar el sistema de riego. Los sistemas de riego por goteo pueden ajustarse para proporcionar un volumen concreto de agua por hora.

Otros artículos de Jorge Cervantes en Soft Secrets:

 La importancia económica del cannabis

Prevención de enfermedades y plagas en la marihuana

Cultivo industrial de marihuana no psicoactiva alta en cannabidiol

S
Soft Secrets