Trainwreck

Procedente de un clon élite obtenido a partir de diferentes Sativas, esta variedad de origen Californiano nos deleita con unos enormes cogollos cubiertos de una hermosa capa blanca de resina. Su elevada potencia, tanto física como cerebral, unida al exquisito aroma que desprende, la convertirán en una de tus plantas más apreciadas.

Trainwreck (tren descarrilado) es una variedad feminizada que también está disponible en formato regular producida por el banco de semillas Humboldt Seed Organization. Este banco de semillas procede de la costa norte de California, está formado por un colectivo de breeders con muchos años de experiencia en el cultivo de cannabis y goza de gran prestigio tanto en su país como en el resto del mundo debido a la calidad y reconocimiento que tienen algunas de sus semillas. Disponen de un amplio catálogo de variedades feminizadas, regulares, automáticas y ricas en CBD. Entre sus ejemplares más destacables se encuentra la Trainwreck.

Esta semilla destaca por su potente efecto y su enorme producción. Debido a su vigor y a su rápido desarrollo no debemos alargar demasiado la fase de crecimiento. En exterior podemos obtener plantas de hasta 3 metros de altura con forma de árbol de navidad. En floración, a causa del gran tamaño y peso de las flores se hace imprescindible el uso de tutores. Las flores están maduras tras unas 8-10 semanas bajo lámparas a doce horas y se pueden recoger entre principios y mediados de octubre en el exterior, con especial atención al ataque de hongos. Es una variedad que se desarrolla mejor en climas cálidos y secos. La cosecha es de peso y de calidad.

En interior, la producción es de aproximadamente unos 400-600 g/m² y de más de un kilo por planta en exterior. Los cogollos son muy grandes, densos y ovalados. La incontable cantidad de resina que recubre los cogollos es apreciable a simple vista. El porcentaje Indica/Sativa es del 60/40 llegando a niveles de THC que rondan el 15%. Su efecto es contundente. Golpea primero en la cabeza y después arrastra todo tu cuerpo hacia un estado de calma. Posee un sabor muy especial, tirando a Kush, inunda tu paladar con toques cítricos mezclados con maderas exóticas y especias.

Germinación y crecimiento

Introducimos tres semillas de un paquete de Trainwreck para su germinación entre trapos de camisetas previamente humedecidos, a oscuras y en un lugar con una temperatura agradable para la germinación. La humedad absorbida por las semillas activa sus procesos vitales y en algo menos de 48 horas la radícula ya es visible en los tres cañamones. Preparamos unas macetas con algo menos de un litro de tierra. Regamos la tierra antes de introducir la semilla, esto evita que al echar el agua se nos mueva o se hunda a demasiada profundidad. Debajo de una bombilla de sodio de 250w, debido al calor seco que éste emite, las semillas lo agradecen y se desarrollan a gran velocidad, mostrando las hojas seminales por encima de la tierra en poco más de un día. Dejamos que desarrollen un correcto sistema radicular en este contenedor durante algo más de diez días, en los que alternamos un estimulador de raíces con riegos con agua. Las plantas están verdes, sanas y fuertes. Tras algo menos de dos semanas son trasplantadas a recipientes de mayor tamaño, en este caso elegimos tiestos de 11 litros. Aplicamos un riego más con enraizador, tras el trasplante, y otros dos más a posteriori antes de empezar con el abono de crecimiento. Al utilizar de primeras una tierra rica en nutrientes, apenas tenemos que aplicar un par de riegos con abono de crecimiento a dosis bastante bajas. En poco más de un mes las plantas tienen un tamaño considerable. Los primeros pistilos se dejan ver y nos indican que están preparadas para cambiar su ciclo a doce horas y florecer.

Floración

Con el cambio de fotoperiodo y debajo de lámparas de más intensidad, en este caso 600w, la Trainwreck nos muestra todo su potencial con un continuo desarrollo de ramas y brotes nuevos. Añadimos un estimulador especial para floración unido al abono específico de floración y lo mezclamos con el riego todas las semanas. Con el paso de los días la formación de pistilos  avanza constante, resulta una planta bastante peluda. En poco tiempo las flores adquieren un tamaño enorme que hace temer ante un posible ataque de hongos. El uso de tutores se hace necesario si no queremos encontrar todas las ramas dobladas de un día para otro.

En poco más de 8 semanas, todas las plantas están más que listas para su corte. Hacemos un concienzudo lavado de raíces dos semanas antes de cortar y añadimos solo agua al riego a partir de este momento. La ventilación y la extracción funcionan a pleno rendimiento, pero aun así en esta última semana de fructificación descubrimos que los cogollos más densos no resistieron y el moho les ha afectado. El central y alguno de los cogollos laterales más llamativos se tienen que tirar por culpa de la botritis. Aún habiendo perdido los cogollos más grandes y llamativos, la cosecha y la calidad de la misma ha sido bastante buena con cogollos de gran tamaño, peludos, compactos y con una media de unos 30 gramos por planta.

Sabor y efecto

Tiene un sabor muy agradable, dulce con un toque a cítricos y especias, suave, pero que se mantiene en la boca durante largo tiempo. El colocón tras su consumo es inmediato, primero te deja grogui cerebralmente y después se adueña de todo tu cuerpo introduciéndote en un profundo estado de relajación.