Desmenuzando la nueva Cristal Candy Auto®
Recientemente, Sweet Seeds® ha celebrado su 11º aniversario en la escena cannábica y, al igual que el año anterior, habrá muchas sorpresas en las redes sociales Facebook, Twitter e Instagram y foros cannábicos donde tienen cuarto propio. No dejéis de visitar su muro a diario, pues suele haber concursos y muchas noticias compartidas directamente desde su nuevo Blog. También se mantendrá la promoción de 3+1 semillas gratis y 5+2 semillas gratis con cada pack y además se esperan nuevas variedades para dentro de muy poco, algunas de ellas ricas en CBD.
Durante todos estos años Sweet Seeds® ha realizado un exhaustivo trabajo de selección de plantas y pruebas con las mismas, para crear un catálogo variado donde cada cultivador pueda encontrar alguna de sus especies favoritas de marihuana. Siendo uno de los bancos referentes a nivel mundial en la producción de semillas de cannabis, se propicia que cada nuevo lanzamiento sea un reto a batir por el equipo de I+D+I de Sweet Seeds®. Como algunos de vosotros imagináis, existen muchos parámetros que entran en juego a la hora de evaluar una nueva genética y que ésta sea apta para su distribución.
Luego entran en escena los gustos y preferencias personales de cada uno, pero a grandes rasgos, lo que un buen breeder aporta a una nueva variedad es un equilibrio entre todos ellos. Para que una variedad sea sencilla de cultivar, tenga gran índice de germinación, tenga vigor, sea de tamaño moderado y apta tanto para interior como para exterior, que dé gran producción, con excelentes efectos y sabores, Sweet Seeds® cuenta con un gran equipo de búsqueda y perfeccionamiento de genéticas para que todo salga a las mil maravillas en tus cultivos. No en vano es uno de los bancos con más copas cannábicas a sus espaldas de todo el territorio español. Coincidiendo con esta celebración y como parte central de este reportaje, se anuncia y pone en venta una de las muchas novedades que tienen preparadas para este año 2017. Es el turno de presentar a la nueva y flamante: Crystal Candy Auto® (SWS61).
Dulce flechazo
Cuando aparece una nueva variedad con una respuesta tan favorable en cultivo y a su vez tiene un sabor y efecto tan bien balanceados, me es difícil no recomendársela a mis amigos. Os digo esto mientras saboreo una buena vaporización de Crystal Candy Auto® que coseché hace poco menos de un mes y puedo afirmar que cada día que pasa, me gusta más. Es de esas especies de las que se disfruta al 100%, tanto su cultivo como su consumo. Esta nueva autofloreciente surge de un cruce de la última variedad fotodependiente que Sweet Seeds® presentó en 2016, la Crystal Candy® (SWS58), con una variedad autofloreciente de tonos aromáticos muy semejantes, la Sweet Special Auto (SWS35).
La mezcla de ambas genéticas da como resultado una planta muy aromática de gran porte y estructura compacta, con flores densas y cargadas de tricomas. El efecto es muy claro, con tendencia híbrido Sativa. Es una variedad que se cosecha tras 8 semanas desde su germinación, con un crecimiento muy vigoroso y acelerado, generando múltiples ramas laterales y un gran cogollo central. El aroma y su sabor son un verdadero acierto si eres de los que disfrutan de plantas con toques frutales, dulces y exóticos. Una planta para enamorarse. Desde mi punto de vista, Sweet Seeds® ha vuelto a crear una variedad autofloreciente con carácter propio, de sabor exuberante y gran producción, que va a dar mucho que hablar. Viendo los resultados obtenidos en mi cultivo, creo que más de uno vais a pensar lo mismo.
Cultivo en interior
Suelo hacer diarios en distintos foros cannábicos, poner en ellos todo mi empeño para plasmar de la mejor manera como hago los cultivos, así todos podéis comparar resultados. Al hacer un reportaje me pasa lo mismo, desde que abro el envase de semillas pongo especial atención al modus operandi, para que sea lo más claro y limpio posible, siempre respetando a las plantas y dándole una vida digna y placentera. Todo el amor que les des te será devuelto con creces. Pero en este caso, el comienzo no fue tan benevolente con las 6 semillas de Crystal Candy Auto® que había puesto a remojar, justo coincidió la germinación con una falta de coordinación con un amigo que guarda la tierra en su casa. Estuvieron cerca de 10 días sin recibir una maceta con tierra.
Como muchos sabréis, pues sois ávidos cultivadores, retrasar el trasplante de una semilla autofloreciente recién germinada siempre tiene consecuencias, principalmente en el tamaño final de la planta, por ende, acompañado de una pérdida de producción. Este tiempo es crucial, las autoflorecientes ralentizan mucho el crecimiento sobre la 4ª semana de vida y empiezan a florecer. Por suerte, gracias a que las 6 semillas seguían con vida tras la vuelta de mi amigo, me apresuré a darles un buen sustrato y una maceta adecuada para el ciclo y potencia de luz que iban a recibir. En este caso 600W con luz de sodio, para un ciclo de 20 horas encendido y 4 horas de oscuridad, desde la germinación hasta la cosecha. El armario tiene extracción e intracción prácticamente encendidos de manera continua, dentro del mismo hay dos ventiladores medianos, más una estufa con termoventilador, acoplada a un termostato que la enciende cuando la temperatura está por debajo de 18ºC. Recomiendo mantener el clima estable entre 18ºC y 28ºC, con una humedad moderada entre el 40% y el 80%, pues esto asegura que las plantas tengan siempre las condiciones idóneas para alimentarse y crecer.
Al haber coincidido el cultivo con la época lluviosa de otoño, no hizo falta añadir humedad ya que se mantuvo estable. El tamaño de macetas Airpot usado ha sido de 20 L y 10 L. Al usar dos tamaños puedo ver diferencias entre ellas y luego decidir cuál voy a usar en el futuro, pero casi siempre me gustan las de 20 L pues facilitan bastante la tarea. Además, al ser macetas con agujeros laterales, secan mucho antes el sustrato y con las de tamaño más pequeño, harían falta riegos más continuos. Esto es bueno, pues permite aumentar la frecuencia del mismo y puedes obtener grandes cosechas, pero en mi caso, prefiero optar por macetas más grandes que faciliten el cultivo, aunque sea a costa de perder algo de producción. En autoflorecientes siempre uso el mismo sustrato (tierra) que en cualquier otra variedad de Cannabis, así me aseguro un aporte de alimento para las cuatro o cinco primeras semanas. Es importante ayudar con bio estimuladores para favorecer el crecimiento de las raíces y flores. Usar un bioestimulador de raíz ayuda a que la planta genere un gran crecimiento radicular, ideal para absorber mejor el alimento y, sobre todo, que mantenga una buena salud general en toda la planta. El Bio estimulador de floración recomiendo usarlo cuando la planta haya adquirido cierta altura y aparezcan los primeros pistilos, indicando el inicio de la floración.
En mi cultivo empecé a usarlo sobre el día 28, con los primeros brotes de flores formados. En ese momento tenían una altura media de 35 cm, la verdad es que, para haber tenido ese retraso inicial, no me podía quejar. Todas estaban muy saludables y de momento no hizo falta añadir a los riegos nada más que bioestimulador de flores durante las 2 semanas siguientes. Este sería el abono principal que usé, ya que casi todos los demás nutrientes que las Crystal Candy Auto® necesitaban los han ido tomando de la tierra. Los momentos más críticos fueron entre la semana sexta y séptima, ya que algunas plantas demandaron más alimento, especialmente las más altas que ya superaban los 60 cm. Además, al estar en maceta más pequeña consumieron la comida disponible rápidamente. Si ese es tu caso también, puedes añadir algo de abono de floración. También suelen necesitar algo de Calcio y Magnesio en esta etapa, pero en este cultivo no me ha hecho falta añadirlo, por lo que sólo les he dado 2 riegos con abono de floración, ya que las plantas siempre se han mantenido muy saludables, con hojas brillantes y una gran formación de flores.
Cuando una planta no lo demanda, añadir alimento es provocar que se acumulen sales y que no absorba correctamente todos los nutrientes. Si os fijáis en las fotos veréis que las plantas no han pasado hambre, la formación de cogollos ha sido contundente. Por cierto, el abono de floración usado ha sido totalmente bio. Crystal Candy Auto® produce grandes cogollos centrales y laterales. Una vez inicia su floración es digna de ser admirada, pues la producción de pistilos y cristales es extrema, dejando todas las hojas que rodean al cogollo cargadas de tricomas. Imposible no pegar la nariz y llevársela un poco pegajosa luego. Acabando la 7ª semana, las plantas tenían la altura definitiva, con una media de 60 cm entre los 6 especímenes. Las plantas que estuvieron en macetas de 20 L se desarrollaron más robustas y con ramas laterales muy cargadas. Sin embargo, las que estaban en las macetas de 10 L tomaron más altura, superando alguna de ellas los 70 cm. Con cada riego era más que visible el cambio en la formación de flores en ambos tamaños. El bioestimulador de flores, usado a máxima dosis, junto al vigor de la Crystal Candy Auto®, han sido la combinación perfecta para que los cogollos explotasen en producción de pistilos.
Al no saturar el sustrato con muchos tipos de abonos, las plantas han acabado muy sanas y sin manchas. Tal vez les ha faltado esa semana extra de crecimiento, pero no me puedo quejar de los resultados. En el fondo, en un cultivo de interior con 600 W, la luz efectiva suele rondar los 60 cm midiendo desde las puntas de las plantas, por lo que esta medida puede ser perfecta. Viendo su crecimiento, creo que esta variedad puede ser muy apta para moldear sus ramas mientras crece. Prueba a hacer LST o algún tipo de técnica que no sea agresiva con la planta y le permita equilibrar sus ramas laterales con el cogollo principal, posiblemente te sorprendan los resultados. Con 60 días fueron cosechadas, no sin antes hacerles un vídeo y una buena sesión fotográfica que podréis ver en internet próximamente, junto a las fotos que aparecen en este reportaje. No he podido hacer un peso de la cosecha, pero estimo que ha quedado muy cerca del gramo/vatio. Los cogollos tienen una fragancia salvaje, dulzona y con muchos tintes a frutas maduras, algo ácidas que recuerdan a melón o fresa.
Es un aroma de esos que quieres meter la nariz en el cogollo durante un buen rato para poder descifrarlo. Ya os podéis imaginar el sabor que tienen estos cogollos una vez que tienen un tiempo de curado. Es chorizo ibérico, como llaman mis colegas a la buena marihuana. Para este reportaje he dejado curar bien un par de buenos cogollos. Tras meter uno en el vaporizador he podido saborear el frescor que tiene la Crystal Candy Auto®, pleno y muy potente en boca. Tiene muchos matices a frutas maduras, entre ácidas y dulces. El efecto es notable tras muy poco tiempo y se siente muy creativo y lúcido. Luego el otro lo he liado en un canuto que acabo de terminar ahora mismo y, como os imagináis, no hay nada comparable al sabor puro del vapor, pero llevo muchos años fumando y para mí la mejor manera de evaluar una hierba es en forma de porro. Esto hace que pueda hacer una mejor comparación con el resto de variedades que haya probado. El Cannabis vaporizado suele ser siempre muy fresco y rico en boca, pero no todas las hierbas son igual de buenas cuando les metes papel y le das fuego. Esta es excelente y muy rica en matices, te llena los pulmones y tiene un retronasal muy complejo. Espero que disfrutéis de esta variedad al igual que yo estoy haciendo y le hagáis un hueco para vuestro próximo cultivo a esta belleza de Sweet Seeds®
Crystal Candy Auto®
Variedad SWS61 Producción Interior: 400-600 g/m2 Producción Exterior: 50-300 g/planta Cosecha Interior/Exterior: 8 semanas desde la germinación Altura: 70-130 cm ¡Gracias por la lectura y Dulces cultivos! Text: Jaypp