Deep Cheese - Que te la den con queso
Magnífica planta de tamaño medio, muy resistente y de corta floración que produce abundantes cosechas de excelente calidad. Los cogollos son enormes, muy densos y cargados de tricomas. Esta variedad destaca especialmente por su intenso y penetrante aroma, sin menospreciar su fuerte efecto, tanto mental, como físico.
Dos años ha trabajado el banco de semillas Dinafem seleccionando las mejores plantas Cheese para ofrecernos una versión mejorada de tan apreciada variedad. Fruto del retrocruce de su Cheese, el resultado final es espectacular.
Plantas más grandes y productivas en las que, sobre todo, se han marcado aún más las características organolépticas por las que esta planta de cannabis encandila a tantos cultivadores. Es una planta más bien ancha, con numerosas ramas y brotes.
Muy sencilla de cultivar y recomendable para utilizar por su patrón de crecimiento y estructura en las técnicas de cultivo SOG y SCROG. Perfecta para ser cosechada tanto en interior como en exterior, ya que florece en apenas ocho semanas y es resistente al ataque de hongos y plagas, a las que parece que no les atrae nada su característica fragancia.
En exterior, se puede recoger perfectamente a finales de septiembre o principios de octubre. Las producciones superan los 500 g/m2 bajo lámparas y se sitúan alrededor de los 600-800 g/planta en exterior con ejemplares que pueden llegar a medir dos metros y medio.
Las flores se desarrollan por toda la planta, formándose cogollos realmente grandes y pesados, siendo especialmente pronunciado el central. La cantidad de resina es apreciable a simple vista y el fuerte olor que desprende obliga a tener los filtros en funcionamiento.
El olor de esta hierba es realmente fuerte y con solo triturar un cogollo su fragancia se hace dueña del lugar. Llena desde la primera calada y deja su esencia en tu paladar durante largo tiempo. Verdaderamente posee matices a queso. El viaje es potente a todos los niveles, la cabeza te pesa y el cuerpo te pide que te relajes y sonrías.
Germinación y crecimiento
Al igual que todas las variedades de Dinafem, las semillas de Deep Cheese tenían muy buena pinta ya antes de ser germinadas. Pusimos cinco cañamones de esta variedad en trozos de tela previamente humedecidos. Brotaron rápidamente y en menos de 48 horas ya estaban enterradas con la radícula hacia abajo en macetas de apenas un litro de tierra.
Regamos la maceta antes de introducir la semilla, ya que, de hacerlo al revés, ésta podría hundirse demasiado y no disponer de la energía suficiente para salir de la tierra. En apenas 10 días y bajo lámparas de 400 w fueron trasplantadas a macetas de 11 y 18 litros para el resto del desarrollo vegetativo. En estos contenedores el crecimiento se dispara y las plantas empiezan a mostrar su potencial. Son plantas robustas y muy frondosas de color verde intenso.
Los tallos y ramas son bastante gruesos y la distancia internodal es más bien corta. En los primeros riegos añadimos enraizador y progresivamente vamos introduciendo algo de abono. No debemos despistarnos con los riegos y el abonado, ya que consumen mucha agua y una cantidad de nutrientes considerable.
En poco más de un mes y debido a su ya considerable tamaño, decidimos cambiarles el fotoperiodo e introducirlas al cuarto de floración a 12 horas y bajo lámparas de sodio de 600 w para que no les falte de nada.
Etapa de floración
Las Deep Cheese entran en floración exuberantes con las hojas inclinadas hacia las bombillas para recoger toda la energía y transformarla en hermosos cogollos. Durante la primera semana, le hacemos un pequeño lavado de raíces y le añadimos por primera vez abono de floración que iremos alternando con un bioestimulador y riegos solo con agua hasta que queden aproximadamente dos semanas para la cosecha.
A diferencia de otras variedades que van amarilleando a medida que avanza la floración, la Deep Cheese se mantiene en un color verde intenso. Tampoco pega un gran estirón al entrar en floración y se mantienen dentro de un tamaño medio.
Los pistilos aparecen en pocos días y se van formando por toda la planta. La distancia entre los cogollos es mínima y en las puntas se unen colas cada día más largas y densas. Observamos dos fenotipos bien diferenciados entre los cinco ejemplares. Los cogollos inferiores son también grandes y muy pesados.
Son muy pegajosos y desprenden su característico perfume ya desde bien iniciada la fase floral lo que hace muy necesario un buen filtro antiolor. La concentración de cristales es muy elevada. A los cuarenta días les realizamos un buen lavado de raíces y a partir de ahí solo añadimos agua al riego.
En 55 días todas están maduras para ser cosechadas. Cortamos dos y esperamos a los 60 días para cortar el resto. Todas quedaron sublimes.
Cosecha
La cosecha es espectacular. A cada corte de tijera se percibe en el ambiente un olor exquisito. Los cogollos pesan. Hasta el más pequeño de los cogollos está duro y huele que “apesta”. Cosechamos casi cincuenta gramos por planta de espectaculares flores. Hay que destacar su enorme y pesado cogollo central. Tiene una baja cantidad de hojas por cogollo lo que la hace muy sencilla y rápida de manicurar.
La cata
Cualquiera que haya probado esta variedad no olvida su aroma. Es fuerte solo acercándola a la nariz. Te inunda desde los labios a los pulmones con un sabor muy intenso que recuerda al queso.
Es de las que llenan. Merece la pena guardarla en una buena caja y degustarla tras un buen proceso de curado. Produce un colocón muy relajante, agradable y risueño. Ideal para ver una película o estar con amigos.
TricomaTeam (tricomateam@gmail.com)