Tipos de vaporizador: convección, conducción y Volcano
Diferencias entre vaporizadores por conducción y por convección. Y cómo usar el Volcano.
Casi todos los vaporizadores garantizan una fumada saludable. Quitando la combustión del medio los cannabinoides son transportados en una nube del propio vapor del cannabis. Hay vaporizadores por conducción y por convección. Y también el gran Volcano que mostramos cómo usar.
Vaporizadores de marihuana por conducción
El proceso de vaporización se realiza por contacto, es decir, la materia vegetal reposa sobre un material que aumenta de temperatura. A veces sucede la combustión y se quema el material, o alcanza temperaturas superiores a las deseadas, de forma que al extraer el cannabis se nota totalmente tostado o incluso quemado. Los vaporizadores de conducción son más baratos. Pero tienen mal desempeño. O por lo menos no todo el que pueden dar. Habitualmente los cartuchos desechables y la mayoría de los recargables funcionan con esta tecnología.
Vaporizadores cannábicos de convección
En los vaporizadores de convección la vaporización se produce cuando un chorro de aire atraviesa la materia vegetal, de esta forma los cannabinoides si se vaporizan, pero sin la combustión que genera sustancias perjudiciales. La bibliografía científica considera a la vaporización por convección es superior a la vaporización por conducción.
¿Cómo usar un vaporizador Volcano?
El Volcano es uno de los vaporizadores más utilizados y con mejores resultados. En primer lugar debes picar finamente el cannabis, de forma que el chorro de aire caliente penetre mejor en todo el material.
El botón rojo enciende el calefactor. Fija la temperatura deseada. Mientras
se alcanza, queda encendida la luz naranja. Cuando la luz naranja se apaga, enciende el botón verde, empezará a salir el chorro de vapor cannábico.
Cuando resulta visible el vapor, se coloca la bolsa en el Volcano. Vigila el proceso
de inflado de la bolsa para que no se caiga. En el momento en que la bolsa está repleta, apaga el botón verde para detener el chorro de vapor y cambia la válvula de llenado por una boquilla, esta boquilla es hermética, de forma que el vapor no escape.
Para inhalar el vapor solo hay que apretar ligeramente la boquilla con los labios, al tiempo que aspiras.
D
Demian Jara
