2015, el año del cannabis

365 días para conseguir que la marihuana deje de ser una droga

Ya hemos entrado en un nuevo año. Ya hace 15 años que dejamos atrás el siglo pasado, que estrenamos un nuevo milenio. Pero por desgracia, en vez de ir a mejor, sólo hacemos que dar pasos hacia detrás. En otros países ya han despenalizado el cannabis. Ahora es el turno de que los españoles también consigamos que esta planta deje de estar perseguida. 

Como siempre, España es la última en todo. Mientras América ya ha comenzado a legalizar la marihuana, a nosotros nos sorprenden con la ley mordaza. Mientras en países de Europa están experimentando con cannabinoides para crear medicamentos, aquí se empeñan en decir que es mortal para el ser humano. 

Es la hipocresía en estado puro. Permiten beber alcohol y fumar tabaco, que matan a miles de personas al año. Pero no quieren que consumamos cannabis, que nunca ha llevado a la tumba a nadie. Pero es más, también nos recetan medicamentos que más que curarnos, nos enferman más. Antidepresivos que nos enganchan, relajantes adictivos y pastillas que nos destrozan por dentro.

2014 fue el año del cannabis en muchas partes del mundo. Los estadounidenses ya han permitido que sus ciudadanos puedan elegir libremente si quieren consumir esta planta. Uruguay, pionero en este tema, ha sido un ejemplo a seguir para muchos otros estados. Y ahora que entramos en un año nuevo, en el 2015, es hora de que España se una a este movimiento.

¿Pero cómo? pues manifestándose. Desobedeciendo y haciendo lo que queremos hacer, CULTIVAR Y CONSUMIR. Si nos quedamos en nuestras casas jamás nos harán caso. En otras ciudades se reunen cientos de miles de personas en las marchas mundiales de la marihuana. Aquí sólo somos unos pocos. Hay que despertarse, luchar y conseguir lo que queremos; la legalización de una sustancia que lleva más tiempo que nosotros en la tierra. 

Este año nosotros celebramos nuestro 30 aniversario y qué mejor regalo que lograr que el pueblo español se movilice para conseguir que se despenalice la marihuana. Hemos visto a muchos amigos en la cárcel por cultivar, a gente condenada injustamente por tener unas pocas plantas en su casa. Mientras tanto, las grandes mafias siguen creciendo a costa de los que quieren consumir pero no se atreven a plantar. 

Por eso, por todos ellos, y por nosotros mismos, conseguiremos que el 2015 sea el año del cambio. El año que dará libertad a nuestra santa planta. Encerrada desde hace décadas por hipócritas a los que les conviene más que sea ilegal, para que ciertas empresas se sigan lucrando a costa de vender otras sustancias más nocivas y menos efectivas. Que no te sigan engañando. ¡Únete a nosotros!

J. Vega