Potencia y producción

Skunk 47

Excelente mezcla de genéticas cuyo resultado es este magnífico híbrido de tamaño medio, con abundante producción de enormes y densos cogollos recubiertos de resina, que desprenden un embriagador aroma afrutado. Es una variedad muy rápida y de fácil cultivo que se adapta perfectamente a todo tipo de sistemas. Este híbrido es el resultado de mezclar dos de las mejores genéticas del banco de semillas Advanced Seeds. Fruto del cruce de su Critical y su Kaya 47, nos ofrecen esta semilla de espectaculares propiedades. La Critical le aporta el vigor y la producción a la que nos tiene habituados. La aportación de la AK se percibe claramente en su intenso y característico sabor. No son plantas de gran tamaño, pero sí muy compactas y con un fuerte y grueso ramaje. Son muy sencillas de cultivar, y con unos pocos cuidados, hasta el cultivador más inexperto podría obtener una generosa cosecha de sabrosos cogollos. Es una variedad que madura en tiempo record, y está lista en interior en tan solo unas 8 semanas desde el inicio de la floración. Si optamos por cultivarla en exterior, la podremos tener recogida entre finales de septiembre y principios de octubre. En interior podemos conseguir plantas que rondan el metro de altura. Mientras en exterior pueden llegar hasta los 3 metros de altura. Los cogollos están cargados de resina, cuya concentración de THC es muy elevada, llegando a niveles del 20%. El sabor es muy intenso y llena con cada calada. Sabe especialmente afrutado, y en él se perciben también toques a hachís. El efecto que suscita es muy potente e intenso desde el principio, tanto a nivel mental como físico, dando una fugaz sensación de alegría y tranquilidad al principio que pronto se va tornando en un estado de sedación total. Es una planta fantástica para fumar al final del día o para los amantes de las variedades que nublan la cabeza y te encadenan al sofá.

Crecimiento

Germinamos un paquete de semillas feminizadas de Skunk 47. Las metimos entre trapos húmedos a oscuras entre dos platos, las situamos en un cuarto que tuviese una temperatura adecuada, para que germinasen lo más rápido y en las mejores condiciones posibles. En menos de 48 horas, las semillas abrieron y la radícula se había alargado lo suficiente. Preparamos unas macetas pequeñas de algo menos de un litro de capacidad, donde las enterramos con la raíz hacia abajo y las tapamos con la tierra justa para cubrirlas, sin hacer una presión excesiva. Debajo del calor seco de las lámparas de sodio, las primeras hojas se abren paso hacia la luz en menos de un día. Durante los primeros días y tras cada trasplante, añadimos siempre enraizador al agua de riego, para posteriormente ir añadiendo paulatinamente un abono específico para la fase vegetativa. Tras unos diez o doce días en contenedores de poco tamaño observamos un buen cepellón de raíces en todas las semillas. Las trasplantamos a macetas de mayor tamaño, donde permanecerían otras casi cuatro semanas. En poco tiempo, se puede ver perfectamente el vigor de esta variedad. Son plantas muy compactas, con una estructura fuerte, hojas grandes y ramas gruesas. El tallo central destaca también por su grosor. Las plantas apenas exigen cuidados y no presentan ningún problema de plagas. En poco más de un mes desde que fueron germinadas, tienen un tamaño y una presencia fantástica. Les hacemos unos esquejes a cada planta de las ramas inferiores, a las que casi no les llega la luz, y pasamos todas las semillas al cuarto de floración. Los esquejes de Skunk 47 enraizaron rápidamente y retomaron el crecimiento con facilidad.

Floración

A doce horas y bajo lámparas de 600w las Skunk 47 muestran todo su potencial. Apenas crecen al reducirles las horas de luz, pero el tallo y las ramas se ensanchan más aún, sabedores del peso de los enormes cogollos que tendrán que soportar. Pronto son visibles los primeros pistilos, y partir de ahí la formación de flores por toda la planta es incesante. Durante esta etapa, hacemos un pequeño lavado de raíces la primera semana. A partir de ahí añadimos al riego un estimulador de floración y un abono específico para floración, en dosis bajas, que iremos aumentando poco a poco y siempre alternando con algún riego en el que solo les damos agua. Dos semanas antes de cosechar, dejamos de añadir productos al agua y realizamos un concienzudo lavado de raíces, para evitar que nada altere la calidad de los hermosos cogollos que se desarrollan en nuestras plantas. Las ramas a duras penas resisten el peso de las enormes y pesadas flores. Se forman por todo lo alto y ancho de su frondoso follaje. Entre los espectaculares cogollos que se forman en las puntas de las ramas, destaca por encima de todo el gigantesco cogollo central, aún más grueso y denso que los demás. Cortamos todos los ejemplares a las 8 semanas de cambiarles el fotoperiodo. La manicura de cada planta no nos llevó demasiado tiempo. Los cogollos eran realmente grandes y muy compactos y estaban cubiertos por una gran capa de brillante y pegajosa resina.

Sabor y efecto

Además de las enormes cosechas con las que nos obsequia esta variedad, su olor y gusto, unidos a la potente sensación que produce, son los rasgos que la convierten en un ejemplar de los más completos. Su aroma es característico de la AK 47, con un sabor marcadamente afrutado. El efecto es devastador. Engaña con las primeras caladas sacándonos una sonrisa y algo de alegría, pero pronto se convierte en una pesada carga cerebral y física. TricomaTeam (tricomateam@gmail.com)