La Luz

Una de las grandes culpables en hacer que fracase o triunfe nuestro cultivo es la luz. Su temperatura, color y potencia serán en parte responsables del resultado final, esto es muy comparable en fotografía, el poder controlar estos valores determinarán la calidad y belleza de nuestras imágenes. Recordar que sin luz no hay foto.

Para empezar, podríamos definir la luz como una energía electromagnética irradiada por un cuerpo luminoso, tomando el sol como mayor ejemplo diríamos que la radiación electromagnética que desprende esta compuesta por millones de ondas de distintas frecuencias y que la distancia entre ambas se mide en nanometros, o lo que es igual en millonésimas de milímetro. De todos estos millones de frecuencias, el ojo humano solo percibe las que rondan entre 400 y 780 nanometros de distancia. A esto se le llama “ espectro visible” y aquí se encuentran todos los colores que vemos.
Una vez explicada su procedencia se podría clasificar en dos tipos generales:

• Luz Natural: La emitida por el sol y en la que siempre habrá que tener en cuenta la dirección, color e intensidad de la luz.
• Luz artificial: Todo artefacto o objeto que genere luz siendo manipulable como un flash, foco etc.
   

Temperatura y color

Algo muy a tener en cuenta a la hora de realizar un fotografía es la temperatura de luz, la luz se mide en grados Kelvin y en función de su valor, será su color. Por ejemplo la luz de una vela anaranjada oscila entre los 1200ºK y la luz fría de un fluorescente entre los 5000ºK, con esto quiero decir que a mayor temperatura menor calidez, en consecuencia las luces serán mas azules y viceversa, a menor temperatura mayor calidez, las luces se vuelven mas rojas como sucede en un atardecer. Evidentemente los equipos de alta presión de sodio HPS del mercado utilizan una combinación de xenón, mercurio y sodio para conseguir un color perfecto, tanto en la etapa de floración del cultivo, como en la de crecimiento, trabajando a unos 3500ºK.

Dicho esto lo primero que hay que hacer para adaptarnos a la luz ambiente y sacar los colores correctos, seria seleccionar en el menú de vuestra cámara “Balance de blancos” siempre en manejo manual y a continuación pulsar la opción que se ajuste mas a la luz de la escena a fotografiar. Otra forma mas rápida seria seleccionar AWB ( balance de blancos automático ) o disparar en formato RAW y modificar el color posteriormente en programas de edición.

Intensidad y calidad

Como ya sabéis la intensidad de la luz es básicamente cuanta luz recibe el supuesto cogollo a iluminar, es decir la luminosidad que recibe, no el color o tonalidad como hemos visto anteriormente. Como ejemplo imaginaros una sala de cultivo de 4 lamparas de sodio con bombillas de floración y en comparativa otra de 50, las dos tienen el mismo color anaranjado, pero lo que aumenta en la de 50 focos es la luminosidad o dicho en su medida correcta los “Lux”. Dentro de las luces existen varios tipos en función de la cantidad recibida y que nombramos a continuación:

• Luz cálida - siempre cuando predominan los colores anaranjados, como en nuestros cultivos o en un bonito atardecer.
• Luz fría - predominan los tonos azulados, un buen ejemplo serian los fluorescentes del periodo de crecimiento.
• Luz suave - cuando las sombras son muy flojas o ligeramente grisáceas.
• Luz dura - generan sombras muy contrastadas y tiende a sobreexponer la zona iluminada.

Tipos de Luz

Aprender a manejar la luz es primordial a la hora de dar volumen, textura, dramatismo o intensidad en los colores, el saber modificar la dirección, altura, distancia y ángulo de las luces nos ayudará a expresar mucho mejor lo que queremos en nuestras fotografías. Las posibilidades son infinitas a la hora de manejar todos estos parámetros y combinaciones, pero a continuación citaremos las mas básicas y comunes para que podáis empezar a practicar con vuestras preciosas genéticas.
 

• Luz Frontal: Como su propio nombre indica está orientada de frente al cogollo en cuestión, produce aplanamiento de la imagen pero ayuda a resaltar los colores con brillantez.
• Luz lateral: Por lo contrario de la frontal resalta el volumen y perspectiva aumenta el contraste de la foto.
• Contraluz: Incide por detrás del sujeto provocando siluetas muy pronunciadas y contrastadas, total perdida de detalle y colores.
• Luz reflejada: Siempre incide en el objeto rebotando en una superficie luminosa, con la consecuencia de una perdida de fuerza ideal para rellenos suaves.
• Luz ambiente: La que se percibe en un ambiente iluminado que no procede de una fuente directa.
• Luz cenital: Muy adecuada para generar sombras duras y verticales, siempre encima del sujeto.