Kafkiana intervención judicial en Pot Sistemak

28 Sep 2020

El pasado 16 de septiembre la noticia corría por Whatsapp y Twitter como la pólvora, una abundante dotación policial había intervenido en Pot Sistemak, la empresa madre de dos importantes marcas de nuestro sector, el banco de semillas Dinafem y la distribuidora La Mota. Fueron momentos de incertidumbre, pues nadie sabía de qué se les acusaba, ya que se trata de una empresa con trayectoria intachable. Dos semanas después, tenemos la buena noticia de que nuestros compañeros están libres, pero la situación informativa es muy similar, el caso está bajo secreto de sumario, ni los propios acusados conocen los cargos que se presentan contra ellos, tras décadas de pulcritud y rigurosidad en cumplir todas sus obligaciones legales. Una historia que recuerda a la novela de Kafka “El proceso”, en la que una persona es puesta a disposición de una implacable justicia, sin saber ni siquiera de lo que se le acusa.

Según el reciente comunicado que ha emitido Pot Sistemak, “Como consecuencia de esta intervención, los recursos financieros de la empresa han quedado bloqueados temporalmente por lo que nos hemos visto obligados a paralizar nuestra actividad hasta nueva orden y a tramitar un ERTE que incluye a la gran mayoría de nuestra plantilla. Un equipo compuesto por 93 empleados que se encuentran directamente afectados por el forzoso cese temporal de la actividad”.

Además de la parte de semillas, también se precinto el laboratorio de investigación científica, sobre lo que el comunicado detalla: “También nos hemos visto obligados a interrumpir los trabajos de investigación científica que estábamos realizando en convenio con la Universidad del País Vasco (UPV/EHU). Nuestro laboratorio ha sido clausurado temporalmente, y por ello nuestro equipo técnico (compuesto por una Doctora en Salud Pública, un Doctor en Química Analítica y un Master en Neurofarmacología), no puede continuar con su labor de investigación”.

En Soft Secrets llevamos visitando a Pot Sistemak con regularidad desde hace más de diez años y ponemos la mano en el fuego por ellos. Nunca hemos visto dinero negro, ni venta de marihuana, ni implicación alguna en actividades ilegales. Se trata de una empresa sería y cumplidora, que siempre ha cumplido sus obligaciones legales y tributarias, además de ser conocidos por su generosidad con el movimiento activista, al que han apoyado económicamente con generosidad. Respecto al laboratorio, recordar que en los Convenios que establecen la prohibición, se excluyen los usos científicos, a los que estaba dedicada esta instalación, con personal centrado en la investigación, dentro de un proyecto que cuenta con un convenio con la Universidad del País Vasco.

A esta seriedad también alude el comunicado que explica: “Hemos de hacer hincapié en que Pot Sistemak S.L lleva 21 años operando con total transparencia, trabajando duro para llegar a ser una de las compañías más punteras del sector consecuencia de lo cual, sólo en el último ejercicio aportó a las arcas del Estado 900.000 euros en concepto de Seguridad Social y 2,2 millones en impuestos de sociedades y rentas del trabajo”.

El apoyo desde la escena cannabica a Dinafem es unánime, así, desde el Observatorio Cannabis, OECCC, nos afirman: "Esta empresa es un ejemplo a seguir y su intervención un ataque a todo el sector del cannabis en España. Mientras los fundadores de esta industria sufren estas injusticias, las farmas se quieren repartir los frutos del trabajo ajeno, la cosecha que no sembraron". Efectivamente, desde Soft Secrets hemos explicado que alguna fitofarma como Aurora Cannabis ya contacta con el Gobierno de España para hacer una ley a su medida, aunque ni siquiera cumplen el código de autoregulación de farmaindustria, mientras empresarios como Abelló exportan a Alemania con total tranquilidad. Urge una regulación que permita la igualdad de oportunidades, a unos les dan facilidades, licencias y subvenciones y a otros les dan palos e intervenciones.

Aunque la situación es grave, la empresa Pot Sistemak está dispuesta a demostrar su inocencia. “Nuestro equipo legal está trabajando intensamente para poder retomar nuestra actividad lo antes posible, y confiamos plenamente en la claridad y legalidad del modelo empresarial que hemos desarrollado durante tantos años” aseguran, a la vez que mandan “un mensaje de tranquilidad porque creemos firmemente en nuestra inocencia y confiamos plenamente en la justicia”.

Desde Soft Secrets confiamos plenamente en el buen trabajo de esta empresa y les mandamos todo nuestro apoyo. Esperemos que la justicia sea justa y también rápida, pues hay un montón de trabajadores en ERTE por culpa de esta intervención, las cuentas de la empresa se deben desbloquear inmediatamente, antes de que se causen más daños irreparables.