Estrategia de riego para hidro
Tengo un jardín hidropónico de 12 plantas, y uso arcilla expandida y una bomba para irrigar la solución nutriente ¿Necesito dejar que el goteo de nutrientes sea ininterrumpido las 24 horas del días?
Deja que el riego por goteo funcione casi continuamente. Las raíces metabolizan y absorben agua de manera continua, ya que la planta mantiene sus procesos vitales y su desarrollo tanto en el periodo de luz como en el de oscuridad. Absorben oxígeno (O2) del agua, y liberan dióxido de carbono (CO2) en ella.
Cuando el agua gotea sobre las bolas de arcilla, éstas se cubren de una fina capa de agua, que tiene una proporción alta de superficie respecto al volumen; gran parte del agua está en contacto con aire. La alta proporción de superficie respecto al volumen facilita la transferencia de CO2 al aire, y la disolución de O2 en el agua a partir del aire. Los grandes espacios de aire que hay entre las bolas de arlita permiten que haya mucho movimiento de aire, por lo que las raíces siempre tienen acceso al O2.
Cuando el flujo de agua se interrumpe, y el agua drena, se crea un vacío que hace entrar aire fresco en el contenedor. A continuación, el flujo vuelve a discurrir y crea un efecto Venturi, expulsando el aire y, por supuesto, haciendo que entre aire nuevo.
Tuve un sistema en el que las bolas de arlita recibían un flujo de agua mediante tubos tipo espagueti sin goteros. El riego funcionaba durante 5 minutos, y paraba durante 1 minuto. Los contenedores estaban colocados en una bandeja que tenía un drenaje elevado a 5 cm, por lo que se mantenían dentro de una piscina de agua en permanente movimiento y drenaje hacia el depósito que había debajo. Esto servía a dos propósitos: por un lado, creaba una redundancia; si la bomba se detenía de forma inesperada, quedaba agua suficiente en el depósito para que las plantas no sufrieran estrés durante todo un día como mínimo. El otro fin era que las raíces crecieran fuera de los contenedores, y absorbieran el agua directamente del depósito.
Las raíces que crecían en el agua tenían un aspecto distinto a las raíces que estaban en las bolas de arlita. Eran más gruesas, y no tenían los pelos radiculares que desarrollaban las raíces dentro del contenedor. Aparentaban estar muy sanas, ya que crecían en agua oxigenada y rica en nutrientes. Estas raíces fomentaron el desarrollo de la canopia.