Este dispensario en un pueblo de Alaska ha generado un gran rechazo
Alaska ha sido uno de los últimos estados en regular el cannabis. Ahora, un dispensario de cannabis abierto en un poblado de la zona ha creado un profundo rechazo. El pueblo en cuestión se llama Talkeetna, y cientos de turistas recorren a diario sus calles, conocidas por sus históricas cabañas, sus galerías de arte y sus tiendas de souvenirs.
Es en una de sus calles principales, -donde muchos visitantes hacen fotos a Denali, la montaña más alta del continente,- donde ha abierto The High Expedition, que fue inaugurada a finales de mayo. El primer dispensario de cannabis del pueblo está causando un gran revuelo entre los habitantes del pueblo, lo que choca en un estado liberal donde la marihuana ya estaba aceptada incluso antes de su regulación.
Pero incluso en este estado, algunos pueblos han decidido no vender cannabis por miedo a que esto incitara al crimen y delincuencia. La mayoría de tiendas que hay en Talkeetna están ubicadas en la calle principal. Hay muchos turistas que llegan desde los cruceros son los principales consumidores de hostelería.
Otros empresarios han hecho fortuna gracias al constante flujo de alpinistas que paran en el pueblo como punto de partida antes de ascender la montaña Denali. Son los propios empresarios los que dicen que esta tienda podría poner en peligro el ambiente histórico del pueblo, así como dañar los negocios dedicados a la venta de alcohol.
Joe McAneney, copropietario de la polémica tienda cannábica, llevaba desde 2014 trabajando para abrir el dispensario, cuando los residentes de Alaska votaron a favor de legalizar el uso del cannabis con fines recreativos. Él y su socio compraron la cabaña que fue construida originalmente para el montañista Ray Genet, que murió en una expedición al Everest en 1979. McAneney aseguró que es en los pueblos pequeños en los que es más difícil introducir algo nuevo y ser aceptado.