COSECHA MIXTA
Combinar cultivo de exterior e interior te permitirá obtener cosechas de marihuana fuera de temporada y aprovechar las horas de sol al máximo. Además, este método te resultará perfecto para cosechar tu marihuana e irte de vacaciones tranquilo, sin estar nervioso pensando como estarán las plantas. Sigue leyendo y te contaremos como hacerlo.
Artículo escrito para la edición nº6 de Soft Secrets 2021 por Bosterix
Las plantas de marihuana cultivadas en exterior y en invernaderos con luz solar rigen su actividad según las horas de sol. La cantidad de horas de sol del día determina si las plantas fotodependientes, ya sean feminizadas o regulares, crecen o
florecen.
En un cultivo normal en el hemisferio norte y en la latitud peninsular, las plántulas y semillas se suelen plantar desde marzo o abril hasta junio o julio, y se cosechan a partir de septiembre, según la variedad.
Sabemos que las plantas necesitan menos de 13 horas de luz para florecer y una temperatura superior a 10 grados Celsius para desarrollarse correctamente. Temperaturas inferiores pueden detener el crecimiento o la floración. Modificando la cantidad de horas de luz que reciben las plantas podemos conseguir una cosecha extra en primavera, en verano, o adelantar la floración.
VENTAJAS DE COMBINAR CULTIVO DE EXTERIOR E INTERIOR
Combinar cultivo de interior y de exterior tiene múltiples ventajas:
- Te permite conseguir una cosecha extra al inicio o en la mitad de la temporada
- Es un método ideal para cultivar sativas de larga floración en exterior y recogerlas con un tamaño normal y a principios de otoño
- Puedes adelantar la floración de una variedad comercial un par de semanas para conseguir tenerla lista antes de las lluvias de fin de verano
- Con este método la floración se realiza durante los meses en que hay pocas lluvias y mucho sol. Las plantas florecen en un ambiente idóneo y a salvo del moho y la botrytis
- Si tienes un balcón pequeño te permitirá aprovechar al máximo el espacio consiguiendo hasta tres cosechas por años utilizando semillas fotodependientes
Tienes dos posibilidades:
- Crecimiento en interior y floración en exterior
- Crecimiento en exterior y floración mixta
CÓMO REALIZAR UN CULTIVO MIXTO DE CRECIMIENTO EN INTERIOR Y FLORACIÓN EN EXTERIOR
Esta técnica resulta ideal para usar a inicios de la temporada de cultivo de exterior y conseguir una cosecha en la primera semana de mayo. Debes contar con un espacio dentro de casa donde montar una lámpara de bajo consumo, que te permita hacer crecer la planta en interior, cuando las condiciones en exterior todavía no lo permiten. Si cultivas en una región con un clima con inviernos suaves se puede plantar directamente en exterior en enero o febrero y cosechar a finales de abril.
Si los inviernos son duros, con temperaturas mínimas inferiores a 10 grados Celsius que no permiten el cultivo, el crecimiento lo debes hacer en interior.
Una lámpara de bajo consumo y un ventilador en una habitación bastará para hacer crecer la planta unas semanas antes de pasarla a exterior, una vez que la planta haya madurado, es decir que haya crecido lo suficiente como para poder comenzar a florecer.
La fase vegetativa en variedades fotodependientes feminizadas o regulares suele ser de entre 6 y 8 semanas para la mayoría de las variedades comerciales. En esta fase necesitan 18 horas de luz al día. Los cultivadores de interior con un balcón soleado lo tienen fácil, y esta suele ser una técnica muy utilizada, ya que les permite conseguir una cosecha alternativa usando el armario pocas semanas.
Para esta técnica, son preferibles las variedades comerciales de entre 7 y 9 semanas de floración. Ten en cuenta que las horas de sol adecuadas para la fase de floración las tendrás hasta la primera semana de mayo, luego las plantas revegetarán, tras un periodo de estrés en donde sacarán pequeñas hojas redondeadas.
El uso de sativas tropicales de larga floración, por ejemplo de catorce semanas, nos obligará a sacarlas al exterior 14 semanas antes de la primer semana de mayo, lo que sería en febrero y no siempre el clima acompaña en esta fecha.
No buscaremos finalizar el cultivo con plantas de gran tamaño, el objetivo es conseguir varias plantas pequeñas, como si fuera un cultivo de interior, pero bajo el sol de fines de invierno e inicios de la primavera.
La principal ventaja de esta técnica es que no encontrarás plagas, ya que las temperaturas todavía no permiten el desarrollo de las plagas que se da cuando hace más calor. Es una técnica cada vez más habitual en estos tiempos de cambio climático, con la que se obtienen muy buenos resultados, ya que no hay excesivo calor que pueda afectar a los terpenos, durante estas fechas las temperaturas máximas no suelen superar los 25 grados, por lo que se obtiene cogollos llenos de aroma y sabor.
La clave de esta técnica es montar un espacio para crecer las plantas en interior. A partir de que saques la plantas al exterior ya es un cultivo normal de exterior sin complicaciones ni tareas adicionales, solo esperar a que terminen la floración y realizar los riegos y abonados correspondientes.
ADELANTAR LA COSECHA: CRECIMIENTO EN EXTERIOR Y FLORACIÓN MIXTA
Si en la técnica anterior aprovechabas los meses de primavera con un fotoperiodo adecuado para la floración, con esta técnica podrás realizar la floración durante los meses en que las horas de sol son adecuadas para el crecimiento.
Para esta técnica necesitarás una caseta de jardín o una habitación a oscuras. Es un procedimiento sencillo que consiste en ocultar las plantas para que tengan las horas de oscuridad necesarias para desarrollar la floración.
Los cultivadores de exterior urbano no tenemos vacaciones en verano. Cuando tenemos la posibilidad de salir unos días fuera de la ciudad nos encontramos con que no podemos desatender el cultivo. Si además vives en una región como la mediterránea donde la calidad del agua del grifo es malísima para las plantas y necesitas de un sistema de osmosis inversa, olvídate del riego automático. Para colmo, durante el verano al comienzo de la floración, es el momento más importante para aportar aditivos y estimulantes de floración, para que la misma se inicie con vigor y en todas las ramas. La solución de dejar las plantas con alguien que las cuida no suele resultar bien. Para la persona encargada es una tarea pesada estar regando todos los días bajo el sol, generalmente lo hacen mal y cuando llegamos tenemos las plantas en un estado lamentable. Existen soluciones, pero son válidas solo para unos días. Adelantar la cosecha te servirá para estar libre antes de agosto y disfrutar de las playas, o para cosechar a principios de septiembre, y poder viajar en octubre a recorrer ciudades y museos, mientras se cura la hierba en casa.
Es también una técnica ideal para cultivar sativas de larga floración en exterior que se estiran, se hacen muy altas y terminan la floración en noviembre. Con este método las tendrás listas a finales de septiembre o inicios de octubre, con un tamaño adecuado para tu terraza o balcón.
Por ejemplo, planta en abril, déjalas crecer entre 6 y 8 semanas y cuando ya estén maduras, comienza a ocultarlas. Necesitarás saber la duración de los días, para ello puedes visitar la página web del servicio de meteorología de tu región o poner en el buscador salida y puesta del sol seguido del nombre de tu ciudad o provincia. Suponte que el sol sale a las 6 de la mañana y se pone a las 21, deberías ocultarlas entre las 18 y las 21 horas para que tengan un ciclo de 12 horas de oscuridad y 12 de luz. Puedes estirar hasta 13 horas de luz y 11 de oscuridad sin problemas.
Es importante ocultarlas solamente las horas que hace falta para que se complete el fotoperiodo. Una caseta de jardín cerrada o una habitación sin ventilación no es el lugar más adecuado para las plantas, pero resistirán unas horas hasta que las puedas sacar al exterior de noche. Además, conviene ocultarlas siempre a la misma hora, por ejemplo de 19 a 21 horas para evitar que se estresen y conseguir el “efecto noche”. No es recomendable comenzar un cultivo en exterior y pasarlo a interior, ya que le causarías demasiado estrés y llevarías plagas al armario de cultivo. Lo recomendable es aprovechar el espacio de una caseta de jardín o una habitación a oscuras durante unas pocas horas.
Si dispones de un ventilador que mueva el aire será de una gran ayuda. El inconveniente de esta técnica es que tienes que estar todos los días a la misma hora ocultando a las plantas. Ten en cuenta que la mayoría de las variedades comerciales inician la floración alrededor de la primer semana de agosto en Cataluña y un poco antes en el sur de la península. Esto te resultará útil también para cultivar sativas de larga floración. Por ejemplo, una variedad de sativa tropical que se demora unas 15 semanas en florecer y que se recoge en noviembre la puedes cosechar a finales de septiembre si la comienzas a ocultar desde fines de junio. También lo puedes usar para adelantar la cosecha de una variedad comercial de 8 o 9 semanas de floración. Una variedad de nueve semanas la puedes cosechar a principios de septiembre si la comienzas a ocultar desde julio. En este caso la deberás ocultar hasta comienzos de agosto y las ultimas semanas florecerán en exterior sin necesidad de que las ocultes, porque ya tendrán las suficientes horas de oscuridad para seguir floreciendo.
Como ves, no es un método complicado solo requiere paciencia y constancia durante unas semanas. La clave es contar con unas semanas en las que deberás estar atento a entrar y sacar las plantas.
CÓMO ELEGIR LAS VARIEDADES PARA UNA COSECHA MIXTA
Seleccionar las variedades para una cosecha mixta es bastante sencillo, lo debes hacer en base a las semanas de floración de cada variedad. Dentro de cada grupo encontrarás plantas con diferentes efectos y sabores para elegir las que más te agraden.
Para la cosecha de primavera deberás buscar variedades de marihuana de entre 7 y 9 semanas de floración, estas son las semanas con las que se cosechan la mayoría de las variedades comerciales que producen los bancos de semillas. Estas variedades las puedes crecer en interior y sacarlas al exterior entre mediados y finales de marzo, para cosecharlas durante la primer semana de mayo.
Si quieres cultivar variedades de floración más larga, de por ejemplo 10-11 semanas de floración, deberás sacarlas antes si las temperaturas mínimas son superiores a 10 grados Celsius u ocultarlas una hora a partir de la primera semana de mayo. Las sativas puras que necesitan más de 12 semanas para completar la floración es preferible cultivarlas adelantando la floración de forma artificial, ocultándolas un par de horas al día desde junio o julio, hasta las primeras semanas de agosto, donde podrán terminar la floración en exterior.
Ahora que sabes cómo, comienza a preparar un espacio para crecer o florecer tus plantas el año que viene y prepara tu cosecha de primavera, la de verano y la cosecha habitual de otoño. Con un poco de esfuerzo y dedicación conseguirás cosechas extras o podrás cultivar esas sativas de larga floración que siempre quisiste, pero no podías cultivar, “todo es cuestión de ponerse”.
Artículo escrito para la edición nº6 de Soft Secrets 2021 por Bosterix