40.000 personas asisten a la Marcha Mundial de la Marihuana 2019

La 26ª edición de la Marcha Mundial de la Marihuana 2019 batió récords de asistencia, con 40.000 personas marchando por las principales calles de Madrid pidiendo la despenalización del cannabis. A pesar de los inconvenientes, el evento fue todo un éxito, con un autobús cruzado en Gran Vía donde actuaron artistas emblemáticos de la escena urbana nacional, como Fyahbwoy, Little Pepe, Chulito Camacho o Supernafamacho, entre otros. El 11 de mayo de 2019 será recordado como la fecha en la que la España Cannábica dijo basta. Basta a los abusos policiales, al encarcelamiento de cultivadores, a la estigmatización de los consumidores y a la criminalización de la planta. Más de 40.000 personas se reunieron en la Puerta del Sol para dar comienzo a la 26ª edición de la Marcha Mundial de la Marihuana, un evento que se celebra a lo largo y ancho del Globo, y que en España se lleva celebrando desde hace más de 20 años. Horas antes, en la histórtica asociación AMEC, decenas de socios y voluntarios se reunieron para hinchar los ya clásicos globos verdes que horas más tarde vestirían la Gran Vía de nuestros colores. Cabe destacar la gran labor de los voluntarios de los diferentes entes organizadores, desde la AMEC, pasando por la ConFAC, la Encod, el REMA y el OECCC. A las 18 horas, Sol ya olía profundamente a marihuana, los manifestantes comenzaban a agolparse en sus calles mientras con los altavoces comenzaban a gritar las primeras proclamas. Media hora después, una marabunta de gente se dirigía hacia Gran Vía gritando, cantando y fumando. La Marcha había comenzado. [caption id="attachment_12607" align="aligncenter" width="800"] La Marcha Mundial Marihuana de Madrid recorrió las principales calles de la capital.[/caption] Mientras, el ya clásico autobús vinilado se dirigía hacia Madrid Central, para encontrarse en Gran Vía con los manifestantes, y acompañarles durante toda la Marcha con tres paradas para realizar las actuaciones de los artistas y dar los discursos de los organizadores.

Problemas con la justicia

Unos errores en la solicitud de los permisos hizo que la policía retuviera el autobús, no dejando que circulara por el centro de la ciudad al no contar con la autorización necesaria. Por suerte, el OECCC tiró de contactos y consiguió que la policía aportara, paradójicamente, su granito de arena a este evento pro regulación, dejando que el bus aparcara en medio de Gran Vía y ejerciera de escenario. Los planes cambiaron ligéramente, pues el bus no podía acompañar a los manifestantes, y las actuaciones se hicieron todas seguidas. Quien sabe si fue el destino, o la propia planta, la que hizo que así se desarrollaran los acontecimientos, pero lo cierto es que lo que al principio fue una grave complicación acabó convirtiéndose en una gran oportunidad. ¿Quién podría decir que consiguió paralizar Gran Vía un sábado, cruzando un bus lleno de hojas de marihuana en la carretera, ante 40.000 personas fumando, cantando y bailando? Los artistas, por supuesto, fueron los grandes protagonistas del evento, junto a los activistas que gritaron sus proclamas ante un público muy entregado y agradecido. Por desgracia, las autoridades no nos dejaron continuar hasta la hora prevista y algunos artistas como Fyahbwoy, Kenna I y Fastah Selectah no pudieran concluir sus actuaciones. Al menos, logramos nuestro objetivo: ser escuchados. Medios de comunicación como La Sexta o RTVE cubrieron el evento en directo, entrevistando a artistas, activistas y público. Y ese sábado, la Gran Vía olió a María. Nos vemos el año que viene, en la Marcha Mundial de la Marihuana 2020.