¿Che Guevara fumaba marihuana? Revolución cubana y cultivo de cannabis

¿El Che Guevara conoció la marihuana?

Ernesto Guevara de la Serna, mundialmente conocido como “Che” Guevara fue un guerrillero mítico que sí conoció la marihuana. El mochilero con aires revolucionarios que en los años 50 del siglo pasado salió de Argentina para conocer la trunca revolución guatemalteca de Jacobo Arbenz se exilió en México donde conoció a un verdadero revolucionario que lo cautivó: Fidel Castro.

Meses después de conocer al líder cubano, Guevara se enroló con los rebeldes, cruzó a Cuba y luego de un año de combate consiguió tomar el poder.

El Che Guevara entre plantíos de marihuana

Sus principales campamentos militares por entonces estaban en Sierra Maestra de Cuba. Allí el Che y su ejército aprovecharon los caminos que los cultivadores de marihuana habían abierto en el medio de la selva para eludir al ejército del dictador Fulgencio Batista.

Incluso las armas llegaban a través de estos caminos. Además, entre los primeros revolucionarios había varios cultivadores de marihuana, señala el libro de “Che Guevara: una vida revolucionaria”, su autor, el célebre cronista Jon Lee Anderson que trabajó cinco años en la extensísima biografía.

¿El Che Guevara fumaba marihuana?

En el libro señala que para mitigar su asma crónico, el rebelde argentino/cubano fumaba “cigarrillos para el asma del Dr. Andreu”. Estos cigarrillos tuvieron cannabis entre sus ingredientes. Pero con el avance del prohibicionismo las flores del cannabis fueron retiradas de la fórmula. Y eso según reportes españoles ocurrió en 1914, cuando se firmó el primer acuerdo anti drogas con aspiraciones globales. En 1925 el tratado de Ginebra que se firmó en las Sociedad de Naciones (el antecesor de Naciones Unidas) fue específicamente contra el cannabis.

En internet se pueden encontrar algunas publicaciones con tinte propagandísticos donde señalan que Guevara fumaba marihuana, pero son más bien acusaciones infundadas que buscan dañar la imagen de uno de los personajes más icónicos del siglo XX.

Lo que sí parece es que el Che haya conocido las bondades de la belladona y estramonio, dos daturas de potente efecto psicotrópico que en la década de los cuarenta tenían por ingrediente los famosos cigarrillos del Dr. Andreu.

“Durante los cinco años que estudió en el Colegio Nacional Deán Funes, Ernesto cultivó la imagen del bribón irrefrenable. Le encantaba escandalizar a sus condiscípulos y profesores: por ejemplo, encendía sin aviso sus fuertes cigarrillos para el asma Dr. Andreu en medio de la clase”, señala John Lee.

Desde que asumió el gobierno, Guevara fue un furibundo opositor al uso y comercialización de drogas. De hecho, Cuba era hasta entonces era un país donde los gringos consumían drogas casi que libremente. En Cuba operaba uno de los cárteles más potentes del mundo el de “Lucky” Luciano. Los rebeldes cortaron de cuajo esta economía clandestina.

Lo que es seguro es que el Che abrió paso a la revolución donde los cultivadores de Cuba marcaron la senda. Pero haga como el Che, que no lo vean las autoridades por que la tenencia de marihuana en la isla se castiga con hasta dos años de prisión o fuerte multa económica. Hasta la victoria, siembre. Pero con cuidado clandestino, guajiro.