¿Por qué el cannabis tiene distintos colores?

Soft Secrets
20 Jul 2012

El cannabis tiene muchos colores. Desde hace mucho tiempo los cultivadores de todo el planeta quedamos maravillados con los diferentes rasgos que muestra nuestra querida planta. En esta ocasión vamos a tratar uno de los mas llamativos y tal vez menos abordados: el color.


Por Alfred

Para comenzar me gustaría desmantelar un mito que hoy en día sigue circulando en todas direcciones. Que una planta de cannabis sana, muestre tonalidades diferentes al verde, no implica necesariamente que esta tenga menos potencia que sus hermanas sin dicho rasgo. Si alguna vez escuchas la frase “si buscas algo suave elige cualquier variedad púrpura”, es un gran error. Si la aparición de pigmentación fuese por motivos de salud de la hierba (carencias, excesos, etc.), naturalmente saldría con menos calidad. Pero la cosa es totalmente distinta cuando esta expresión viene dada por una predisposición genética.

Podemos encontrar todo tipo de efectos en variedades coloridas; las habrá más suaves y más fuertes, más aromáticas y menos aromáticas, pero no es una norma general considerar las hierbas con pigmentación diferente al verde menos potentes. Esto lo sabe cualquier cultivador que haya fumado una buena Blueberry, como la original de Dutch Passion.

Todos los cultivadores ya sean profesionales o no, se han de encontrar con variedades que muestren ciertos tipos de pigmentación y que pueden variar en tonalidades púrpura, magenta, azul, rosa o rojos. Esto ha llevado a la comunidad cannábica a un buen debate sobre los factores que producen estas variaciones.

Ejemplos y tipologías

En un principio tenemos que dejar claro que las plantas de cannabis pueden mostrar coloración diferente al verde común en gran parte de las mismas. En algunas, la coloración solo se aprecia en las hojas, como en la Black Jack del banco Sweet Seeds.

Otras, sin embargo, pueden mostrar los tonos solo en los cálices de las flores, por ejemplo la variedad Smooth Smoke, híbrido ofrecido por Tropical Seeds, que muestra una intensidad preciosa en los cálices, herencia de su parental Pakistan Chitral. Normal que con unas flores tan coloridas al breeder de este banco se le pueda considerar un “Purplefingers “

También hay ejemplares en que sus tonalidades salen en los mismos estigmas, como podemos ver en la foto de un ejemplar de Pink Kush de Dr. Underground, conservadas a partir del antiguo stock de Reeferman.

Esta misma combinación de colores en los pistilos es común en ciertas variedades de carácter sativo puro como por ejemplo las Panameñas, genética que podemos encontrar gracias a Cannabiogen y Ace Seeds. Muy visto también en otras Sativas puras como la Angola Roja o la Punto Rojo colombiana.

Tampoco es extraño encontrar coloración en los mismos tricomas, en este caso lo ilustramos con un hachís espectacular por sus matices morados, extraído a partir de una Pakistan Chitral de Tropical Seeds.

El caso de la Ripped Bubba, una nueva variedad de TGA Subcool, presentada este año y creada a partir de hibridar el famoso clon Bubba Kush pre 98´con su conocido Jack The Ripper, merece mención especial gracias a sus coloridos contrastes entre el anaranjado de sus tricomas y el morado de las hojas.

Se puede decir que el color es un aspecto muy amplio del cannabis, el cual tiene muchas variaciones, pudiendo presentarse en todo tipo de genéticas, desde índicas puras tipo Deep Chunk del criador Tom Hill, o híbridos de alta expresión índica como la cotizada Mr.Bubba de Greendevil Genetics.

En Sativas puras tenemos más ejemplos como la Old Timer Haze del banco ACE Seeds. También en variedades híbridas como la Frizian Dew del banco Dutch Passion, así como en variedades autoflorecientes, muy bien representada por una hermosa Cream Caramel automática procedente del banco Sweet Seeds.

Causas

Los motivos de estas variaciones pueden ser de carácter muy diverso. Podemos encontrar plantas que muestran coloración por padecer algún tipo de enfermedad, carencia o exceso. Por ejemplo, una deficiencia de nitrógeno produce plantas amarillas, debido al freno en la producción de clorofila, mientras que una deficiencia de potasio nos puede dar plantas de hojas pequeñas con tonos verdes oscuros y venas de color morado.

Otro factor importante que puede producir la aparición de pigmentaciones son las variaciones en los niveles de pH. En medios ácidos obtendremos con facilidad tonalidades rojas, mientras que en medios alcalinos normalmente se potencian los azules y verdes oscuros. Es importante destacar que no se debe buscar el color por esta vía, pues cuando los niveles de pH no son los adecuados, prácticamente estamos quitándole a la planta la capacidad de absorber nutrientes.

El frío ha sido y seguirá siendo una condición clave para muchas variedades de color. Pues si bien en un clima cálido la planta no desarrollaría ninguna pigmentación, puede ser propensa a mostrar sus encantos a temperaturas inferiores y esto aumenta mientras más baja la temperatura. Podemos ver el ejemplo de un Scrog de Melon Gum, variedad de Dr. Underground, donde el color se ha acentuado fácilmente en cuanto la temperatura ha descendido unos grados. No cabe duda de que muchas variedades llevan el color grabado en sus genes y lo expresan independientemente de los factores antes expuestos.

Antocianinas

Las culpables de estas maravillas son las antocianinas, unos pigmentos hidrosolubles que se encuentran en toda la planta, desde las raíces hasta los frutos. Su función va desde protegerla de los rayos ultravioletas hasta atraer insectos polinizadores. Es la misma estabilidad de las antocianinas la que determina la coloración, y se puede ver afectada por el cambio de pH, oxidación, temperatura, fuerza iónica y la interacción con otras moléculas como son los radicales libres.

Cada antocianina está formada por una molécula llamada antocianidina, unida a un azúcar a través de un enlace glucosídico común (unión de monosacáridos para crear disacáridos o polisacáridos).

También debemos mencionar a los carotenoides, ya que es muy común confundirlos pues también dan color a las plantas. Sin embargo el abanico producido por estos varía tan solo entre amarillo y rojo, en comparación a la amplitud de matices que proporcionan las antocianinas. A diferencia de las antocianinas, los carotenoides no son solubles en agua y van adosados a las proteínas de los cloroplastos.

Conclusiones

¿Quién dijo que nuestra compañera tenía que ser verde?, desde este artículo me gustaría invitar a todos los cultivadores a poner un poco de color en su jardín. No se dejen llevar por los mitos sin fundamento, hay una gran cantidad de variedades muy diferentes capaces de satisfacer las necesidades de cualquier consumidor, y con la capacidad de aportar algo de color a tu vida. Si nunca has tenido algún ejemplar que muestre este tipo de rasgos, es muy necesario que vivas la experiencia, a nuestra compañera hay que conocerla en todas sus expresiones.

S
Soft Secrets