La hidroponía ecológica o «bioponía»: el concepto de «Tierra Líquida»

Soft Secrets
12 Mar 2021

Existen diversas definiciones para el término «agricultura ecológica». Todo el mundo está de acuerdo en algunos principios básicos, como la no utilización de pesticidas o herbicidas químicos, y la aplicación de procedimientos que respeten la naturaleza y requieran una menor inversión energética. 


En lo que respecta a los fertilizantes, es simple: para ser reconocidos como ecológicos, deben ser de origen natural (sin adición de sales minerales refinadas). También es necesario que los elementos minerales se introduzcan en forma de moléculas orgánicas complejas que no estén inmediatamente disponibles para la planta, sino que requieran de un proceso de degradación biológica para ser transformadas en iones. Éstos, una vez disueltos en el agua, se vuelven asimilables. En cambio, los fertilizantes minerales son directamente asimilables. Esta diferencia es esencial para los cultivos en suelo, ya que la principal crítica a los fertilizantes minerales es que las sales que no se absorben rápidamente son transportadas a la capa freática, por el agua de riego o de lluvia.

En el suelo, las bacterias y los hongos presentes en la capa de humus, dividen las moléculas orgánicas en 2 partes: el carbono, del que se alimentan, y los minerales, que pueden ser aprovechados por la planta en presencia de agua. Nos encontramos muy lejos de la hidroponía, con sus sales minerales purificadas, disueltas y directamente asimilables. El nombre propuesto para la tecnología es "Biopónica". La idea es reproducir la degradación que ocurre naturalmente en el suelo, utilizando un cierto tipo de fertilizante con una mezcla particular de bacterias y hongos para digerirlo. Estos microorganismos separan el carbono y se alimentan de él, como en el suelo, y liberan los minerales, que se disuelven inmediatamente en el agua en forma de iones asimilables.

En los cultivos a raíz desnuda (aeroponía y aerohidroponía), viven en un filtro biológico que les proporciona oxígeno y un sustrato adecuado para la reproducción. En un sustrato orgánico, como la fibra de coco, viven directamente en la zona de la raíz. La patente obtenida por Terra Aquatica abarca el uso de microorganismos y la formulación de fertilizantes necesarios para el funcionamiento del sistema. El principio va mucho más allá de un simple cambio de fertilizante. La bioponía es el resultado de varios años de investigación en torno a un concepto, el de "Tierra Líquida". De hecho, el fertilizante orgánico era sólo el eslabón perdido. Combinándolo con ciertos productos ya disponibles en el mercado, podemos recrear en una solución nutritiva todo lo que el suelo contiene y resulta útil para la planta:

  • El fertilizante proporciona la fracción de humus y las moléculas orgánicas contenidas en el suelo.
  • Los microorganismos aportan la vida microbiana y participan en el ciclo del carbono.
  • El agua está ahí, por supuesto, y el oxígeno también es abundante, si el sistema está bien diseñado.

Habrá que añadir:

  • Ácido húmico o fúlvico, disponible bajo forma líquida en muchas compañías.
  • Silicate, un producto de Terra Aquatica, que proporciona sílice y la totalidad de los metales y oligoelementos de todo tipo presentes en el suelo.

El resultado es, por tanto, una solución nutritiva exactamente equivalente a un buen suelo: ligero, aireado, rico en nutrientes y lleno de vida microbiana. No falta nada más, solo un sustrato inerte que desempeñe el papel de nuestra arcilla expandida en hidroponía. Por supuesto, es esencial utilizar un fertilizante especialmente formulado para este extraño uso: hacer agricultura ecológica sin tierra. (Precaución: los fertilizantes orgánicos formulados para el cultivo en suelo no pueden utilizarse en cultivo biopónico. Por el contrario, un fertilizante biopónico dará también excelentes resultados en cultivos en suelo). A pesar de que la hidroponía agrupa ya un conjunto de tecnologías a veces muy diferentes bajo un mismo término, la bioponía destaca entre todas las demás formas de cultivo sin suelo.

Parámetros tan primordiales como la conductividad y el pH se convierten en secundarios. La gestión de los cultivos se hace más difícil, ya que la solución nutritiva mineral se ha transformado en orgánica y se ha introducido vida en esta solución. Tampoco los rendimientos serán los mismos que en la hidroponía tradicional. La diferencia es casi la misma que entre el cultivo ecológico y el mineral en suelo: aproximadamente un 25-30% menos de rendimiento. Sin embargo, para compensar esto, se obtiene un fuerte aumento en el contenido de azúcar y de principios activos. Esta forma de cultivo tiene un aspecto muy interesante: se crea muy poca materia vegetal en relación con el rendimiento. Para el mismo rendimiento, digamos 1kg de tomates, la cantidad de hojas y tallos es mucho menor que la que se necesita para cosechar 1kg de tomates en hidroponía convencional (¡e incluso en tierra!).  Esto lo convierte en un cultivo muy económico, porque el consumo de agua y fertilizantes es mucho menor que el de cualquier otro tipo de cultivo.

 

Para tener éxito en un cultivo Biopónico, se necesitan al menos 3 elementos:

1. Un filtro en la bomba

Es muy importante, sobre todo cuando se tienen raíces desnudas directamente suspendidas en la solución nutritiva. De hecho, las partículas más grandes contenidas en el fertilizante deben filtrarse bien, ya que podrían asfixiar las raíces, especialmente con calor. Siempre es preferible tener los iones asimilables sólo en la zona de la raíz.

2. Los organismos vivos

Su presencia permite reproducir el proceso de descomposición del suelo. Sus condiciones de vida en el agua no son muy cómodas, porque no tienen la capacidad de amortiguación del suelo que los rodea, para protegerlos de los cambios repentinos de temperatura o de pH.  También necesitan "fijarse" y no pueden sobrevivir y multiplicarse en la solución.  Necesitan un lugar muy oxigenado y alejado de las corrientes creadas por el flujo de la solución nutritiva. También es necesario que se mantengan húmedos.  Si se secan, mueren. En hidroponía, se pueden utilizar diversos tipos de sustratos, los más naturales son las bolitas de arcilla expandida y la fibra de coco. Mientras que las bacterias pueden vivir cómodamente en la fibra de coco, no sucede lo mismo con la arcilla expandida. Ahí las bacterias se encontrarán demasiado secas. En este caso, se debe utilizar un BioFiltro, que es simplemente un filtro tipo para «acuario» que se colocará en el tanque. Este filtro se dispone de manera diferente a un filtro para uso en acuarios.  Contiene un prefiltro, un sustrato adecuado y una mezcla específica de microorganismos para implantar en él.

3. Un fertilizante adaptado

Como decíamos, no todos los fertilizantes orgánicos son adecuados para este tipo de cultivo.  Normalmente están formulados para degradarse lentamente en el suelo, y algunos de sus elementos se pudren en el agua y desprenden un olor muy desagradable, además de obstruir los filtros e inyectores. Un fertilizante biopónico debe ser líquido o perfectamente soluble.  No debe contener partículas demasiado grandes, y debe degradarse rápidamente. 

 

Gestión de cultivos en bioponía

La gestión del cultivo biopónico requiere mucha más atención por parte del cultivador que en el caso del cultivo hidropónico tradicional. No en términos de tiempo empleado, sino en términos de examinación visual. El cultivo biopónico puede controlarse tanto "a ojo", como por medio de parámetros como el pH y la conductividad.  No obstante, éstos siguen siendo datos importantes.

 

El pH

El pH es más difícil de estabilizar que en la hidroponía mineral, porque, entre los productos que pueden ser certificados como orgánicos, no se incluyen algunos que actúan como excelentes tampones (¡las normas de certificación son, en algunos casos, bastante arbitrarias!). El pH siempre tendrá tendencia a subir. Sin embargo, no tiene tanta importancia en la bioponía.  Se puede permitir que vaya a la deriva hasta 7,5 sin ningún problema.  Entonces el pH debe ser ajustado a alrededor de 6, pero gradualmente, en un período de unos cuantos días. Para que sea totalmente ecológico, el corrector de pH debe ser también ecológico. Hay muchas posibilidades. Un producto está en fase de estudio y saldrá muy pronto al mercado. Mientras tanto, habrá que tolerar unos pocos ml de un ácido purificado, sinceramente no alterará mucho el resultado final.  El pH- líquido de Terra Aquatica contiene tampones orgánicos. Evitar absolutamente: ácido clorhídrico y ácido acético (vinagre, etc....).

 

Los microorganismos

Tanto si están en el BioFiltro, como en el sustrato, generalmente no suponen un problema mientras su medio esté oxigenado y húmedo. Por supuesto, para protegerlos, es conveniente evitar los cambios repentinos en el sistema, ya sean de temperatura o de pH. Cuanto más numerosos y felices sean, mejor se alimentarán sus plantas. Cuidado, una caída significativa del pH es una señal de alarma, que indica con certeza la muerte de un gran número de organismos. En este caso hay que encontrar la causa, tratarla y volver a inocular los microorganismos.

 

La conductividad

Esta es la parte más compleja porque las moléculas orgánicas no tienen carga eléctrica, por lo tanto no son visibles en su medidor de conductividad.  Al diluir el fertilizante en agua, una fracción muy pequeña se transformará inmediatamente en iones, proporcionando una ligera conductividad. Con una dosis de 4 a 5 ml/l de fertilizante y una conductividad normal de agua corriente, se suele obtener un valor aproximado de 0,65 (0,6 a 0,7). Esta conductividad muy baja suele ser suficiente.  El fertilizante sólo debe ser añadido cuando la conductividad cae por debajo de este valor.  A medida que se liberan algunos elementos, otros son absorbidos.  La conductividad tiende a permanecer en equilibrio alrededor de estos valores. Cuando las reservas de materia orgánica son insuficientes, disminuye. Este es el momento de añadir fertilizante. Suena simple, pero para obtener un resultado óptimo, hay que anticiparse a esta caída de la conductividad y asegurar un suministro constante de materia orgánica.  Por otro lado, no hay que añadir demasiado porque se degrada en función del calor.  Los microorganismos actúan a velocidades increíblemente diferentes dependiendo de la temperatura. Si hay demasiada materia orgánica en el sistema, un aumento de la temperatura podría incrementar la conductividad hasta un nivel que mataría a la planta.  Encontrar el equilibrio correcto no siempre es fácil, y ahí es donde el ojo entrenado del cultivador marca la diferencia.

 

La filtración

Una simple esponja en la entrada de la bomba es suficiente. El fertilizante no obstruye el filtro, pero es necesario un buen mantenimiento.  El filtro debe enjuagarse al menos una vez a la semana. Por supuesto, hay que apagar el sistema cuando se limpie.

 

Conclusión

La bioponía y la "Tierra Líquida" son el resultado de muchos años de investigación y estudio. El objetivo era simplemente recrear, en condiciones sin suelo, un proceso normal, que ocurre naturalmente en el suelo, y que es la base de la vida. Pero, ¿cuáles son las ventajas, en este caso, de eliminar el suelo? En realidad, hay bastantes: Las ventajas de la hidroponía se mantienen :

  1. Mejor control nutricional, mejor contacto entre los nutrientes y las raíces, mejor oxigenación, mejor distribución del agua, acceso a las raíces para inspección visual, lo que permite detectar a tiempo los problemas.
  2. Para los residentes en las ciudades, los ancianos o las personas que cultivan en espacios reducidos, la eliminación del suelo es un ahorro obvio de energía, espacio y sacos de tierra para subir (¡y bajar!) las escaleras.
  3. Reducción del consumo de agua.
  4. Alto contenido en principios activos.

En muchas partes del mundo, no hay suficiente tierra cultivable para alimentar a la población. Los suelos son demasiado ácidos, demasiado pobres y las plagas como los nematodos son muy numerosas.  En algunas zonas hay una superpoblación, en relación con las posibilidades de producción, como por ejemplo en muchas islas y pequeños países turísticos.  Es en estos casos que la hidroponía proporciona una alternativa indispensable a la importación de verduras y frutas. Desafortunadamente, esta alternativa no pudo hasta hoy satisfacer a los clientes demandantes de productos ecológicos.

La idea de la hidroponía ecológica ha existido durante muchos años, pero nadie ha podido encontrar una forma de ponerla en práctica. Por su propia naturaleza, la hidroponía siempre fue cultivada con fertilizantes minerales.  Esto representó un obstáculo muy serio para el desarrollo de esta tecnología, ya que existe una creciente demanda de productos de la agricultura ecológica. La bioponía permite, así, la apertura del cultivo sin tierra a un nuevo mercado potencial en plena expansión. También permite conciliar finalmente la agricultura más tradicional con las tecnologías avanzadas, que se utilizan hoy en día en los invernaderos. Esto podría abrir camino hacia una producción hortícola más razonable, como se comienza a practicar hoy en día en la agricultura en campo. Combinando la bioponía con técnicas de manejo integrado de plagas para controlar las plagas de insectos, podemos esperar en el futuro una horticultura menos contaminante, más centrada en la calidad que en la productividad, con rendimientos que, sin embargo, son capaces de alimentar a una población cada vez mayor.

S
Soft Secrets