Construcción de invernaderos

Soft Secrets
04 Sep 2017

Los invernaderos independientes ofrecen la mayor flexibilidad en cuanto a tamaño y emplazamiento. Pueden construirse para aprovechar el sol al máximo, pero no retienen bien el calor, y puede resultar caro mantener una temperatura cálida. Existen numerosas medidas que pueden aplicarse para minimizar los costes de calefacción y refrigeración, así como el impacto medioambiental del mantenimiento. Muchos tipos de estructura y de cubierta están disponibles en kits o como materiales sueltos. Las cubiertas también pueden ser fáciles de abrir para la ventilación.


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Los invernaderos de aros son baratos, prácticos y sencillos de construir. Pueden instalarse para cubrir lechos elevados o utilizarse sobre terreno llano. Consisten en una serie de tubos paralelos de plástico PVC o de acero más resistente, los cuales se arquean sobre dos puntos de anclaje. Los arcos están conectados por la parte superior con un soporte para añadir resistencia a la estructura. Una lámina de plástico se fija sobre los arcos con cinta adhesiva o pinzas. Los extremos pueden cerrarse o dejarse abiertos por la noche para favorecer la ventilación.

La cubierta externa puede retirarse manualmente cuando el tiempo es caluroso, y volver a ser colocada durante las noches frescas. Cuando las plantas rebasan la cubierta de plástico, ésta se retira definitivamente. La sustituye una malla de plástico con cuadros de 15 cm para dar soporte y tutorar las plantas a medida que crecen. Los invernaderos de aros con cubiertas móviles de plástico funcionan bien para cultivar plantas de tamaño mediano a grande. Además de ser baratos, los invernaderos de aros son fáciles y rápidos de instalar. Las plantas pueden trasladarse antes o después de instalar el invernadero de aros.

Construcción de invernaderos

Tanto los invernaderos grandes como los pequeños requieren tiempo, dinero y espacio. Los invernaderos con cimientos son más permanentes. Con independencia del tipo de invernadero que construyas, éste debería ser instalado en un terreno plano y tener fácil acceso.

Esta sección del capítulo dedicado a los invernaderos expone las distintas opciones de construcción, tratando los puntos principales a considerar. No obstante, proporcionar instrucciones de construcción con diagramas va más allá del alcance de este libro. Para más información específica, busca en internet “planos de invernaderos”.

Tamaño del invernadero

El área total del invernadero está determinada por el número de plantas que tienes intención de cultivar y por el tiempo que estarán las plantas en el suelo o en macetas. Cuando más tiempo crezcan las plantas, más espacio necesitarán, y más problemas pueden surgir. Induce la floración de las plantas cuando midan 90 cm de altura, y deja un mínimo de 0,8 metros cuadrados para las variedades con predominancia Indica y hasta el doble de espacio para las variedades con predominancia Sativa. La circulación de aire entre las plantas puede convertirse en un problema si las plantas se hacen demasiado grandes.

Los ejemplares grandes que son trasplantados a principios de temporada suelen rebasar el invernadero, esto hace necesario retirar la cubierta exterior para que el crecimiento no se vea afectado. La amplitud del espacio resulta esencial en los invernaderos. Al menos la mitad del espacio dentro de un invernadero deberían ser huecos. Estos espacios son necesarios para el intercambio y la circulación del aire, así como para la ventilación. Los mohos, ácaros e insectos dan problemas en los invernaderos que carecen de suficiente espacio libre. Por regla general, las plantas deberían ocupar entre el 33% y el 50% del espacio del invernadero, y el aire debería ocupar entre el 50 y el 66%. Esta proporción permite que haya una circulación de aire adecuada.

Estructura

La estructura puede ser de madera, bambú, metal o plástico. El montaje de armazones con unas dimensiones específicas a base de paneles enmarcados tiene la ventaja de que su instalación es rápida, al igual que el desmontaje para el invierno. Construye todas las estructuras utilizando dimensiones estándar para los cristales enmarcados, los paneles de plástico y las láminas para aprovechar al máximo los materiales y trabajar con más eficiencia. Por ejemplo, un invernadero de 2,4 metros puede construirse con dos paneles de fibra de vidrio de 120 cm. La altura central depende del nivel de los aleros. Las plantas bajas tienen suficiente con una altura de alero de 1,5 metros; las plantas altas necesitan de 3 a 4,5 metros. El espacio para los pasillos es importante para facilitar el acceso en el invernadero.

Demasiados jardineros se ven sorprendidos cuando sólo queda espacio para pasar a rastras por el suelo. El exceso de follaje, ya sea en invernaderos grandes o pequeños, impide la circulación de aire y favorece los ataques de enfermedades y plagas, así como la rotura de hojas y ramas. En los invernaderos grandes, disponer de espacio suficiente para poder mover una carretilla es especialmente valioso cuando las plantas rebasan los lechos de cultivo. El suelo del invernadero puede cubrirse con tela antihierbas, grava, ladrillos o cemento. Instala una manta térmica bajo la cubierta del suelo para aislarlo del frío. En invernaderos pequeños, una base de corcho evita que el frío de la tierra afecte a los contenedores y al invernadero. También puedes preparar lechos elevados, planos o hundidos en el suelo del invernadero. Los suelos de tierra pueden embarrarse y son difíciles de mantener “limpios”. Cubre de serrín o paja los suelos embarrados. Una base de madera, ladrillo o cemento alrededor del invernadero añade estabilidad a la estructura.

Plantar en el suelo de tierra del invernadero te permite emplear métodos orgánicos. Las plantas no pueden ser trasladadas con facilidad, pero se hacen más grandes y requieren menos mantenimiento que las plantas cultivadas en contenedores. Al no haber contenedores, las plantas también tienen un perfil más bajo, aunque me siguen gustando los lechos elevados. Cultivar en tierra madre es siempre mejor que plantar en macetas cuando se cultivan plantas grandes. La mayoría de principios que se aplican al cultivo de exterior también son aplicables al cultivo en invernadero.

Bancos

Los invernaderos equipados con bancos hacen que sea mucho más fácil atender las plantas. Los sistemas de captación de agua también pueden ajustarse para reciclar la solución nutriente. Me gustan los invernaderos con mesas de cultivo porque las plantas se mantienen más cálidas cuando están alejadas del suelo, y el acceso a ellas resulta más sencillo. El hueco que hay debajo de los bancos puede servir como espacio de almacenamiento para contenedores y depósitos de agua. Instala mesas de cultivo a lo largo del invernadero para aprovechar el espacio al máximo. Deja 90 cm como mínimo entre las mesas y las paredes del invernadero para dar cabida al crecimiento de las plantas y disponer de un acceso cómodo.

Este artículo es un extracto del capítulo 11, “Invernaderos”, de The Cannabis Encyclopedia (596 páginas, más de 2.000 imágenes en color, gran formato A4), por Jorge Cervantes, que está disponible en inglés. Más información en el sitio web de Jorge, www.marijuanagrowing.com. Jorge Cervantes

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