Crecimiento vegetativo ralentizado:

La mayor parte del tiempo intentamos que nuestras plantas crezcan tan rápidamente como su genética lo permita. Un crecimiento más veloz desde el principio permitirá el desarrollo de más puntos de crecimiento y plantas más densas, con menos probabilidades de que los patógenos o los bichos se asienten, lo que llevará a obtener la mayor cosecha en el menor tiempo. 

La mayor parte del tiempo intentamos que nuestras plantas crezcan tan rápidamente como su genética lo permita. Un crecimiento más veloz desde el principio permitirá el desarrollo de más puntos de crecimiento y plantas más densas, con menos probabilidades de que los patógenos o los bichos se asienten, lo que llevará a obtener la mayor cosecha en el menor tiempo. 

Mucha gente germina sus semillas en un pequeño espacio vegetativo, luego crecen las plantas hasta que alcanzan el tamaño deseado y se pueden trasplantar a un espacio mayor dedicado a la floración. Pero, ¿qué pasa si necesitas un descanso? ¿cómo paras el crecimiento vegetativo de las plantas para evitar que ocupen el pequeño espacio disponible demasiado deprisa?

En ocasiones, la vida tiene circunstancias que afectan al calendario de cultivo –una mudanza, enfermedad, accidente, vacaciones, una sala de floración que necesita arreglos, fallos en el equipo… hay un montón de razones por las que puede que necesites frenar temporalmente el ritmo de crecimiento de tus plantas.

Un amigo mío cultiva a muy pequeña escala. Tiene un espacio limitado por lo que cultiva sus plántulas en un diminuto armario antes de trasplantarlas a su espacio principal. Justo cuando sus plantas estabas listas para ser trasplantadas y puestas a florecer tuvo un accidente de coche, no iba a poder ocuparse de las plantas en floración durante varias semanas –tenía movilidad limitada por lo que no podía limpiar y organizar el sistema hidropónico y no tenía a nadie a quien le pudiera pedir ayuda. Las plántulas ya estaban bastante grandes y a punto de llenar la zona de crecimiento. ¿Qué podía hacer? ¿Cómo conseguir que las plantas parasen de crecer mientras se recuperaba?

En primer lugar es importante que las plantas estén sanas. Metódicamente, hay que repasarlas una por una y eliminar cualquier hoja muerta o enferma. También vigila las raíces, si hay algo de pythium (pudrición de raíces) elimina las partes en las que las raíces se han vuelto marrones. Con suerte no tendrás que hacer ninguno de estos tratamientos, pero si no hay más remedio puedes ayudarlas a recuperarse con una suave dosis de un complejo vitamínico anti estrés como Super Thrive, Revive, etc. Si tienes la posibilidad, puedes desinfectar las hojas y las raíces pulverizándolas con agua ozonizada.

Ahora debes ir en contra de algunas de las reglas más importantes, así que prepárate para un cambio de táctica. ¡Por una vez, no queremos crecimiento rápido! Al menos hasta que estemos listos para acelerar el crecimiento de nuevo.

Lo primero es bajar el EC de nutrientes de la solución. Cada planta es diferente, por supuesto, pero como ejemplo digamos que estás alimentándolas con fertilizante de crecimiento a un EC de 1,6 y pH 5,5. Yo bajaría el EC hasta 1,2 o 1,3. Esto ayudará a reducir el ritmo de crecimiento, pero si no bajas también el metabolismo de la planta en otros aspectos te encontrarías con una deficiencia. Para de aplicar cualquier estimulador rico en nitrógeno u hormonas de crecimiento. Limítate a la versión básica del nutriente, sin aditivos, los aditivos funcionan mejor cuando todo lo demás está optimizado y, en la situación actual de crecimiento lento, los aditivos serían como poner el turbo en un coche con las ruedas gastadas.

El segundo gran ajuste consiste en bajar la temperatura. Las plantas más populares para hidroponía crecen a la mayor velocidad con temperaturas de entre 21 y 26º C durante el día, que no desciendan más de unos seis grados durante la noche. Como queremos ralentizar el metabolismo y limitar el crecimiento rápido, podemos bajar la temperatura hasta 15º C durante el día, y algo más fría durante la noche. Esto reducirá considerablemente el crecimiento sin hacerles daño a las plantas. Pueden soportarlo perfectamente.

El tercer ajuste es el de la luz. Por supuesto, es importante mantener el fotoperiodo actual (por lo general, 18 horas de luz y 6 de oscuridad durante la fase de crecimiento vegetativo), pero hay que reducir la intensidad de luz disponible, ya que esto también reduce el ritmo de crecimiento. Si redujeras la intensidad de luz sin bajar al mismo tiempo la temperatura y el nivel de EC de la solución nutriente, las plantas se estirarían considerablemente. Por eso es importante realizar todos estos pasos al mismo tiempo. Además es importante que la luz siga estando bien repartida por todas las plantas, ya que no interesa dejar a ninguna a la sombra, pero hay que reducir aproximadamente a la mitad el número total de lúmenes que llegan hasta ellas. Dependiendo del tipo de sistema que tengas, puedes apagar algunas luces o, como alternativa, puedes subir las lámparas, alejándolas de las plantas, lo que también reduce el número de lúmenes disponible. No eleves las lámparas demasiado, la intensidad de la luz y la distancia siguen la ley del cuadrado de la distancia –por lo que si la distancia entre la luz y las plantas se dobla, las plantas sólo reciben la cuarta parte de lúmenes.

Estos tres pasos ralentizarán considerablemente el crecimiento de las plantas, te permitirán mantenerlas a la espera durante unas pocas semanas, sin causarles ningún daño permanente.

Otra buena idea para parar el crecimiento es pinzar las puntas de las ramas. La planta tardará un par de día en reanudar el crecimiento y aumentará su crecimiento lateral. Es probable que ya hagas esto, en combinación con otras técnicas, para conseguir plantas frondosas como arbustos, pero también se puede emplear para detener un poco el crecimiento vegetativo.

Asegúrate de cuidar las plantas durante estas semanas. No te olvides de las raíces y vigila en busca de plagas. Un mayor periodo de tiempo en crecimiento significa que hay más tiempo para que aparezcan y se desarrollen los problemas, así que mantén el cuarto de cultivo tan limpio y a punto como sea posible.

Mi amigo, el que tuvo el accidente de coche, mantuvo sus plantas en espera usando estas técnicas ¡durante más de siete semanas! No hubo complicaciones, deficiencias ni estiramientos, ahora sus plantas están sanas y creciendo de nuevo al rápido ritmo habitual.

Una vez estés listo para devolver las plantas a su régimen de crecimiento rápido, sólo hay que volver a la rutina habitual, aumenta la intensidad de luz, sube la temperatura y el nivel de EC de la solución nutriente hasta los valores normales a lo largo de unos pocos días, luego empieza a introducir tus aditivos preferidos de nuevo. Las plantas se adaptarán enseguida al esquema de siempre.