Nutrición y riegos

Exitable
23 Apr 2014

Mezclando con Gunter


Mezclando con Gunter

Hoy vamos a tratar las mezclas de nutrientes y los riegos con estas. Para empezar, sería muy recomendable leerse el artículo “Cultivando con Gunter” publicado en el nº1 de 2014, o leerlo en la web pinchando aquí. Lo que hoy comentamos (igual que todo en realidad), complementa a ese artículo de inicio de sección.

Primero, describiros el indoor tipo sobre el cual vamos a explicar nuestro ejemplo. Imagínate una sala con 2 o 3 focos de 600W, temperatura y humedad estables, hay diferentes plantas, unas más grandes otras más pequeñas, pero todas en estado vegetativo a 10 días de entrar en la floración. Hace unos días les hicimos transplantes (lo últimos de todo el proceso) así como un lavado con encimas por exceso de nutrición. Lo que queremos hacer es aprovechar para darle a las plantas un poco de todo antes de que se ponga a florar y cambiemos el régimen de la dieta.

 

Material necesario:

Para regar tus plantas, necesitarás primeramente un recipiente lo suficientemente grande como para verter todo el agua que te haga falta para regar todas tus plantas (mostraremos como calcularlo más abajo). Nosotros usamos una cubeta grande de 100 litros que es la que vamos a dictar como referencia. Dentro de esa cubeta, contamos con un palo para remover (parece que no, pero el palo es importante) así como una sonda (más importante aun)

Esta sonda se trata de un dispositivo Blue Guardian. Lo mejor de este aparato es que te lo mide todo con la mayor precisión y en un sólo aparato. Como ya os conté en “La dieta de Gunter”, lo ideal es que no pasen más de dos semanas sin comprobar que lo tenemos calibrado. El primer dato que nos da es la EC, seguida de la temperatura del agua y el pH de la misma.

Productos: es decir, todos los botes de nutrientes que vayamos a usar en el punto del proceso en el que estemos. En este caso amplificativo, hemos usado enraizador, N, P Y K por separado, silicato, así como A y B para tierra y claro está, un corrector de PH.

 

Metodología:

Hay que tener presente que la sala, por lo tanto las plantas y sus raíces, están alrededor de 23ºC. Más de una vez os he comentado como lo ideal es que el agua esté a 18ºC para que tenga la mayor cantidad de oxígeno sin llegar a estar fría. En nuestro caso, verter un riego a esa temperatura con una diferencia de 5 grados va a provocar un estrés en el sistema radicular, por lo que intentamos que el agua no baje de los 20ºC (tranquilos que aun contiene gran cantidad de oxígeno). Rellenada la cuneta entera, el medidor nos da que sin ningún producto ya tenemos 0,1 de EC así como un pH súper alto de 8,8. A partir de aquí empezamos a mezclar productos:

-El primero es el enraizador, que para ser un sólo producto que se usa relativamente poco, sube claramente la EC pero nos regula algo el pH. Usar enraizador a una semana de floración tiene como objetivo fomentar el sistema radicular por toda la maceta tras el trasplante que se hizo hace unos días. En total hemos usado 30ml de BioRhizotonic para 100l de agua y nos ha quedado una EC de 0,3 y el pH a 8,8 después de remover con el palo y homogeneizar la mezcla. Seguimos vertiendo productos.

-El N, P y K por separado. Normalmente lo botes de alimento viene ya con una mezcla de ellos, aunque también los dispones por separado en diferentes casas de fertilizantes. Nosotros hemos usado los mononutrientes de Canna en estas medidas: Nitrógeno (N) 40ml, Fósforo (P) 30ml y Potasio (K) 30ml en 100l. Tras mezclar nos hemos subido la EC a 1,1 y el pH sigue bajando hasta 7,8. Aun nos queda hasta alcanzar la EC deseada para el estado en el que nos encrotramos, que será entre 1,5 y 1,6.

-Silicato. Exactamente hemos usado un poco de Rhino Skin de Advanced Nutrients. El silicato hace que los tallos se fortalezcan y endurezcan, lo cual nos va a beneficiar en todo el proceso y por lo tanto en la cosecha. La verdad que este producto hace bastante para lo poco o nada que modifica la escala de valores de la mezcla. Sólo lo usamos una vez, a lo sumo 2, en todo el proceso de cultivo. Tras verter 100ml (a ml de producto por litro de agua) la EC y el pH están exactamente iguales.

-Comida base A y B. Para ser más exactos, hemos usado A y B para tierra de Atami B'cuzz. Estos van a formar parte del grueso de la comida para las plantas. Tras verter y mezclar 75ml de cada uno, la solución de nutrientes se nos queda en un 1,5 de EC (perfecto, es la medida que estábamos buscando) y con un pH aun muy alto de 7,5. Sólo nos queda corregir este valor.

-Corrección del pH. Gracias a nuestra base Blue Guardian, que nos mide los valores en tiempo real, podemos corregir el pH del agua bastante fácil sin necesidad de nada más. Empezamos con unas gotas de pH Down y mezclamos para ver cuanto nos lo baja, si nos quedamos cortos, vertemos un poco más. En total, para los 100l, nosotros solemos usar unos 3ml y se nos queda en un pH de 6,1, ideal para que las plantas lo asimilen todo.

 

Riegos:

Esta es una parte importante, saber la cantidad de solución que tenemos que echarle a cada maceta. Sería muy conveniente calcular los litros de agua que vamos a necesitar en cada riego y en base a estos, hacer los cálculos y correcciones en las medidas de productos (aunque en la cantidad de productos no tenemos que fijarnos tanto, sino en la cantidad de EC que nos varía).

Unas medidas generales y básicas (contando con que todo el mundo tiene unas plantas sanas y con un buen sistema radicular) sería 400ml cada 2 días para macetas de 7 litros; o 250ml cada día en plantas entre 3 y 1,5 litros.

 

#CultivandoconGunter

*Texto y foto: Miky Pérez (@mikyperezm)

 

E
Exitable