Checos en dilema sobre marihuana medicinal

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18 Nov 2013

Lo que pasa cuando la legalización se hace a medias.


Apenas hace tres años, lo único que Zdenek Majzlik sabía de Cannabis era servía para hacer sogas. Hoy, el empleado retirado de una planta nuclear es un cultivador experimentado que produce marihuana para su hija, que padece de esclerosis múltiple.

Majzlik enfrenta un dilema: la República Checa legalizó el uso medicinal de marihuana este año, pero mantuvo restricciones sobre el cultivo, la venta y la importación. Para Majzlik, la solución es violar la ley y cultivar marihuana para su hija.

"Ella es mi hija y mi deber es cuidarla", dijo Majzlik, parado frente a una planta de cannabis en su jardín. "Hago lo que tengo que hacer y lo seguiré haciendo. No tengo otra opción".

La marihuana para uso medicinal es legal en numerosos países europeos, en Israel y en 20 estados de Estados Unidos. Partidarios dicen que alivia a los pacientes del dolor y síntomas debilitantes de enfermedades como cáncer, esclerosis múltiple y mal de Parkinson, cuando otros tratamientos fallan.

El parlamento checo legalizó la marihuana medicinal este año por abrumadora mayoría y la ley entró en vigor el 1 de abril. Pero unos 20.000 pacientes que se estima son elegibles para recibir tratamiento con marihuana no tienen posibilidad de recibirla legalmente — aunque hasta ahora la policía mayormente ha ignorado a cultivadores clandestinos como Majzlik que, de lo contrario, podrían ser enviados a prisión.

Pacientes y expertos médicos culpan al Ministerio de Salud, que se ha opuesto férreamente a la legalización.

"El Ministerio de Salud hace todos los esfuerzos para que no se cumpla la ley", dijo el doctor Tomas Zabransky, asesor de la Unión Europea y la ONU sobre política de drogas. El ministerio niega estar bloqueando deliberadamente el acceso a la marihuana para uso medicinal, pero nadie cuestiona que sus políticas han creado barreras para el acceso legal de los pacientes a la droga.

El Ministerio de Salud y su Instituto Estatal de Control de Drogas prohibieron que las compañías de seguros médicos cubran los costos de la marihuana medicinal, y fija la cantidad máxima que los pacientes pueden consumir en 30 gramos mensuales, algo que Zabransky dice es mucho menor de lo necesario para alivio.

Jindrich Voboril, coordinador de política nacional de drogas del gobierno, dice que las condiciones para obtener marihuana medicinal son "innecesariamente limitantes y discriminatorias".

Zabransky dice que la única opción real de los médicos es recomendar a sus pacientes que obtengan la marihuana ilegalmente, ya sea cultivándola o comprándola en el mercado negro.

*Fuente: El Nuevo Harald

*Editado por Miky Pérez

 

 

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